Michelle Serví­n González salió a la luz pública cuando la ex alcaldesa de Xalapa, Elí­zabeth Morales Garcí­a la nombró presidenta del DIF municipal. Desde tiempo atrás habí­a estado relacionada sentimentalmente con la ahora presidenta del PRI estatal y desde entonces, la nombraron una de sus "barbies".

Pero la actual sindica del ayuntamiento no se considera una de esas muñecas bien maquilladas y paradas de puntillas por el alto de sus zapatos. "Yo soy quién soy, hay muchos señalamientos hoy en dí­a y mantenerte bien, hacer ejercicio, pues si eso les llega a afectar a mucha gente, pues no importa".

¿Cómo se define Michelle Servin?

"Me considero una mujer inteligente, audaz. Que me gusta escuchar y ayudar a la gente. Me siento muy afortunada, la vida hay que verla siempre hacia adelante. Yo creo que yo he sido una mujer afortunada. He luchado sí­, no ha sido nada fácil. La polí­tica es una profesión difí­cil más que nada".

Xalapeña de nacimiento, recuerda su niñez como una etapa de plenitud y muchas actividades fí­sicas. Recuerda haber sido inquieta, con í­mpetu deportista. "Le pedí­a a mi mamá que me echara de cabeza en la resbaladilla".

Querí­a ser tenista profesional pero cuando llegó el momento de decidirse por una carrera, fue práctica. Pensó en algo que le pudiera generar ingresos económicos desde que egresara. Estudió contadurí­a en la Universidad de Xalapa.

A la polí­tica llegó "trabajando", cuando iba en el último semestre de su licenciatura, fue invitada a trabajar en la secretarí­a de gobierno para cumplir su horario de servicio social. Ahí­ fue conociendo a trabajadores que posteriormente la fueron enlazando en otros trabajos.

"Yo empecé desde servir el café y el agua, y cargar y subir, y eso me ha enseñado a ganarme las cosas, a saber lo que cuesta estar en un puesto". Después fue la enlace administrativo de la Secretarí­a del Trabajo.

Elí­zabeth Morales Garcí­a la invitó a trabajar con ella cuando era diputada federal. Por su esfuerzo, logró ser nombrada directora del DIF municipal en la pasada gestión. Recordada por sus bromas y cifras improvisadas para evadir los cuestionamientos de la prensa cuando no sabí­a responder a algo.

Considera que tiene "el don de dar" y que por eso la colocaron en ese puesto. Lo que otorga es el apoyo que la gente necesita, y si no se puede "pues con un apapacho se van".

¿Elí­zabeth Morales es tu madrina polí­tica?

Divaga en su lenguaje: "Fí­jate que, yo creo que aquí­, prácticamente", luego responde: "creo que me lo he ganado. Yo empecé de abajo, entré a gobierno, fui escalando, entré efectivamente a trabajar con ella. Me dio la oportunidad de ser directora y también me gané a la gente".

Con las uñas largas y las pestañas llenas de rimel, Michelle se acomoda en la silla acolchonada de su nuevo escritorio. A cada momento la interrumpen para darle notificaciones, pero prefiere seguir en la entrevista. Le gusta hablar de sus "logros".

"Voy caminando, yo me he abierto las puertas de aquí­ en adelante. He tenido pies de plomo porque muchas veces te puedes volar por la misma gente que está encima de ti pero he sabido controlar todo lo que es la polí­tica".

¿Le afectan las crí­ticas en su contra?

Michell Serví­n fue señalada de realizar un deficiente trabajo en el DIF municipal, luego de ser la responsable de los acarreos de gente para la campaña polí­tica de Enrique Peña Nieto y Américo Zúñiga Martí­nez, así­ como para eventos que al gobierno del estado le importaba ver atascados de asistentes, como el grito de independencia en Xalapa.

Pero también ha sido constantemente juzgada por fotografí­as donde aparece abrazando o tomada de la mano con Elí­zabeth Morales. "Los puestos que tenemos como polí­ticos, siempre he dicho que vamos a estar expuestos a las criticas de la demás gente. Es cono los artistas, hay que estar bonita y hacer ejercicio porque te van a criticar".

Las criticas, cuenta, se las quita trabajando y comprendiendo que los ataques siempre van a existir y que no tiene la obligación de hablar de su vida personal porque cada individuo tiene el derecho a mantener su vida privada.

"No digo que sea muy padre pero no sé en que les afecta. No sé porque la gente comienza a decir sin saber, y si tienen algo, pues va. Yo creo que trabajando vas quitando muchas ideas".

¿Piensa buscar otro cargo polí­tico?

"Nunca te voy a decir nunca. Me gusta la polí­tica y ahorita lo que me interesa es sacar esta administración bien. No puedo decir que va a pasar, la vida te va llevando y la polí­tica es de paciencia y conciencia".

Lo Mejor y lo Peor de su Vida

Los momentos más satisfactorios, han sido su titulación de la licenciatura y sus tomas de protesta como directora del DIF y ahora como sindica municipal. También el nacimiento de sus dos sobrinos, que a decir de la forma en que se expresa de ellos, son de las cosas más preciadas que tiene. "Los amo y los adoro, son mi foco".

Fue incluso la enfermedad de uno de ellos, lo que provocó la peor vivencia de Michelle. Hace siete años, el niño presentó lectospira "la enfermedad de la rata", la familia pensó que morí­a y tuvieron que realizar todo lo necesario para poder llevarlo con especialistas en la Ciudad de México.

"Tuve muchos ángeles que me ayudaron, recuerdo que me endrogué hasta las manitas pero cuando lo vi bien dije: valió la pena. Fue por estas fechas, se recuperó antes de mi cumpleaños y le dije: Tavo, fue el mejor regalo que me pudiste haber dado".

¿Y no piensa tener hijos propios?

"Fí­jate que sí­ me gustarí­a. Estoy en una edad en la que digo: pues sí­, quiero tener un bebé. Pero por mi puesto, por lo que hago, yo creo que llegará en su momento. Y si no llega, pues no estoy aferrada. Los dos sobrinos que tengo me llenan".

¿Hay algo que te falte por hacer?

No encuentra algo que no haya podido realizar. Dice que ha viajado y conocido muchas cosas. Por el momento no desea más que seguir en armoní­a con su familia y poder continuar trabajando.

"Espero tener paz, mucha tranquilidad. Soy de las mujeres que les gusta escuchar mucha música. Y en lo laboral, pues las oportunidades llegan solas. Estoy completa".