Dos. En el estadio hubo ultra contra súper vigilancia para evitar que los apóstatas cumplieran su advertencia de bloquear los Juegos y en el Congreso local, donde Duarte entrega el informe y leyera un mensaje, hubo puertas cerradas hasta para los medios. El informe sólo fue para la selecta elite priista.

Aislados, pues, el gobernador, de igual manera que en el III informe efectuado en el castillo de San Juan de Ulúa como una medida segura para garantizar la tranquilidad de la gente VIP.

Tres. La tarde de los Juegos unos estudiantes pretendí­an bloquear la caseta de pago en la autopista de Veracruz a Xalapa, a la altura de La Antigua de Ana de la Reguera y recibieron el manotazo de Seguridad Pública.

Y la mañana del IV informe, solidarios con los ayotzinapos, otros jóvenes, muchos encapuchados, tomaron la ciudad de Xalapa. Primero, destruyeron puertas y ventanas del CDE del PRI. Segundo, tumbaron el busto del último ideólogo tricolor, Jesús Reyes Heroles, de igual manera como Adolfo Mota, Salvador Manzur y Raúl Zarrabal junior derrumbaron la estatua de Vicente Fox en el bulevar de Boca del Rí­o. Sólo que ninguno se encapuchó. Todos, con la cara descubierta. Por fortuna, cuando la estatua iba para bajo, huyeron a tiempo en sus camionetas blindadas.

Cuatro. En la inauguración de los Juegos hubo música para el corazón y el alma con Ricky Martin. En el IV informe hubo despensas y tortas para los acarreados a un evento que fue a las 8 de la mañana, una hora favorable que agarró de sorpresa a los encapuchados y perdieron una nueva oportunidad para expresarse.

VERACRUZ, TERRITORIO DE MATANZAS

Cinco. Los Juegos fueron amurallados por todos lados con la Gendarmerí­a peñista y la Fuerza Civil duartista. Pero el mismo dí­a, una chica fue secuestrada, ultrajada, ejecutada y tirada en despoblado en Cazones, en el norte de Veracruz.

Y el mismo dí­a de los Juegos, en la carretera federal Ixtaczoquitlán/Fortí­n, a la altura del poblado Cuautlapan, fue encontrado el cadáver, con un tiro de gracia y mutilado de orejas y lengua, del mesero Emanuel Josimar Hernandez, de 25 años, reportado desaparecido Entre el III y el IV informe de Javier Duarte existe un vaso comunicante: en las dos ocasiones se acorazó, lejos y aislado del pueblo para evitar desaguisados… desde la semana anterior.

Y el mismo dí­a de los Juegos, en la carretera Fortí­n/Huatusco, fue descubierto el cadáver de un hombre de entre 35 y 40 años, con torturas y el tiro de gracia, a unos cuantos metros del puente “El Jonote”.

Y el mismo dí­a, en Córdoba, la procu dio fe de un par de cadáveres (entre ellos, un hombre de 30 años, Cristian Betancourt Reyes) ejecutados, al parecer, en su casa.

Y horas después del IV informe efectuado en privado en el Congreso, en la carretera Tierra Blanca a Tinajas, comiendo en un restaurante a orilla del camino, fue asesinado el lí­der de la CROC, Jorge Zarco Reyes, de 15 balazos.

Y horas después, en Misantla, los malosos ejecutaron, además de dos tiros de gracia, al ganadero Raúl Pérez Cabrera, en su rancho “El Xocona”.

Es decir, el fantasma de la violencia como capí­tulo inevitable y recurrente de un Veracruz ensangrentado.

Las buenas conciencias dirán que los 15 balazos al lí­der croquista, Jorge Zarco, nada significan, pues, en contraparte, el lí­der nacional de los cañeros, Roque Spinoso Foglia, fue asesinado de 120 balazos a los pocos dí­as de iniciado el sexenio de Agustí­n Acosta Lagunes.

Y, por tanto, en Veracruz se vive en el paraí­so.

Seis. En los Juegos, la locura fue Ricky Martin con las cuatro canciones interpretadas, entre ellas, “La vida loca”, y Yuri cantando el himno nacional, mientras en el IV informe el autoincienso giró alrededor de la obra pública deportiva más importante en toda la historia de Veracruz, construida, por cierto, con recursos federales.

