Al filo del desafuero Sergio Rodríguez
•El diputado del PRD se ha lanzado en contra de la JUCOPO, de Wínckler y hasta de Yunes
•Se dice que quiere coordinar la fracción del PRD en el Congreso quitando a Copete Zapot
•Acusado de robo de vehículo se la juega pidiendo juicio político al “berrinchudo” fiscal
•Tras la alternancia del PRI al PAN-PRD dice que hay que “pensarse” coalición en 2018
Por YERANIA ROLÓN
Su andar es lento, pausado. En los pasillos del Congreso del...
Estado no se caracteriza por su impetuosidad.
Sin embargo, es el único diputado local de la alianza PAN-PRD que ha confrontado al gobernador del Estado, Miguel íngel Yunes Linares, desde la tribuna del Poder Legislativo.
Sergio Rodríguez incomoda. Incluso a propuesta suya el punto de acuerdo que plantea el juicio político del fiscal general, Jorge Wínckler Ortiz, tuvo que turnarse a la Junta de Coordinación Política de la Legislatura en la sesión ordinaria del pasado 9 de mayo.
Esto tras recibir el apoyo del PRI, MORENA y el grupo mixto “Juntos por Veracruz, llamando “niño caprichoso” al titular de la FGE, quien previamente había acusado a todos los diputados locales de ser corruptos por no avalar el desafuero que solicitó para el alcalde de Fortín de las Flores.
El perredista también perturba a su mismo grupo legislativo. Se asegura que busca coordinar la bancada del PRD, hasta la fecha a cargo de Yazmín de los íngeles Copete Zapot, con quien mantiene un trato distante hasta en los eventos públicos.
Además, como presidente de la Comisión Especial para la Verdad sobre la Deuda Pública del Estado de Veracruz 1998-2016 y de la comisión de Hacienda del Estado, también se ha lanzado contra el gobernador y el presidente de la JUCOPO, Sergio Hernández.
Ante los medios locales comentó que la Junta de Coordinación Política, a cargo del panista, ni siquiera ha destinado los recursos para contratar al despacho que audite las irregularidades del gobierno anterior, de ahí que esta comisión de la verdad necesita ampliar su periodo.
En cuanto al gobernador declaró ante los medios que el Ejecutivo ha incumplido con el ajuste a la Ley de Egresos de este 2017, aunque él mismo solicitó al Congreso un periodo de tres meses para hacerlo poco después de comenzar su mandato.
Yunes lo ha ignorado públicamente e incluso la Secretaría de Finanzas, a cargo de Clementina Guerrero García, señaló a través de un comunicado oficial que sí entregó la información. Pese a esto, Rodríguez Cortés insiste en que presentará un exhorto para que el gobierno cumpla.
Y sin embargo el legislador del partido del sol azteca mantiene la misma actitud. Camina con “pachorra” a las juntas o reuniones del Congreso, casi arrastrando los pies. Contradictorio en su personalidad y su actuar.
Ni siquiera se exalta al ser cuestionado por la denuncia en su contra por el supuesto robo de un vehículo. El legislador, que tiene fuero, mantiene abierto un proceso ante la Fiscalía de Jorge Wínckler, de quien se rumora que en cualquier momento podría solicitar su desafuero.
“Si no quieren que haga mi trabajo que me lo comenten (los demás diputados), a lo mejor incomoda la transparencia y verter opiniones como las que yo he realizado, pero las he hecho de frente, abiertas en el pleno”, declaró el legislador en entrevista.
Pese a esto, no repara en afirmar que es de los pocos políticos que han sabido perdurar durante los últimos tres gobiernos estatales. Pasó del gobierno de Fidel Herrera al de Javier Duarte y se mantiene al inicio del bienio del Yunismo, presume.
PASÓ DEL PRD ROJO AL PRD AZUL
Durante el último tramo del gobierno de Fidel Herrera, Rodríguez Cortés fue alcalde de Ciudad Mendoza y aunque recibió observaciones del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) pudo superarlas.
Nunca se concretó ninguna acción legal en su contra y ascendió rápidamente al interior del partido.
También fue acusado de desviar recursos durante su paso como director del Servicio Nacional de Empleo, ya en la administración de Javier Duarte de Ochoa, pero al renunciar al cargo dijo que su salida fue porque ya no coincidió con el proyecto del gobernador priista.
En marzo de 2013, el Consejo Estatal de Veracruz del PRD destituyó a Juan Vergel Pacheco como presidente del Comité Directivo Estatal.
