Según ellos, una parte de la delincuencia organizada en la zona son familiares de mandos policiacos, y aun así­, forman parte de la corporación policiaca.
El nuevo desafí­o ocurrió el mismo dí­a del sábado dos de noviembre cuando diez personas fueron ejecutadas y descuartizadas.
Cinco en Chacaltianguis, una en Jáltipan, una en Acayucan, una en Cosoleacaque y dos en Coatzacoalcos, denominado ya el infierno más crudo y sombrí­o de norte a sur y de este a oeste de “la noche tibia y callada de Veracruz”.
Por eso, quizá, el titular de la SSP ha dicho que sólo duerme dos horas diarias y trabaja veintidós en el combate a la delincuencia organizada.
Acaso, claro, también sea que dado el infierno heredado por Javier Duarte y que iniciara con Patricio Chirinos Calero cuando el auge del capo José Albino Quintero Meraz, ha sido rebasado por las circunstancias y anda en el peor estrés del mundo.
El caso es que de igual manera como en su tiempo el gobernador Yunes “tiró su espada en prenda” para defender al Fiscal Jorge Wí­nckler y al secretario de Salud, su médico de cabecera, Arturo Irán Suárez Villa, ha defendido como a nadie a Jaime Téllez.
Incluso, y cuando en el carril mediático deslizaron que habí­a renunciado, el góber apechugó la versión y la desmintió cuando viera que en las redes sociales (en las que tanto cree) lo atosigaban, tal cual como ahora con el adjetivo calificativo de “viejo inepto”.
Igual que Miguel Alemán Velasco cuando fue destapado candidato a gobernador y revirara a los crí­ticos que nadie lo habí­a contratado para semental, el titular de la SSP podrí­a adoptar la premisa.

PASAMANOS: Está claro que Veracruz arde. Más claro está que se vive y padece tiempo peor.
Los carteles y cartelitos disputan la jugosa plaza estatal.
Cierto, se matan, descuartizan y aniquilan entre sí­. Pero al mismo tiempo, arrasan con la población civil, la sucia estrategia de Richard Nixon cuando la guerra de Vietnam de colgar los cadáveres de la gente común y sencilla de un árbol a orilla del camino para aterrorizar a la sociedad.
La misma sucia estrategia de los realistas en la Independencia de México luchando frente a los sacerdotes Miguel Hidalgo y José Marí­a Morelos, aquel de quien Napoleón Bonaparte decí­a que “con otro como Morelos conquistaba el mundo”.
Han matado a niños y a mujeres, por ejemplo. Incluso, cuando el asesinato de los cuatro niños de una colonia popular en Coatzacoalcos, el gobernador les llamó “¡Bestias!”.
La guerra, pues, en su dimensión estelar.
Tanta que, por ejemplo, en la cancha del PRI y MORENA apuestan a que dada la inseguridad el PAN y PRD en alianza perderán la gubernatura de seis años en las urnas el primero de julio del año entrante.
El senador Héctor Yunes Landa, ex primo de Miguel íngel Yunes Linares, “a tiro por viaje” se le ha lanzado por el tsunami de violencia que está peor, háganos favor, según dice, que cuando Javier Duarte, y quien igual que César del íngel, de los 400 Pueblos, ha descubierto que enviar cartitas al Yunes azul y a Enrique Peña Nieto es la clave para alcanzar la libertad.
Los tiempos son borrascosos. Más desventurado será para el núcleo familiar del titular de la SSP, porque simple y llanamente está en medio del huracán y exponiendo la vida.

CASCAJO: Veracruz ya no puede con más muertos.
Los forenses están rebasados y los cadáveres guardados hasta en camiones refrigerados salpicando los olores podridos en la población.
La SSP y la Fiscalí­a están sin recursos económicos para enfrentar a los malandros con su armamento sofisticado.
El llamado “ajuste de cuentas” y sus “daños colaterales” (la muerte de civiles) representa el infierno.
Y en la vorágine, el Fiscal de las paellas se ha lanzado una vez más en contra de los trabajadores de la información diciendo que “muchos medios y columnistas” están al servicio del PRI “con un notorio ánimo polí­tico”, refiriéndose a las 5 elecciones, entre ellas, la de gobernador, el año entrante, y en donde el primogénito de Yunes Linares ha sido destapado por el presidente del CDE del PAN, Pepe Mancha, como “el único, el único, el único” precandidato.
Y en tal eje, el Fiscal repite como estribillo desusado, ya sin efecto social porque está demasiado manoseado, que “durante doce años se dejó crecer y asentar la delincuencia organizada”.
Okey, pero con todo, resulta indicativo que como nunca ha sucedido en Veracruz los malandros estén anunciando el peor de los mundos al titular de la SSP.
Y si el discurso maloso se ha expresado, primero, con los cadáveres tirados frente a su despacho jurí­dico, y luego el calificativo de “viejo inepto”, y durante doce meses el rí­o de sangre y el valle de la muerte, sólo amando (como dice el Yunes azul) a Veracruz y con un amor desaforado, fuera de control, Jaime Téllez resistirá.
Los 8 millones de habitantes de Veracruz hemos de estar agradecidos.
Lo decí­a Vicente Guerrero: La patria está encima de todo.