Con odio y brutalidad crímenes de mujeres
•92 feminicidios en el año 2013
•Todos los casos, en la impunidad
•Disminuyeron asesinatos de hombres
•Eje del mal en Veracruz, Xalapa y Papantla
•Muchos homicidios nunca son reportados
Laura González Jiménez fue asesinada por su esposo el pasado nueve de marzo, y de forma inmediata paso a formar parte de las cifras de feminicidio que ubican a Veracruz como un estado de alerta por los asesinatos de mujeres.
La ahora occisa es el caso más reciente que reportan los medios de comunicación en el estado, atrás de ella hay cientos de historias de mujeres veracruzanas que han sido cruelmente asesinadas y cuyos casos mantienen un factor común: la impunidad gubernamental y la tolerancia a sus asesinos.
Texto: Rosalía Hernández/Especial, Imagen: Raúl Méndez
CRECE LA CIFRA
Para el año 2010, el Colectivo de Investigación, Desarrollo y Educación entre Mujeres (CIDEM) contabilizó alrededor de 300 casos que obedecían a las características del feminicidio en otros estados.
El 29 de agosto del año 2011, después de ser aprobado por el Congreso del Estado, fue publicado el Decreto 299 que otorgó vigencia al tipo penal de feminicidio en Veracruz. Del año 2011 al final del 2012, se calcularon alrededor de 113 casos de feminicidio.
Mayela García Ramírez, directora del CIDEM, anunció que de acuerdo al monitoreo de medios que el colectivo realiza, se calcula que pueda haber alrededor de 92 feminicidios ocurridos durante el 2013.
Sin embargo, el ex Procurador de Justicia en Veracruz, Amadeo Flores, desmintió en el año 2013 las cifras que las activistas e investigadoras otorgaban al público e incluso aseguró que la cifra real era de sólo 49 feminicidios en los últimos diez años.
ESTUDIO DE FEMINICIDIOS
CIDEM presentó en el año 2013 la publicación llamada: "El delito de feminicidio en el estado de Veracruz, donde se dio a conocer el número de casos contabilizados en la entidad pero también el parentesco que las mujeres tenían con su agresor, la edad al momento de su muerte, entre otros factores.
La publicación cita al estudio de Violencia Feminicida en México, características, tendencias y nuevas expresiones en las entidades federativas: 1995-2010, donde se señala que en los 20 años analizados, los homicidios de hombres fueron disminuyendo en un 36 por ciento, mientras que los de las mujeres, se mantuvieron prácticamente constantes.
El estudio señala que los asesinatos de mujeres son cometidos con brutalidad y odio, factores poco comunes en los asesinatos de mujeres. Dos tercios de los homicidios masculinos se cometen con armas de fuego y en el caso de las mujeres es maÌs frecuente el uso de medios maÌs crueles, como ahorcamiento, estrangulamiento, sofocacioÌn, ahogamiento e inmersioÌn.
De acuerdo con el monitoreo de medios elaborado por el Observatorio de GeÌnero y ErradicacioÌn de la Violencia en Veracruz, y que comprende desde la entrada en vigencia del feminicidio como un delito penal, hasta el último día del año 2012, se cometieron 113 asesinatos de mujeres y niñas, que pudieron catalogarse como feminicidio.
Sin embargo, la PGJ del estado sólo contabilizó 51 feminicidios en el mismo tiempo, y calificó el resto de casos como homicidios dolosos, a pesar de que las condiciones de los asesinatos cumplían con una o más hipótesis del feminicidio.
De los 113 casos analizados en el periodo 2011-2012, se detectó que el 63 por ciento fueron arrojadas en un lugar público, como calles, parques, terrenos baldíos, parajes. Ríos, entre otros.
"La exposicioÌn del cadaÌver de una mujer no se trata de un elemento independiente o accesorio, sino constitutivo del delito, pues perfecciona la comunicacioÌn lesiva expresada inicialmente en el acto de privacioÌn de la vida de la mujer".
En cuanto a la relación agresor-víctima, un porcentaje total de 65 por ciento de los casos donde sí se pudo encontrar dicha relación, establece que la víctima tenía relación de parentesco o confianza con su agresor.
Sólo en el 24 por ciento de los casos no existió ningún parentesco y la víctima no conocía a su agresor. Sólo el 11 por ciento de los crímenes son atribuidos al crimen organizado y el 5.3 por ciento de casos no aporta mayores datos.
