Expediente 2011/Charlas de café/08 de mayo de 2011
Timoteo Tejeda Tejeda, originario de La Mixtequilla, constructor desde hace 33 años, cuenta:
El desempleo está cabrón. Mira, tengo 28 trabajadores. Y todos los días llegan al taller entre 20 y 30 paileros y soldadores a pedir chamba. Otras veces, se lo piden a los trabajadores, que son sus cuates, y ellos me reportan.
Expediente 2011
Charlas de café
Luis Velázquez Rivera
08 de mayo de 2011
Timoteo Tejeda Tejeda, originario de La Mixtequilla, constructor desde hace 33 años, cuenta:
El desempleo está cabrón. Mira, tengo 28 trabajadores. Y todos los días llegan al taller entre 20 y 30 paileros y soldadores a pedir chamba. Otras veces, se lo piden a los trabajadores, que son sus cuates, y ellos me reportan.
Yo les digo: "Si les doy chamba a ellos te despido a ti".
Y contestan:
"No, jefe, yo nomás decía".
Gracias a Dios ahí voy. Pero la producción de mi taller es insuficiente para absorber a tanta gente desempleada.
Y Mira, he tenido suerte. En el taller he formado a técnicos que ahora están, incluso, en Estados Unidos. En Nueva Orleans, por ejemplo. Gente que se ha ido a trabajar, pero como jefes, pues son técnicos reconocidos. Ellos dicen que de cada diez norteamericanos especialistas en soldadura, ocho son chafas y dos buenos. Pero además, son flojos, y ahí los chingamos”™”™.
42 HIJOS CON 7 MUJERES
Timoteo Tejeda Tejeda recuerda:
"Mi padre tuvo 42 hijos con siete mujeres. Y con ninguna casó, porque decía que a ninguna iba a preferir por encima de la otra, pues lo importante son los hijos.
Y de los 41 hermanos que tuve, todos nos llevamos bien. Unos ya murieron, pero quedamos 27. Y cada año nos reunimos con mi hermano que vive en Córdoba y vamos todos, o casi todos.
El día en que mi padre murió, las seis mujeres restantes fueron a la casa, en La Mixtequilla, para decir adiós a mi padre. Y mi madre las recibió bien.
Tuve un hermano menor que era bien parecido. Cantaba como Pedro Infante, hacía ejercicio, musculoso y era chofer de los camiones de pasaje de mi padre.
Y era bueno para la enagua. Llegó a tener cuatro, cinco novias al mismo tiempo, todas de lujo, de primer mundo, y todas felices".
EL PAPí DE JAVIER DUARTE
Timoteo Tejeda sigue contando:
”˜”™Yo me llevaba muy bien con Javier Duarte padre, y lo digo no porque su hijo sea gobernador. Javier Duarte era mi cuate, y de cariño me decía: ”˜¡Pinche ranchero!”™, y yo le contestaba: "Tú también eres pinche ranchero!".
Era bromista. Muy bromista. Juguetón. Fuerte. Delgado. Con todo mundo se llevaba. Con nadie se metía. Pero eso sí, si alguien le hacía algo, reviraba de inmediato.
Siempre andaba con la pistola al cincho.
La última vez que nos vimos fue en un viaje en avión a la ciudad de México. El iba a la chamba como tesorero de la Unión Ganadera Nacional y yo en un viaje a Estados Unidos. Al otro día ocurrió el sismo en el Distrito Federal”™”™.
"ANDO REAPENDEJADO"
El empresario Rubén Díaz llega al café y ocupa una silla en la mesa de Mario Tejeda, director de Agricultura.
Le pregunta:
"Ahí donde estás, ¿te vas a robar la última milpa que queda sembrada en Veracruz?”™”™.
Mario Tejeda contesta:
“Hermanito, ¡ya no queda ninguna, todas se las llevaron!”™”™.
Entonces, el mesero pregunta a Rubén Díaz el desayuno que le traerá:
"Café con banderilla".
Al ratito el mesero regresa con un lechero y una banderilla.
"¡Te pedí canilla!”™”™.
"No, señor, pidió banderilla".
"Perdóname, por favor, ando como el fogoso, reapendejado".
"YO MISMO ME DEJO FOLLAR"
Viernes en la noche. Diego Ramírez llega al bar de un hotel céntrico en el puerto jarocho. Y luego enseguida descubre a Nacho en una mesa, acompañado de cuatro cromos, tipo modelo, yeguas finas, elegantes, presentables, deleite carnal.
Picado por la curiosidad, Diego pregunta a Nacho:
--¿Y esas chicas… qué?
--Tú dices, Diego.
--¿Cuánto?
--Cinco mil.
--¿Qué tiempo?
--El que quieras.
--Cinco mil es muy caro.
--Te estoy dando precio de amigo. Cobran diez mil.
Diego mira y vuelve a mirar al cuarteto de muchachitas, suspira y exclama:
--¡Caray, Nacho, por cinco mil pesos… yo mismo me dejo follar!
"PERDÓN, ANDABA FORNICANDO"
En el transcurso de la mañana, el presidente del PRI en Veracruz, Ricardo Landa, mejor conocido como ”˜”™El gato modorro”™”™ buscó a una secretaria del partido en su oficina, en el celular, en su casa, en su restaurante preferido.
A las dos, tres de la tarde, la secretaria llegó feliz, fresca, fresquecita, sonriendo, al búnker rojo en Xalapa.
--¿Dónde estabas, te busqué toda la mañana?, preguntó ”˜”™El gato modorro”™”™.
Respuesta de la secretaria ejecutiva, compañera de partido, dirigente popular:
--¡Perdón, andaba fornicando!
POSDATITA: Compartimos hoy domingo las columnas ”˜”™Barandal”™”™ y ”˜”™Diario de un político”™”™ en el blog.expediente.mx, y si tuviera espacio y tiempo, pudiera navegar en nuestro twitter y facebook. Gracias.