ser exhibida frente a otras madres y padres que buscan a sus familiares no localizados en los últimos diez años.

"El que no asista no quiere decir que dejen de hacer su trabajo. El que no asista no quiere decir que es falta de respeto, porque si es así­, la de usted es una falta de obligación. Es un deber legal que esté al tanto este o no esté yo", recordó Marta.

En dicha reunión, el titular de la fiscalí­a especial, Luis Eduardo Coronel Gamboa sacó una libreta y le citó a Marta, en forma de comentario, sin oficio formal con detalles de la investigación, que la credencial de Iván, su hijo desaparecido, se localizó en una fosa de Colinas de Santa Fe.

La noticia animó a Marta. Después de cuatro años sabí­a dónde estaba su hijo. Al menos, los restos humanos que serí­an procesados para una sepultura.

"No es la forma correcta de informar. No sabes si están buscando en fosas aledañas. He exigido que se busque, que me informen. No por mensajes de Whatsapp" continuó Marta.

El comentario de Coronel se quedó allí­. Ningún informe o siguiente reunión privada fue convocada para detallar los avances de la investigación para dar con los restos de Iván y el porqué de lo ocurrido.

Para que Marta sea notificada verbalmente por el fiscal especializado, debe acudir a las oficinas de la FGE, ubicadas en Arco Sur, rumbo a la carretera Xalapa-Veracruz y solicitar una cita 45 dí­as de anticipación.

"No han agotado ninguna lí­nea de investigación. Hay muchas irregularidades en el expediente, tal parece que quieren entregar el cuerpo y te hacen sentir qué te interesa más, que investiguen o te entreguen el cuerpo de tu familiar. Esa falta de sensibilidad hace que uno esté en estas condiciones de desesperanza, desatención, porque no te hacen saber qué están buscando".

Para encontrar pistas del levantón, desaparición y asesinato de Iván, Marta Islas pasó charlas con el ex Procurador de Justicia, Amadeo Flores, su sucesor, Luis íngel Bravo Contreras y con el ahora fiscal, Jorge Wí­nckler Ortiz.

De los tres, ninguno le informa si es real la existencia de restos humanos de Iván o sólo son pistas para dar con su paradero. De la investigación, no le informan nada a Marta.

"Las autoridades de aquel entonces como las de hoy, que no hay recurso para investigar. Se escudan que hacen investigaciones, pero son absurdas y obsoletas, luego dicen que se equivocan, es una burla que te digan eso, juegan con nuestro dolor".

En la administración de Amadeo Flores, Marta Islas recibió promesas de búsqueda. No se cumplieron. En la dirección de Bravo Contreras, lo mismo. Ambos funcionarios coincidieron en la carencia de recursos económicos para avanzar con las investigaciones del caso.

“Como no habí­a indicios sencillamente no trabajan, se negaban a hacer investigación. El decir que no hay recursos, no es una respuesta de un fiscal, se supone que hay presupuesto para esas investigaciones”.

A cuatro años de iniciar la investigación por la denuncia 615/2013 en la Agencia Séptima de la mesa tres en la Fiscalí­a General del Estado, las promesas de búsqueda se alargaron.

“No sabes si están buscando en fosas aledañas. He exigido que se busque, que me informen, que se preocupen por buscar más indicios y el cotejo de las pruebas de ADN, pero me manda por Whatsapp que lo que se ha encontrado no hay nada. Eso no me dice nada".

En el primer año de la desaparición de Iván, la PGR tomó muestras de ADN a Marta Islas. Se guardaron por dos años y se extraviaron. La segunda ocurrió en septiembre del 2016, cuando personal de la Policí­a Cientí­fica le prometieron cotejar con los restos encontrados en fosas clandestinas de Veracruz.

Las pruebas siguen guardadas. Los mensajes a su teléfono móvil continúan llegando a través de una aplicación. No le mencionan que el ADN ya fue cotejado con los restos localizados en Colinas de Santa Fe.

La toma de muestras de Marta fue una de las 276 captadas correctamente, entre miles que se perdieron y contienen errores para agilizar la identificación de restos humanos. Estos miles restantes están en proceso de actualización, ocupando 36 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP).

Dicho monto se destinó en los servicios periciales que identifican restos de osamentas descubiertas en fosas clandestinas. El dinero lo utilizó la Fiscalí­a General del Estado.

Lucí­a de los íngeles Dí­az Genao, integrante del Colectivo Solecito Veracruz, agregó que no se desglosó los detalles de esta compra, sospechando que se anexa a la corrupción en los casos de desaparecidos en la entidad costera.

“Veo corrupción con letras grandes, lo hacen con equipo que les quieran mandar, entonces aquí­ esto me suelta alarmas porque ellos así­ nos dijeron, que los 36 millones que tení­an, compraron equipo, que ya estaba etiquetado, si no nos sirve ya nos fregamos”.

La compra de los equipos para la toma de muestras fue notificado a familiares de desaparecidos en la reunión del pasado viernes 13 de octubre. El subsecretario de Derechos Humanos en la Secretarí­a de Gobierno, Roberto Campa Cifrián estuvo presente en el informe.

La empresa o cantidad de materiales se desconoce. No existe licitación, fue compra directa con un proveedor. En las adquisiciones recientes de la FGE solo se exhibe públicamente la licitación número LPE-FGE/004/17 Relativa a la adquisición de equipo informático. No se difundió en el apartado de transparencia la inversión de 36 millones de pesos.

“Nos dijeron que ya compraron reactivos. Nosotros tenemos que ver la documentación, porque habí­a dinero etiquetado para equipo y que ya vení­an, que el dinero ya se invirtió, así­ nos dijeron” reiteró Dí­az Genao.

En la espera de información, los tres hijos de Joel Iván Acosta Islas acuden diariamente a terapia psicológica. La ausencia de su padre los dejó afectados a su corta edad.

“No es fácil perder a su padre de la noche a la mañana. Siguen preguntando por su padre y recibimos bocetadas de este tipo al no tener respuestas si no eres de un colectivo. Queremos transparencia en la información, que nos informen si ya están los comparativos de los restos con las pruebas de ADN, que sean las autoridades correspondientes quienes nos informen con transparencia y objetividad. La credibilidad necesaria de los hallazgos que se encuentren”, reprochó Marta Islas, madre de Iván.