Su canción preferida, María Bonita, “acuérdate de Acapulco”, es inmortal…

ROMPEOLAS: A primera vista siempre fue insólito el matrimonio de María Félix y Agustín Lara… Ella, una diosa… Agustín, flaco flaco, con una cicatriz en la cara, poco agraciado, una vocecita enclenque, sin ningún atractivo físico, pero al mismo tiempo, gracias a su gran capacidad artística para la creación y recreación y el piano, un hombre codiciado… Talento, pues, además de la fama, mata carita… Más, cuando María Félix había sido pareja de Jorge Negrete, el súper galanazo del cine mexicano…

ARRECIFES: Antes de cumplir los 15 de edad, Agustín Lara tocaba el piano en un burdel de la Ciudad de México… Trabajó en el prostíbulo propiedad de Graciela Olmos, “La bandida”… Allí llegaban los políticos de la época, entre ellos, Plutarco Elías Calles, el presidente de la república quien impuso a 4 sucesores, Emilio Portes Gil, Abelardo L. Rodríguez (dueño de antros en la frontera norte), Pascual Ortiz Rubio y Lázaro Cárdenas… Con el cuarteto, Elías Calles llegaba a “La bandida”… Y todos escuchando a Agustín Lara y cortejando a las muchachas, menos Lázaro Cárdenas, “La esfinge” que siempre permanecía como tal y ningún amorío ni aventura sexual le conocieron…

ESCOLLERAS: Y, bueno, si “El flaco de oro” sedujo, entre otros, a Elías Calles con el piano y sus canciones, con más razón a María Félix, quien, famosa, quiso hacerse más famosa casándose con el famoso Agustín Lara… Por eso, en aquella época siempre dijeron que se trataba de un matrimonio por conveniencia, con todo y que a los 16 años de edad era la máxima ilusión de “La Doña”, quien en el cine interpretara el papel estelar en las películas “La generala” y “La cucaracha”, entre otros, por cierto, prohibidas en el pueblo por la iglesia católica…

PLAZOLETA: Evangelina se llamó el primer amor de Agustín Lara… Era una contadora privada en el burdel de “La bandida”… Las cortesanas la menospreciaban, entre otras cositas, porque lo que ella ganaba en un mes las mesalinas en un ratito de la noche… Y por eso, ella mantenía sana distancia de todos, incluido “El flaco de oro”… Pero como a Lara le gustaba y atraía entonces empezó a componer canciones donde hablaba de unos ojos verdes que Evangelina tenía… Y ahí empezó la curiosidad de ella y terminaron como pareja… Incluso ella se encargó de su manejo contable y hasta de los contratos…

PALMERAS: Igual que María Félix, “muchos amores” tuvo Agustín Lara… Como aquella Rosita, que en el cine interpreta Elsa Cárdenas y que era la canción preferida de Lázaro Cárdenas del Río… Pero sin duda, “La doña” fue la catedral de su aventura amorosa... La mera mera, la jefa… Poco duró la relación… El carácter impetuoso de María descarriló el amor, la pasión y el fuego de otros tiempos… En el hotel Mocambo, de Boca del Río, la pareja se hospedaba y le instalaban un piano en la suite nupcial y que “El flaco de oro” tocaba antes de zambullirse en el tálamo…