Autodeportación en E.U.
**Donald Trump generoso...
**Que tu mano izquierda...
ESCALERAS: En Estados Unidos, un paso duro y rudo más como parte de la feroz persecución contra migrantes.
Ahora, la llamada autodeportación. Y con campaña mediática.
La oferta (la gran oferta, ajá) de la secretaría de Seguridad Interior ofreciendo mil dólares a quien “colabore” deportarse a sí mismo.
El vuelo gratis a su destino nacional.
Y la posibilidad (ta’gueno) de regresar al país vecino.
En la picota de México, trío de pendientes.
Uno, los aranceles. Dos, los narcos. Y, tres, los migrantes.
Los migrantes… en el último rincón del infierno.
PASAMANOS: Desde el veinte de enero con la toma de posesión de Donald Trump como el presidente de la república más poderosa de la tierra, la preferencia por los aranceles.
Por encima de todo.
Después, la entrega de jefes narcos a EU para satisfacción de la Casa Blanca.
Y al mismo tiempo, el debate sobre la posibilidad de que las fuerzas norteamericanas ingresen a México para cazar a los terroristas como ahora denominan a los malandros.
Y los migrantes de México y sin papeles y anexos y conexos de América Central y de Venezuela y hasta del continente africano, allá que solitos se defiendan.
CORREDORES: Mientras, la cacería de ilegales continúa. Y las deportaciones. La más grande de la historia que anunciada de forma reiterada por Trump.
Trump, presionando contra los migrantes para ganar espacios y prebendas.
Y recurriendo a las presiones y amenazas como corresponde a su estilo personal de ejercer el mando y el poder y desde siempre cuando era un magnate.
Ahora, con más razón cuando se siente y cree el dueño del mundo.
BALCONES: Pancho Villa, más engrandecido que nunca. El único mexicano invadiendo EU en Columbus.
Varios presidentes de México y políticos anexos y conexos señalados como agentes de la CIA.
Otros políticos, vetados en EU por sus amistades peligrosas con jefes narcos.
El raro y extraño (indicativo, claro) perdón para Jaime “El Mayo” Zambada, el socio que fue de Joaquín Guzmán Loera, condenado a cadena perpetua en EU.
Más de treinta millones de mexicanos (y de los cuales más de un millón son originarios de Veracruz) como migrantes sin papeles.
Y por añadidura, expuestos a la deportación.
Todos, viviendo con miedo y “miedo al miedo” y pánico y terror y temor.
PASILLOS: Luego del terrorismo implacable contra los migrantes, la oferta (la gran oferta, ajá) de “incentivar a los migrantes irregulares a autodeportarse.
Primero, el rafagueo, la intimidación y la persecución.
Después, como Poncio Pilatos, pidiendo una palangana con agua limpia, jabón y toalla para lavarse las manos y declarándose inocente del destino de Jesús.
¡Ah!, claro, y la advertencia:
Si los migrantes rechazan la oferta, entonces, el Departamento de Seguridad Nacional de EU los buscará, encontrará y deportará “si no se alinean a esta política”.
En la lista negra, además, “los peores criminales, los terroristas, los pedófilos, los pandilleros, los violadores y los narcotraficantes”.
Pagando “justos por pecadores”, en todo caso. (lv)