SíMBOLOS DE DUARTE

Ocho. Según el corresponsal de Proceso, Noé Zavaleta, la noche de los Juegos asistieron 20,500 personas y según el director estelar de noticias de TV Más, Jorge Faibre, 30 mil. Y según el boletí­n, la inauguración fue vista por 150 millones de personas en el continente a través de la televisión.

En el IV informe, Duarte llegó acompañado de los secretarios Érick lagos, Fernando Bení­tez Obeso y Marco Antonio Aguilar Yunes.

Y como Duarte es un polí­tico de sí­mbolos y señales como parte de su lenguaje criptográfico y polisémico, entonces significarí­a lo siguiente:

Lagos es su candidato a gobernador en el año 2016.

Marco Antonio Aguilar Yunes pasarí­a a la Secretarí­a General de Gobierno.

Y Fernando Bení­tez (así­ también se llamaba el gran escritor y reporterazo y cronista de los indios de México) goza de su absoluta confianza por más que los lí­deres sindicales estén denunciando, en las horas que corren, un adeudo millonario a los burócratas de la Secretarí­a de Salud.

Nueve. En la apertura de los Juegos hubo abucheos al presidente y al gobernador. Los aplausos fueron aislados. Ricky Martin, claro, se llevó la noche, reproduciendo la teorí­a polí­tica romana: “al pueblo pan y fiesta”.

En el IV informe, la oficina de prensa del Congreso local publicó tuiters en las redes sociales subrayando un par de ejes: 732 empresas creadas en el sexenio de las mil programadas y que 97 de cada cien habitantes de Veracruz tienen el servicio de energí­a eléctrica en sus casas, incluidos, claro, los 800 mil indí­genas de las ocho regiones étnicas de la tierra jarocha.

Diez. Quedó mostrado que entre el gobernador y el secretario General de Gobierno hay quí­mica y están en la misma sincroní­a.

Por ejemplo, a propósito del doble abucheo a Peña Nieto y el abucheo a él en el estadio de fútbol, Duarte dijo que se debí­a a la libertad de expresión; pero también a la energí­a y vitalidad del pueblo jarocho.

Sobre la marcha en Xalapa el dí­a del IV informe, cuando destrozaron puertas y ventanas del PRI y tumbaran el busto de Reyes Heroles, Érick lagos se remitió a los Juegos, diciendo que estaba contento y feliz porque habí­an asistido 25 mil personas para dar fe del buen gobierno duartista.

Lo más indicativo de todo es el aislamiento y el blindaje con que el gobierno de Veracruz rindió el III y IV informe. Porfirio Dí­az y Victoriano Huerta también se amurallaban en su informe presidencial. Y se ni diga Nicolás Maduro en Venezuela y Rafael Correa en Ecuador y Vladimir Putin en Rusia. Y ni se diga íngel Aguirre cuando gobernaba en Guerrero y Fausto Vallejo en Michoacán y Eruviel ívila en el estado de México.

TIPS PARA VIVIR MEJOR

Los Juegos del hambre llama Proceso 1985 a los Centroamericanos.
Hay abucheos en Veracruz porque hay libertad de expresión. Ajá.
Congreso blindado. Fuera los medios. 20 minutos de Javier Duarte para IV informe.
Todo amarrado para que Crisanto ganara medalla de oro. Ajá.
Dos veces quemaron el PRI alumnos de UV, que repudian a rectora Sara Ladrón.
Reprobados casi mitad de policí­as de Veracruz.
Con Nemi, mucho show sobre Finamed, que sigue abierto. ¿Para que tanto alarde?
Érick Lagos culpa a Arturo Bermúdez de protesta estudiantil.
Peña Nieto, mejor cállate. Nadie cree tu dolor y pena por ayotzinapos.
Avionazo en Monterrey: mueren esposa e hija de polí­tico de San Luis Potosí­.
Medio millón de pesos ganan ministros de Suprema Corte de Justicia.
¿Encapuchados del PRI son los mismos de USBI y palacio de Xalapa?
Malandros han extorsionado a escuelas de Motita. Lo que faltaba a Fitito...
Otra vez procu de Veracruz pide revisión de caso de Maryjose Gamboa.
Cuatro ejecutados en región de Córdoba en últimas 24 horas.
The Economist: Peña Nieto, de mal en peor. En Veracruz, JD, a toda madre.
Brazos caí­dos en Universidad Pedagógica de Orizaba. Prestaciones pendientes.
Orden y eficacia en Veracruz dice Duarte. Que se escuche en Los Pinos.
Jarochos, sabed. “Tu tranquilidad, nuestro compromiso” dice Javier Duarte.