Nueva recaudadora de AMLO
•Otro video de la corrupción
•Todos se acusan de pillos...
PASAMANOS: Una vez más, la política como espectáculo. Reality-show. Circo popular. Vulgar y prosaico, incluso. Unos y otros acusándose de todo, y a veces, sin mostrar pruebas. Manipular, entonces, la conciencia social. El ciudadano común y sencillo, en medio de las pasiones revolcadas y turbulentas.
El último caso, la diputada federal, Rocío Nahle, y la hermana del Fiscal Jorge Wínckler.
Luis Velázquez
Nahle, la legisladora consentida de “El peje” en Veracruz, y en el país, pues la ungió coordinadora de la bancada de MORENA en el Congreso de la Unión, declarando que Ana María Wínckler, fue la mujer que entregó el billetito a la diputada local, Eva Cadena.
Y en respuesta, la hermana del Fiscal asegurando que denunciará a Rocío Nahle, pues ella nunca fue la autora del cochupo y el trastupije, la trampa que según AMLO le tendieron a su legisladora local.
Desde luego, la última palabra la tiene la misma Eva Cadena. Pero en tanto ella habla, el índice de fuego acusatorio, la duda, la sospecha.
Tú, dice un priista, intriga… que algo queda. Tú, establecen las redes sociales, lanza el twitter incendiario que en algún corazón cuajará.
Verdad o mentira, medias verdades o medias mentiras, la misma historia de siempre.
Javier Duarte y Miguel íngel Yunes Linares, acusándose (y denunciándose en el caso) de enriquecimiento ilícito y de corruptos.
Yunes Linares y Andrés Manuel López Obrador señalándose de corruptos, sin llegar (todavía) a la denuncia penal.
Fidel Herrera Beltrán y Yunes Linares llamándose corruptos desde hace más de veinte años. Incluso, hasta pederastas.
La política, reducida a un circo, alimentando el chismerío.
Y buscando, claro, el momento oportuno. El mismo día, ayer, en que AMLO estuvo en el zócalo jarocho, el caso de Eva Cadena fue retomado en la prensa de la Ciudad de México para fermentar el escándalo con un nuevo dieo.
¿Servirá, por ejemplo, para levantar expectativas en el ánimo social y ganar la elección municipal el próximo 4 de junio?
El voto en las urnas, dice el viejo del pueblo, ha de ser razonado y consciente.
BALAUSTRADAS: La historia inició cuando en un nuevo video, el cuarto, Eva Cadena asegura que Rocío Nahle es la recaudadora de Andrés Manuel López Obrador.
Entonces, Nahle exigió a la FEPADE que se conozca el video completo de Eva Cadena para identificar a la persona que le entrega el billete y que según ella es la hermana del Fiscal.
Pero además, se lanzó a la yugular del gobernador de Veracruz.
Así, y en medio del show político y mediático ha de recordarse lo siguiente:
En España hay una fórmula mágica para tener éxito en el periodismo como empresa privada y que se llama “Las tres eses”, es decir, publicar mucha Sangre, mucho Sexo y pocos Sucesos.
En el caso mexicano, podría, claro, agregarse otra ese. La ese de Show. El periodismo como chisme de quinto patio, basado en los dimes y diretes entre los políticos, donde las partes se acusan de todo, se van a las ocho columnas en portada, destruyen vidas ajenas, se vuelven la comidilla del día y cuando de pronto, zas, aparece otro festín mediático, el anterior queda en el olvido.
El asunto Eva Cadena ya lleva un ratito en el carril y en las redes sociales.
En el siglo pasado, el chismerío era en la carnicería, en la fonda del mercado popular y en el molino de nixtamal. Ahora, y gracias al Internet, se conoce como los tuitazos, en que basta apretar el botón nuclear de unas teclas en el celular para incendiar el mundo, como Donald Trump.
Pero como también existe lo que se llama la aldea global, a estas alturas, el reality-show de Eva Cadena, Rocío Nahle y la hermana de Jorge Wínckler es el platillo fuerte, luego de que Javier Duarte encumbrara a Veracruz en el mundo como el símbolo universal de la corrupción.
ESCALERAS: En el fondo, la lucha atroz y vulgar por el poder político. El poder para hacer billete. El poder para enriquecerse. Nada hace más feliz a cierto tipo de hombres más que tener en su mano el destino de los demás.
Y por añadidura, a nadie, absolutamente a nadie, interesa, ocupa ni preocupa el bienestar común.
Caso Veracruz: seis de cada diez habitantes en la miseria, la pobreza y la jodidez según el CONEVAL.
600 mil personas de 14 años de edad en adelante, analfabetas, no saben leer ni escribir.
Un millón de personas con la escuela primaria incompleta.
Otro millón con la secundaria a medias.
Y 600 mil personas con el bachillerato inconcluso.
Veracruz, por vez primera en su historia, estado migrante a Estados Unidos, de tal manera que las remesas significan el sostén de la economía.
Y en medio de tal realidad avasallante, los políticos (los AMLO, los Yunes, los Cadena, los Nahle, etcétera) acusándose de corruptos y declarándose cada uno ángel de la pureza.
Simple y llanamente, disputan el pastel para quedarse con todas las tajadas. Caso Javier Duarte, declarado por el mismo CEN del PRI como el ex gobernador más corrupto en la historia nacional. Y todavía, dijo Enrique Ochoa Reza, asesino.