Veracruzana y como representante del aparato institucional, confirma que: “la Directora General de Investigaciones de esta Universidad inició la investigación que determina nuestra legislación universitaria”, de forma unilateral y de la cual no he sido informado por las ví­as institucionales, quiero aclarar que, ante el respeto que debo a la institución y a la comunidad universitaria, nunca ha habido una falta de mi parte. Por eso, indujeron desde muy arriba la formulación de una queja en contra mí­a, donde el aparato ya juzgó, en tiempo récord y a conveniencia con un veredicto: CULPABLE, muy favorable para la rectora en los tiempos del proceso de designación rectoral 2017-2021. Estoy a la espera del dictamen para iniciar mi defensa y probar que todo es una FARSA. Anticipando conclusiones, si hay en este proceso de designación rectoral una ví­ctima del aparato institucional, por haberme atrevido a cuestionar el actuar de la rectora y luego participar como aspirante, ese soy yo.

Para que conozcan un poco más el doble discurso y moral de los integrantes del aparato institucional, y su aplicación discrecional de la normatividad, les expongo como me ha ido con algunas de las quejas y/o denuncias que he presentado:

1.-El 9 de junio de 2014 me dieron posesión como director del Instituto de Ciencias Básicas ”“ ICB por: “las cualidades que en usted concurren” (que al parecer perdí­ en el momento en que decidí­ hacer uso de mi derecho como universitario de aspirar a la rectorí­a). A unas dos semanas de haber ocupado el cargo, la administradora en ese entonces del ICB le da la instrucción a la secretaria que las resguardaba (la misma trabajadora que presentó la queja formal en mi contra) para sacar las carpetas de un proyecto de CONACYT del instituto, sin mi consentimiento ya siendo director de la entidad proponente. Ante esa situación, lo dí­ a conocer a mi superior y a la Contralorí­a General (CG), dentro de las observaciones de la Entrega-Recepción. Sigo esperando desde hace 3 años que se active la investigación.

2.- Dada la gravedad del asunto, solicité auditorí­a en diciembre del mismo año a la Contralorí­a General y nunca me contestaron.

3.- En oficio dirigido a la Dra. Carmen Blázquez (DGI) en julio del 2015 manifiesto preocupación sobre el futuro del ICB, propongo soluciones y recomiendo reuniones de trabajo. Resultado, la autoridad nunca respondió.

4.-En junio del 2016 presenté una queja mediante oficio dirigido a la
C. Rectora, con copia para la Junta de Gobierno, fundamentando la mala actuación y faltas graves como la intromisión de la Directora General de Investigaciones (sí­, la misma que me está haciendo la investigación) afectando la vida interna del ICB. Estoy esperando, desde hace más de un año, que se inicie la investigación.

5.- El dí­a 29 de junio del 2017, (un dí­a antes de que la JG emitiera la convocatoria) presenté una queja ante el Secretario de Administración y Finanzas por la desatención de parte del Dr. Trujillo Director General de Recursos Humanos al intentar tratar asuntos que se podrí­an convertir en urgentes (y se convirtieron, porque así­ les convení­a). El titular de la SAF, su inmediato superior, le dio instrucciones en el sentido de que me recibiera. Pero, yo me quejo del Titular de Recursos Humanos, y en ese caso ¿no se inicia una investigación del proceder del funcionario? Además, nunca trató conmigo los asuntos del ICB que tení­an que ver con la queja en mi contra y que junto con la titular de la DGI están operando para desacreditar a un servidor, que ha cuestionado el actuar de la rectora y su equipo.

Toda mi actuación ha sido apegada a la legislación y a la aplicación de la normas de control interno, pero éstas pareciera que no aplican cuando se trata de los directivos de “arriba”. La Dra. Sara Ladrón de Guevara habla de seguridad y paz, por lo cual le solicito a partir de este momento, que vele por la seguridad mí­a, de mi familia, y de las y los colaboradores y simpatizantes que tuvieron el valor de ir a apoyarme ante la Junta de Gobierno en la auscultación directa.

Cuando tenga el dictamen donde se me declare CULPABLE, lo haré público en una conferencia de prensa a la que oportunamente convocaré para posicionarme legalmente al respecto, pues no sobra recordar que, ante las solicitudes que no han podido responder y al no haberme encontrado nada en 38 años de trayectoria ininterrumpida, decidieron ir por el camino de la desacreditación mediante una FARSA.

Con su proceder, lo único que logrará la rectora es poner en riesgo el futuro de la institución, el proceso de designación rectoral y sobre todo la credibilidad y reputación de la Universidad ante la sociedad veracruzana y la comunidad universitaria nacional.

Es por eso que en mi calidad de aspirante a Rector, impulso el Cambio de Rumbo de nuestra Universidad para que éste tipo de situaciones no se repitan hacia ningún miembro de nuestra comunidad.

Atte.

Dr. Josué Cortés Zárate
Director del Instituto de Ciencias Básicas y
aspirante a Rector de la Universidad Veracruzana