Graciosa huida del Fiscal Anticorrupción
Noé Zavaleta/Crónica de Xalapa/Foto: Yerania Rolón
Marcos Even Torres, Fiscal Anticorrupción de Veracruz está solo en una esquina. Solo le faltan unas moscas alrededor, para ilustrar la estampa perfecta de un “apestado”.
Segundo informe de labores del Poder Judicial del Estado, y magistrados se abrazan y sonríen, los electorales con los de justicia administrativa, los de conciliación y arbitraje con los del superior de justicia. Y hasta el Fiscal, Jorge Wínckler “se cuelga” del alcalde de Veracruz, Fernando Yunes para dar la connotación política de que no está solo.
Marcos Even sigue solo en la segunda silla de la primera fila de honor. Se quita y se pone una boina café y agita los tacones de sus finos zapatos contra el azulejo del inmueble judicial como seña irrestricta de nerviosismo. Es su primera reaparición pública desde que Torres Zamudio y el litigante, Rodolfo Reuss, asesor del exsecretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita fueron grabados y exhibidos en “reclamo cordial” por un pacto que supuestamente hizo el gobernador, Miguel íngel Yunes con el imputado, Bermúdez para dejarlo salir de prisión en un máximo de cinco años a cambió de entregar propiedades inmobiliarias en Estados Unidos y en Veracruz, las cuales fueron adquiridos con dinero público.
“Hay que salir con honor y como caballeros, no quiero pensar que de Palacio de Gobierno (en alusión al gobernador) a Guízar y Valencia (avenida donde se encuentra la oficina de la Fiscalía General del Estado) las decisiones cambian”, reprocha de manera cordial, Rodolfo Reuss a Marcos Event Torres, cuando este se desempeñaba como Fiscal Visitador Adjunto en la FGE.
En el audio de diez minutos y que fue filtrado en redes sociales y en cadenas de e-mail, se aprecia como Reuss le comenta a Even Torres que desista de la acción penal en temas patrimoniales con Bermúdez Zurita pues “Don Arturo” ya “entregó todo”.
El hoy Fiscal Anticorrupción repara en las bondades de un procedimiento abreviado, en donde Bermúdez Zurita podría obtener una sentencia menor a los cinco años y así poder salir de prisión. Hay una tercera voz, en dicha reunión que no alcanza a identificarse.
Y así con ese lodazal de corrupción encima, el Fiscal encargado de combatirla no haya donde hacerse. Una reportera se le acerca a pedirle una entrevista, la periodista de pie, el Fiscal sentado, vulnerable, levanta los ojos, cabecea, dos venas se le marcan en la pelona morena. “Ahorita no”, esquiva, “al rato, permítame”, revira ante la insistencia.
Y en el inmueble judicial todo era sonrisas; el magistrado, Alberto Sosa, a las carcajadas con sus homólogos, Fernando Charleston y Javier Hernández. Los magistrados, Irma Dinorah a los abrazos con su sucesor, Pedro García. Edel ílvarez en fundido abrazo con Miguel íngel Yunes y agradecido por la autonomía permitida estos dos años y Marcos Even Torres en el rincón, apenas saludado por el Secretario de Gobierno, Rogelio Franco a quien le tocó compartir silla al lado.
Acabado el evento, y previo al brindis, Torres Zamudio emprendió la graciosa huida, salió por la parte de atrás, pidió apoyo a un escolta para ir a la “salida más próxima”, volvió a ser correteado por reporteros, se negó rotundamente a articular palabra, y cómo pudo, apresurando el paso, salió hacia la calle de Lázaro Cárdenas, consciente tal vez que sus días, en la Fiscalía Anticorrupción están contados.