Jiménez Rojas y allegados, todos encumbrados en las sillas embrujadas del edificio de la SEV.
La descripción del poder de las huestes guinda y marrón en el sexenio 2024/2030 bien puede resumirse en los siguientes puntitos:

PASAMANOS: Uno. David Jiménez y anexos y conexos “nos han hecho pasar las de Caín”.
Dos. Citan a limpiar escuelas en horarios fuera de labores y acudir a eventos de proselitismo político.
Tres. Y con la advertencia de que “si no vamos nos corren”.
Cuatro. Se muestra el subsecretario “como si fuera el dueño de nuestro tiempo”.
Cinco. “Ha llegado al extremo de que la pasa corriendo a la gente, a la cual obliga a firmar su renuncia con fechas anteriores para que no se les pague el salario completo a los compañeros cuando ya fue devengado dicho pago”.

CORREDORES: Seis. El seudo secretario particular de David Jiménez, Guillermo Marcelo Martínez García “solo se la pasa ligando a las compañeras de trabajo y hace que acepten sus propuestas a costa de no perder su trabajo”.
Siete. “Y se han dado casos de que aún… las corren”.
Ocho. “Cuando el subsecretario da órdenes lo hace de manera déspota y con groserías, sin importarle los derechos humanos”.
Y, nueve: “Dependemos de nuestro sueldo para subsistir, pero no podemos anteponer nuestra dignidad solo por ser personal de confianza. Merecemos respeto”.

BALCONES: La cartita está dirigida a la gobernadora y a la secretaria Claudia Tello Espinoza.
Un listado sórdido y siniestro de atropellos a los derechos laborales y personales.
Un recuento del estilo de ejercer el poder, quizá sexenal. Acaso repetitivo en otras dependencias.

PASILLOS: El sábado veinte de septiembre, 2025, La Jornada Veracruz publicó la cartita con el crédito de Irineo Pérez Melo.
Ayer fue lunes inicio de semana. Ningún trascendido oficial.
Ya se verá el tiempo de la respuesta de la secretaria Claudia Tello con hechos concretos y específicos para el castigo ejemplar al subsecretario y amigos y anexos y conexos.
Pero también de la gobernadora para asestar el manotazo pues de por medio está la autoridad moral del llamado Segundo Piso de la 4T.
Claro, si los días de la semana continúan trotando sin que nada pase significará la peor calamidad educativa, política, social y moral de la era Nahle.
En el palenque los derechos humanos, los derechos laborales, los derechos personales y la práctica priista del siglo pasado del “acarreo”.
Y el ejercicio soberbio y autoritario del poder.
Además, caray, ta’canijo amenazar con despedir a los burócratas si se abstienen de participar en los actos políticos para “hacer bulto”, así sea la presidenta de la república.
Simplemente, argumentos de peso y con peso para destituir al subsecretario David Jiménez Rojas y allegados, socios, aliados y cómplices.
Nadie desearía que a un solo burócrata le diera un feroz y fatídico ataque de caspa a partir de la cartita. (lv)