El Observatorio de Género detalla que las niñas son más vulnerables a ser asesinadas por algún familiar, mientras que las mujeres entre 21 y 40 años tienen como principal agresor a su pareja o ex pareja.
Los mayores iÌndices de feminicidio se encuentran en las mujeres entre los 21 y 30 años, posteriormente entre los 11 y los 20 años, el tercer rango de edad es entre los 41 y los 50 años.
Desde los 11 a los 50 años, la mayoría de las mujeres se encuentran en sexualidad activa. Las agresiones sexuales forman parte de las hipótesis del feminicidio y el 17 por ciento de las mujeres asesinadas presentaron signos de violencia sexual.
Para el año 2012, se calculó que el 63 por ciento de los feminicidios ocurridos en toda la entidad veracruzana, se concentraban en 18 municipios, donde los primeros tres lugares fueron ocupados por Veracruz, Xalapa y Papantla, con 17, 10 y seis casos respectivamente.
No hay que olvidar que la procuraduría sólo reconoció 51 casos de feminicidio, donde 28 de ellos habían sido consignados, ocho fueron catalogados a reserva por falta de pruebas en la investigación. Uno se declaró como no ejercicio de la acción penal y en tres el Ministerio Público se declaróincompetente.
MíS VIOLENCIA EN 2013 Y 2014
De acuerdo con Mayela García, el Observatorio de Género contabilizó a través del análisis de 30 medios de comunicación, un total de 92 feminicidios en el estado, la cifra podría ser mayor, tomando en cuenta que no todos los casos son reportados por al prensa.
Realizando un monitoreo de medios electrónicos, se detecta que hay al menos cinco feminicidios cometidos en lo que va del 2014.Calificaron como el primer feminicidio del año el asesinato de María Gómez de Gaona, mujer de 54 años de edad asesinada en Zozocolco de Guerrero el tres de enero.
Un día después se encontró el cuerpo de Mireya Rendón Huerta de 22 años, ocurrido en Altotonga. El 14 de enero se reportó el asesinato violento de Matilde Cruz Jiménez, asesinada por su esposo en Filomeno Mata.
El 20 de enero en Las Choapas asesinaron a Leticia Sánchez y el 10 de marzo se dio la trágica noticia de haber encontrado muerta a la profesora Laura González Jiménez, vecina de Emiliano Zapata, desaparecida dos días antes y asesinada por su esposo.
A pesar de esos alarmantes datos, la Procuraduría General de Justicia en el Estado continúa sin otorgar datos exactos del número de feminicidios, no existen estadísticas ni mayor interés por el tema.
En diversas ocasiones el CIDEM ha solicitado que se haga una correcta y puntual aplicación de protocolos, acuerdos y reglamentos que marca el delito de feminicidio, así como que se capacite al personal necesario para no caer en la revictimización, agresiones a familiares de las víctimas o desecho de los casos.
Con la llegada del nuevo procurador, Luis íngel Bravo Contreras, las organizaciones civiles, el Instituto Veracruzano de las Mujeres e incluso el congreso local, han solicitado que se den a conocer las cifras de mujeres asesinadas y que se trabaje en coordinación para atender el problema.
Las promesas ya empezaron por parte del procurador. Falta que se haga visible un compromiso real por frenar los feminicidios en el estado y castigar a quienes los han cometido en años anteriores.
CIRCUNSTANCIAS O HIPOÌTESIS DE FEMINICIDIO
I. Exista o haya existido entre el activo y la viÌctima una relacioÌn de parentesco por consanguinidad o afinidad, de matrimonio, concubinato, noviazgo o cualquier otra relacioÌn de hecho o amistad;
II. Exista o haya existido entre el activo y la viÌctima una relacioÌn laboral, escolar, o cualquier otra que implique confianza, subordinacioÌn o superioridad;
III. La viÌctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo;
IV. A la viÌctima se le hayan infligido lesiones infamantes, degradantes o mutilaciones previamente a la privacioÌn de la vida, o se realicen marcas infamantes o degradantes sobre el cadaÌver, o eÌste sea mutilado;
V. Hayan existido amenazas, acoso o lesiones del sujeto activo en contra de la viÌctima;
VI. El cuerpo de la viÌctima sea expuesto o arrojado en un lugar puÌblico; o
VII. La viÌctima haya sido incomunicada.