Forenses de Guatemala auxilian a Colectivo Solecito
•Siguen buscando cadáveres en "Colinas de Santa Fe"
•Trabajarán con maquinaria pesada: Lucía Díaz Genao
•Era cementerio de narcos y del duartismo
Ignacio Carvajal
Un equipo de especialistas de la Fundación de Antropología Forense de Guatemala aterrizó en el puerto jarocho, para auxiliar a las madres del colectivo Solecito en la búsqueda en la fosa de Colinas de Santa Fe.
Entrevistada vía telefónica, Lucía de los íngeles Díaz, vocera del colectivo de madres, informó que los especialistas fueron traídos gracias a gestiones de Solecito, y trabajarán con maquinaria pesada.
Explicó que se trata de una búsqueda a gran escala con equipo de demolición que ayudará a volver más eficiente la manera en que se está trabajando la fosa.
La de Colinas de Santa Fe hasta el momento arroja 284 cráneos rescatados, además de cientos de restos humanos y evidencia de personas que fueron lanzadas allí por la delincuencia organizada y autoridades del gobierno del estado de la pasada administración.
La fosa presuntamente comenzó a ser rellenada desde finales del gobierno de Fidel Herrera Beltrán, por el temible cártel de Los Zetas, y posteriormente tomada por el cártel de Jalisco Nueva Generación.
Una de las problemáticas más complejas localizadas desde los primeros días de la búsqueda, iniciada a mediados de 2016, es la profundidad de los entierros, en algunos casos, hasta dos metros y medio.
Y aunque se ha contado con el apoyo de otros brigadistas, como los Canes de Guerrero y otros colectivos con mayor experiencia, el trabajo que falta es incalculable, explicó Díaz.
El arribo de los forenses de Guatemala -agregó- es algo que se concretó gracias a una visita efectuada a la capital de ese país el año pasado, a una capacitación a madres que buscan a sus hijos en fosas clandestinas, además, gracias al financiamiento de una organización alemana.
Destacó que los especialistas usan la maquinaria pesada para elaborar unas especies de "tricheras" de 50 metros de largo por dos o tres de ancho, sobre las que se va trabajando para extraer los restos. La maquinaria marca las trincheras, y por capas, se realiza el trabajo de localización y recuperación.
Leonel Paíz, el forense especialista al frente del grupo de Guatemala, dijo: "Nosotros sólo hacemos localización, la recuperación no".
Entrevistado a las afueras de la fosa de Colinas, mencionó que uno de los papeles de la fundación que representa, es compartir la experiencia con grupos como Solecito, que son víctimas de violaciones a los derechos humanos.
Comentó que el equipo ha efectuado búsquedas similares en otros países y en Guatemala, donde en años pasados hubo dictaduras militares que emplearon la desaparición forzada y las fosas clandestinas como un método de gobierno.
Detalló que al recorrer el área del panteón de Colinas, les queda claro que es una gran extensión de tierra en la que seguramente hay muchos cuerpos sepultados, y resulta un reto apoyar a las madres.
El grupo estará en el estado de Veracruz una semana, tiempo en el cual ofrecerán experiencias que les han sido útiles en otras búsquedas.
En el entierro clandestino se cuenta con fuerza de tarea de la Fiscalía General del estado, la Secretaría de Seguridad Pública, Policía Científica y voluntarios, así como las madres y padres de Solecito.
La fosa apareció a finales de mayo del 2016, después de que sujetos desconocidos entregaron la información puntual sobre su ubicación, a las madres encabezadas por Lucía Díaz Genao.