Jefe policíaco corrupto
**Exhibido en E.U.
**“Los gringos hunters”
UNO. Policía bajo sospecha
La serie fílmica “Los gringos hunters”, además de exhibir las pillerías de norteamericanos en Estados Unidos y refugiados en México, también tiende en el palenque público la corrupción de parte de la policía en el territorio azteca.
La policía de élite rastreando la pista de los gringos malandros en Tijuana, Baja California, teniendo como el enemigo número uno al director de Seguridad Pública.
A, antiguo policía. B, antiguo comandante. C, ungido titular de Seguridad Pública.
D, una hoja de servicios bajo sospecha. Señalado de pillo, ladrón, traidor y asesino, incluso, de los mismos policías íntegros y honestos.
Entre ellos, a sus amigos de corporación y con quienes soñaban juntos con la policía ideal.
DOS. Poli ambicioso, sin escrúpulos
Ungido director de Seguridad Pública en Tijuana, el epicentro de la serie fílmica, y basada en hechos reales, concretos y específicos, emprende feroz cacería en contra de los policías incómodos.
Un policía, por ejemplo, lo tiene en la mira y bajo sospecha del crimen del ex jefe policiaco de ellos.
Todo, porque a su vez lo investigaba sobre sus tropelías.
Entre ellas, asociado con narcos.
Además, asociado con empresarios voraces aferrados en desaparecer los cinturones de miseria en las goteras de Tijuana para construir fraccionamientos residenciales.
Incluso, pactando alianza con los inversionistas a cambio de que lo trafiquen influencias para su cargo superior.
TRES. Acoso laboral
En el máximo cargo público de seguridad, el jefe ordena la matanza del jefe policiaco encargado de la policía élite persiguiendo a gringos asesinos, narcos, traficantes de armas, lenones y estafadores internacionales.
Después, ordena destituir a los cinco miembros restantes de la policía de élite.
Y de nuevo ordena someterlos a exámenes rigurosos, incluso, partiendo desde la infancia de cada uno, para el despido total y absoluto.
CUATRO. Tribus policiacas y políticas
Dueño del poder y del día y de la noche y del destino personal y colectivo de los policías en el cumpleaños organiza tremendos fiestones para los jefes policiacos superiores y jefes políticos y jefes empresariales.
Las alianzas entre los dueños del poder público y privado.
Los sucios manejos de las tribus policiacas y políticas.
Avasallando, incluso, con la esencia del llamado Estado de Derecho de garantizar la seguridad en la vida y en los bienes de la población de Tijuana.
Caray, hasta protegiendo a un sacerdote pedófilo con una red de niños prostituidos y alquilados para servicios sexuales de los adultos.
Y de paso, hasta drogando a los chicos.
CINCO. El sistema político mexicano
El filme (Netflix) exhibe la podredumbre de los gringos malandros cometiendo fechorías en EU y migrando a México.
Pero al mismo tiempo, redondea el sistema político de México tan ligado a las cañerías.
Unos jefes policiacos al servicio de malosos y quienes, claro, claro, claro, también recurren a la desaparición forzada.
Aquella cometida por malos policías aliados con carteles y cartelitos, bandas juveniles de colonias populares, sicarios y pistoleros y malosos y malandros y hasta mujeres lenonas. (lv)