Lo acusaron de mal uso de las prerrogativas aunque siempre se señaló que atrás de dicha destitución estuvo Javier Duarte, quien llegó al cargo de gobernador en 2010.
Al asumir la dirigencia, el actual legislador local aseveró que le iba a demostrar a los malos perredistas como Juan Vergel que el partido iba a “revolcar” al PRI en las próximas elecciones. Fuese sincero o no, su discurso terminó cumpliéndose pero 3 años después como aliados con el PAN.
En ese año aseguraba que una alianza con el Partido Acción Nacional (PAN) era imposible no solo en Veracruz, sino en el resto del país.
También ratificó ante un medio nacional que Miguel íngel Yunes y el exgobernador Fidel Herrera Beltrán, eran responsables de la crisis en Veracruz.
De hecho para las campañas a presidentes municipales de ese periodo reconoció haber postulado a candidatos del PRI y del PAN, pero fue porque estos “le aseguraron” que no pertenecían ni al grupo de Fidel ni al de Yunes.
En su momento se señaló al PRD de Rodríguez de ser “más rojo que el PRI”, es decir a favor de Javier Duarte y de evitar cualquier alianza con partidos como el PAN. Pero los cambios políticos a nivel nacional terminaron por concretar una coalición con el blanquiazul.
Al perredista y su sucesor en la dirigencia del PRD, Rogelio Franco Castán, actual secretario de Gobierno con Yunes Linares, no les quedó de otra que consumar la alianza en los albores del sexenio de Javier Duarte.
Rodríguez Cortés y Franco Castán, considerados dentro de la corriente Nueva Izquierda (NI) al interior del partido, tuvieron que aceptar apoyar a uno de los responsables de la crisis veracruzana, según sus propias palabras.
Franco aseguró que se hizo realidad la alianza electoral 2016 ya que lo más importante para Veracruz era para impedir que el PRI ganase las elecciones.
AHORA DUDA DE COALICIÓN PARA 2018
Rodríguez Cortés no ha estado exento de otras polémicas. En su momento el perredista, Fredy Marcos Valor, actual representante del partido ante el Organismo Público Local Electoral para las elecciones que renovarán las 212 presidentes municipales este 2017, lo criticó por su cercanía con Jorge Carvallo Delfín.
El actual diputado federal del PRI aparece en múltiples fotografías con Rodríguez Cortés, incluso abrazados mostrando su amistad. Lo mismo se repite con Rogelio Franco Castán.
A Sergio también se le achaca que cuando Érick Lagos fue designado secretario de Gobierno convocó a rueda de prensa para celebrar el nombramiento.
En 2015 causaron polémica algunas fotografías que circularon en donde aparece posando en una cama con billetes de mil pesos, pero siempre dijo que se trató de un montaje y una persecución por cabildear la alianza con el PAN.
Asimismo, se supo que a nivel nacional era el dirigente perredista que más ganaba en el país, con un ingreso bruto de 50 mil pesos mensuales. Pese a esto, pudo encabezar la lista de los diputados plurinominales del partido del sol azteca en 2016 y garantizar una curul para la actual LXIV Legislatura.
Ahora, sostiene que otra alianza PAN¬PRD en Veracruz debe analizarse, pues el objetivo de cambiar de régimen ya se cumplió.
“El objetivo fue sacar a Javier Duarte y ahora Javier Duarte ya no está, ya no está el PRI y hoy hay un Gobierno de coalición. Lo que creo que se debe hacer es una revisión después de la elección del próximo 4 de junio, a fin de ver si este Gobierno de coalición funciona y si le ha dado el respaldo suficiente a la izquierda veracruzana”, expuso.
En dicho cambio de discurso, agregó que es necesario revisar si la Secretaría General de Gobierno y la del Medio Ambiente, con Franco y Marina Aguilar López, tienen influencia en las políticas públicas de la entidad.
Como consejero nacional criticó a la dirigente nacional del PRD, Alejandra Barrales, luego de que anunció que se conformaría un Frente Amplio Opositor para el 2018 con el PAN, aunque después mesuró sus declaraciones.
“La presidenta del partido no es el PRD, es la representante de nuestro partido, pertenece a una expresión política y no puede hablar a nombre del PRD en el sentido estricto de una decisión tan difícil”.
Igualmente aludió que el PRD en Veracruz tiene 9 consejeros nacionales y son los que acudirán a discutir sobre el tema en su debido momento, decisión que se debe de pensar a fondo sin descartar la posibilidad de otras alianzas como con el partido Movimiento de Regeneración Nacional, con su dirigente Andrés Manuel López Obrador.