Igual que Cabeza de Vaca, también tiene, todo indica, vocación social y del lado de la izquierda, pues el egresado de Chapingo se cobijó al lado, entre otros, del ingeniero Heberto Castillo, el gurú y tlatoani de la izquierda delirante.
De pronto, Patrocinio apareció en la cancha polí­tica, social y mediática de Veracruz y ayer fue ungido como secretario General de Gobierno del futuro gobernador, Cuitláhuac Garcí­a Jiménez, ambos, igual que Manuel Huerta Ladrón de Guevara, Amado Cruz Malpica, la profe Gloria Sánchez y Rocí­o Nahle, formados y cuajados a la sombra de AMLO.
Pero Patrocinio, todo indica, ha desarrollado la mayor parte de su vida polí­tica en Baja California, lejos del Cristo negro de Otatitlán, de donde es originario.
Allá, se enroló con el gobernador del PRD, Leonel Cota Montaño, y escaló cargos públicos.
Entre otros, tesorero municipal en el Ayuntamiento de Mulegé, al lado del alcalde Guillermo Santillán Meza, tiempo donde supo y conoció del fuego amigo y enemigo en el carril mediático, pues le zumbaron el botón nuclear, según refiere el politólogo Carlos Ronzón Verónica.
Incluso, hasta lo señalaron de malos manejos y de nepotismo abriendo el surco para un hermano y una sobrina.
Peor tantito, hubo quienes buscaron involucrarlo en malos manejos con la obra pública municipal de unos cincuenta millones de pesos.
Luego, y ante la adversidad, renunció a la tesorerí­a y reapareció como director de Catastro en el Cabildo de La Paz y hasta fue señalado de descarrilar la carrera de los polí­ticos locales que siempre lo consideraron un arribista.

SU VIDA EN EL PRD, PT, MC Y MORENA

De acuerdo con su biografí­a fue asesor polí­tico de los diputados federales, Rocí­o Nahle y Cuitláhuac Garcí­a, pero su desarrollo y crecimiento polí­tico está más al lado de AMLO, para quien operara en Veracruz durante los últimos tres años, con bajo perfil, como el topo de Carlos Marx, trabajando en el subsuelo, abonando la posibilidad del triunfo de MORENA, y que fue tan arrollador el primero de julio con la gubernatura, la mayorí­a en el Congreso local y la mayorí­a de diputados federales, las dos senadurí­as y la presidencia de la república.
Ahora, lo han presentado en sociedad llamado a figurar como el dos del palacio principal de gobierno de Xalapa, encargado de la polí­tica polí­tica.
Entre las elites priistas, panistas y perredistas, Patrocinio es un desconocido, no obstante que, por ejemplo, ha tenido la misma biografí­a de tantos otros polí­ticos que, como en su caso, iniciaron en el PRD, pasaron al PT, siguieron al Movimiento Ciudadano y han terminado, por ahora, quizá para siempre, en MORENA.
Y es que bastarí­a recordar que AMLO, por ejemplo, comenzó en el PRI, pasó al PRD y terminó con su MORENA.
Manuel Bartlett Dí­az, el tan polémico director de la Comisión Federal de Electricidad que será, comenzó en el PRI donde alcanzó espacios memorables y pasó al PT, donde se ha detenido, sin dar el paso fundamental de vestir el ropaje de MORENA.
Y aun cuando Giovanni Sartori decí­a que la migración cirquera de un partido polí­tico a otro desmerece la vida democrática, ni hablar, se trata del signo de los tiempos, aun cuando, claro, otra cosita, mejor dicho, una fregadera es pasar de la izquierda delirante a la derecha delirante.

75 GOBERNADORES EN VERACRUZ

Éric Patrocinio es agrónomo y manejará la polí­tica-polí­tica de Veracruz.
Pero, bueno, los profesores Genaro Vázquez y Lucio Cabañas también estaban ultra contra súper ligados al campo y fueron lo que fueron.
Igual, digamos, Emiliano Zapata y Pancho Villa.
Igual, por ejemplo, César Sandino, el héroe civil imborrable de Nicaragua.
Además, luego del ingeniero quí­mico, el ex panista Gerardo Buganza Salmerón, dos veces titular de la SEGOB jarocha con Javier Duarte…
Y luego de Érick Lagos Hernández, reprobado en la facultad de Leyes de la Universidad Veracruzana…
Y luego del poeta Manuel Maples Arce como secretario de Gobierno con el general Heriberto Jara de gobernador, todo es posible.
Patrocinio, por ejemplo, llega al cargo como una expresión directa, sin rodeos, de AMLO, el virtual presidente, y a quien le debe lealtad y gratitud por las oportunidades polí­ticas conferidas.
Y por el bien de Veracruz, “y por el bien de los pobres y de los pobres entre los pobres”, los 6 de los 8 millones de habitantes en la jodidez desearí­an que entre el futuro secretario de Gobierno y el
gobernador y los demás jefes máximos de la revolución morenista exista una buena quí­mica, un mejor karma, sin los peores males salidos de la caja de Pandora como son la soberbia, la intriga, la envidia, la venganza y el ajuste de cuentas.
Una nueva generación polí­tica ha llegado al poder sexenal luego de que 75 gobernadores han dejado una población infeliz por tanta pobreza y limitaciones económicas y sociales y con tanta desigualdad en un Veracruz pródigo en recursos naturales.