Desastre social
1 (Un pueblo con indignación crónica)
En el norte de Veracruz, el desastre natural con las lluvias, los ríos desbordados, las inundaciones y los 38 muertos ha derivado en un desastre social.
El principio de Peter para las autoridades.
Por ejemplo: En Poza Rica, uno de los epicentros con Álamo, los vecinos de colonias populares bloquearon el bulevar.
En sus casas, sin agua.
Sin luz.
Y con las calles llenas de lodo y basura.
La protesta social y la indignación crónica para ser escuchados por la señora autoridad.
La autoridad local llegó por ahí y les ofreció actuar ya, ya, ya...
Digamos, la venta de esperanzas...
En el dato oficial, ciento once escuelas... sin clases.
Varias semanas después.
Escuelas dañadas.
Calles inundadas de lodo.
Falta de condiciones, pues.
La secretaría de Educación de Claudia Tello... a prueba.
Era, digamos, para una gran convocatoria social con las autoridades estatales y municipales...
Y los sindicatos magisteriales...
Y los padres de familia...
Y los vecinos para echar montón al pendiente.
Y en la Universidad Veracruzana, campuso en Poza Rica, paradas siete facultades.
3,500 (tres mil quinientos) alumnos afectados.
Todo, porque los muchachos siguen encorajinados con la muerte de la compañera del quinto semestre de Sicología, Diana Jael Cuervo Santos, debido a la negligencia de la UV en el tiempo torrencial y huracanado de los ríos desbordados y las inundaciones.
El sociólogo de la Sorbona, Martín Aguilar Sánchez, convocó a un diálogo.
Pero se repitió la historia del presidente Gustavo Díaz Ordaz cuando en el movimiento estudiantil del 68 los chicos lo dejaron con la mano tendida.
Ahora, la UV sopesa clases en línea.
Todo, en la víspera del primer informe de gobierno del sexenio 2024/2030.
Asuntitos, temas, para rendir cuentas.
Las tribus políticas en el momento estelar del sexenio.
Y en el primer año.
2 (Un cadáver en medio de las comparsas)
Y como aderezo al principio de Peter de la autoridad, el asesinato de un hombre en Tempoal.
Sobre todo, porque el crimen fue en medio de la fiesta tradicional.
La celebración de Xantolo.
Y mientras las comparsas actuaban en el templete, los balazos sonaron y resonaron.
Y en el "Veracruz está de moda", todo mundo a correr para, ajá, librar los tiros y salvar la vida.
El pánico.
El terror.
El miedo.
"El miedo al miedo".
El Veracruz concreto y específico vivido antes y vivido hoy.
El hombre asesinado.
Los sicarios huyeron como Remedios, la bella, en la novelística de Gabriel García Márquez.
Quizá se habrían fugado al cielo.
Pero de igual modo, al infierno, su reino.
Un infierno llamado Veracruz en los cuatro puntos cardinales.
3 (Palabrerío exitoso)
En los boletines de prensa...
En el palabrerío oficial...
En la declaracionitis...
En las ruedas de prensa, el gobierno exitoso.
El abandono social en los satisfactores básicos de la vida común.
Los hijos, sin clases.
Las calles, con lodo.
Y con basura.
Las casas, sin luz.
"Los demonios andan sueltos" proclamaban en el siglo pasado las tribus priistas.
Como ahora.
4 (Plegarias desoídas)
La presidenta de la república se movilizó en varias ocasiones de la Ciudad de México a la zona norte de Veracruz.
Pero si se consideran las protestas, el coraje social y hasta la indignación crónica, luego del periplo presidencial mucho se duda de una gran respuesta del gobierno del Estado.
Incluso, y para estar a tono.
La hora, por ejemplo, de una convocatoria social, todos empalmados, y hasta las ONG, las iglesias, las fundaciones, la iniciativa privada, los activistas sociales, las autoridades municipales, etecé, etecé, echando montón a los pendientes.
Varias semanas después continúan sin reaccionar.
Y, claro, las víctimas...
Los afectados...
Por lo general, familias padeciendo la miseria, la pobreza y la jodidez aleteando plegarias desoídas.
Se olvida el mítico y bíblico consejo:
"Si es mediodía y con sol y el pueblo dice que es medianoche hora de prender las farolas". (lv)

