Pero los 9 miembros de la Junta Académica deciden en base a otros valores, cualidades, atributos. Incluso, circunstancias políticas.

PASAMANOS: Por ejemplo, cuando la sucesión del doctor Raúl Arias Lovillo, Javier Duarte, a través de Érick Lagos, secretario General de Gobierno, bloqueó la USBI de Xalapa donde sería el último informe.
Entonces, montón de chicos enmascarados con las caras de Raúl Arias y del ex rector de la UNAM, José Sarukhan, miembro de la Junta de Gobierno de la UV, tomaron por asalto la USBI.
Fue suficiente para que el ex rector de la UNAM vislumbrara el regreso de los porros.
Y el candidato amigo de Raúl Arias a la sucesión perdió en automático, bajo el argumento de que desde el gobierno de Veracruz harían imposible la vida a la UV.

CORREDORES: El primer punto para allanar el camino a la Rectoría es el visto bueno de los 9 notables de la Junta de Gobierno.
Se da y concita luego de una entrevista en vivo y directo a cada uno de los aspirantes.
Pero de igual forma, otros actores sociales han de plancharse, pues de lo contrario, el camino está bloqueado.
Uno, el visto bueno de la rectora. Y dos, el visto bueno del gobierno del Estado, pues parte del presupuesto de la UV es aportado por ellos. Y por razón natural, se sienten con derecho a manifestarse.

BALCONES: Podrán los aspirantes a la Rectoría tener buen pitcheo en los medios a través de artículos y/o de entrevistas y notas.
Tendrán de su lado, por ejemplo, a los sindicatos de la UV, quizá el más indicativo, el FESAPAUV, que aglutina a unos siete mil profesores.
El juramento de los campus de la UV, incluso, tanto de maestros como de alumnos.
La bendición de la ANUIES, que aglutina a las universidades públicas de la república.
Pero si la rectora y el gobierno de Veracruz están en contra, se trata de una derrota mil veces anunciada.
Por más que la Junta de Gobierno considere a un aspirante como el mejor.

PASILLOS: Juan Maldonado, 4 veces diputado federal, secretario General de Gobierno en la Ciudad de México, secretario de Educación con Miguel Alemán Velasco, lo decía así:
“En política, nunca llega el mejor, sino el que más conviene”.
Y “el que más conviene” a las tribus políticas del momento.
El fenómeno social y político se reproduce en otras latitudes de la vida pública, entre ellas, la UV.
Bastó el temor del exrector de la UNAM con los porros de Érick Lagos para que a un candidato se le cayera.

VENTANAS: Está bien que el doctor Jorge Manzo sueñe. Ernesto El Che Guevara también soñó y lo mataron en Bolivia. Simplemente, olvidó la realidad real como dicen los científicos sociales.
Y la realidad es que, sin el palomeo y la bendición de los otros actores y factores de fuerza académica, la suprema decisión de la Junta de Gobierno de la UV poco trasciende.
El aspirante a la Rectoría ha de ser un buen cabildero y operador político.
A menos, claro, que la rectora y el góber sean los mejores demócratas de Veracruz y dejen trabajar en paz a los 9 notables…