Nueva pandemia
**Acoso sexual
**Y es más peligrosa
ESCALERAS: Hay una nueva pandemia en Veracruz. Acaso es más intensa y volcánica que el COVID y que, bueno, está de regreso duro y tupido. La pandemia sexual. El acoso sexual. El hostigamiento sexual.
Incluso, como aquel maestro de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana, UV, Francisco Javier, con su recadito tecnológico a una estudiante, objeto y sujeto de su deseo: "O te acuestas conmigo o presentas proyecto final".
Luis Velázquez
De hecho y derecho, sexo… a cambio de calificaciones.
PASAMANOS: Por eso, el rector de la UV abierto a las denuncias por acoso sexual y en donde la Unidad de Género de la UV (Anabel Ojeda) revela que del año 2022 a la fecha 83 (ochenta y tres) denuncias por violencia de género, además de cinco catedráticos despedidos y par de estudiantes expulsados.
Y la secretaría de Educación, de igual manera.
Y uno que otro Ayuntamiento de Veracruz, igual, luego de que hasta el presidente municipal de Poza Rica entró a la práctica freudiana de que “el sexo mueve el mundo” y con una regidora, y a quien, ni modo, la vida es así, debió solicitar perdón en público.
El Instituto Municipal de la Mujer publicando anuncios radiofónicos en las estaciones jarochas convocando a las mujeres a denunciar a los depredadores sexuales, caray, con un regidor y de MORENA, con la denuncia de diecisiete mujeres levantando la mano con “el índice fuego” en contra.
CORREDORES: Abierta la Fiscalía General a las denuncias.
Por fortuna, cuando la diputada local, Anilú Ingram Vallines exhibió a la secretaría General de Gobierno con el acoso sexual, la Contraloría dictaminó que estaba la SEGOB “limpia de polvo y paja”.
BALCONES: Herodes, el emperador romano, enloquecido con Salomé y hasta le entregó en bandeja de plata la cabeza de Juan Bautista, el primo hermano de Jesús, a cambio de sexo.
Adriano, el Emperador, enloquecido con sus efebos menores de veinte años (Antínoo, el más célebre y famoso) y que lo llevara a exiliar a su esposa en el otro extremo del reino para vivir a plenitud el deseo sexual por los chamaquitos.
PASILLOS: Por eso está canijo que el tiempo sacrosanto de la 4T “hecha gobierno”, el hostigamiento sexual esté emergiendo con tanta intensidad volcánica.
Nadie inculpa a la purificación moral de que el deseo sexual incontenible se manifieste.
Pero al mismo tiempo, han de asestar el manotazo implacable a partir de las denuncias penales en la Fiscalía General para que los acosadores pudieran, digamos, reprimirse.
Incluso, hasta convendría que el secretario de Educación extendiera a la población en general los cursos “sobre el control de las emociones” que imparten en varias cabeceras municipales.
Claro, empezando en los Ayuntamientos, pues, y por ahora, y en el palenque público, el alcalde de Poza Rica y de MORENA y un regidor de MORENA en el Cabildo jarocho están en la picota.
VENTANAS: La pandemia sexual es vieja, antigua, milenaria, histórica, bíblica.
Y el deseo calenturiento nació, claro, con el hombre y la mujer y en el paraíso celestial, aun cuando está por dilucidarse si el padre Adán sedujo a la madre Eva y/o al revés.
Entonces, cierto, la educación sexual se impone. Pero al mismo tiempo, el respeto a los más elementales derechos humanos.
Y para aprender la lección, quizá un camino efectivo está en encarcelar a los acosadores, con el riesgo de que la Ley de Talión, tan vigente en las cárceles, alcance el más alto decibel.