Y en la feroz campaña en contra de los migrantes de México (treinta millones de los cuales un millón son originarios de Veracruz).
Y, claro, los migrantes de América Central, Venezuela y África.
Ahora, el anuncio la semana anterior de un impuesto extraordinario a las remesas.
El colmo. La desfachatez. La peor agresión a los derechos humanos y a la dignidad. Y a la libertad.
Y por fortuna, rechazado en el Congreso norteamericano.
Por ahora.
Y de ñapa, caray, el otro avisito parroquial de anular la ciudadanía por nacimiento de los hijos de migrantes en Estados Unidos.

DOS. Felonía de escuela primaria

La feroz campaña contra los migrantes perseguidos por la policía migratoria nada es.
Igual, igualito, digamos, que la ampliación del muro en la frontera sur de EU, en el estado de Texas, para prohibir a los migrantes el ingreso.
Y las boyas en el río Bravo.
Y la persecución de los hijos de los migrantes, menores de edad, en las escuelas primarias, guarderías, casas de asistencia y templos e iglesias.
El gravamen a las remesas, “injusto, anticonstitucional porque se cobrará doble tributo” expresado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

TRES. Terrorismo desde enero 20

Desde el veinte de enero cuando Trump tomara posesión (incluso, desde antes), la presidenta Sheinbaum a la defensiva.
Pendientes y de manera obsesiva de revirar “a tiro por viaje” ante cada enunciado y decisión de Trump.
Un Trump quien, de paso, lanza incienso a Sheinbaum para, digamos, desviar la atención de sus felonías contra México y contra los migrantes y contra la iniciativa privada con los aranceles.
La locura aquella de convertir a México en una entidad federativa de Estados Unidos siguiendo, digamos, a Antonio López de Santa Anna, once veces presidente de México, y vendiendo parte del territorio nacional.

CUATRO. Desempleo nacional

El impuesto a las remesas pegará duro, rudo y demasiado a los migrantes con y sin papeles.
Y más, mucho más, a sus familias.
Los migrantes mexicanos partieron a Estados Unidos cuando sintieron y padecieron la incapacidad oficial para animar y reanimar la creación de empleos y de empleos dignos y estables y cubiertos con justicia laboral.
Entonces, las remesas se convirtieron en la gran esperanza concreta y específica y aterrizada para vivir con dignidad.
Sheinbaum avisó: “Si es necesario (claro, claro, claro, que lo es) nos vamos a movilizar porque es muy injusto”.

CINCO. El gato y el ratón

Nadie dudaría que bien pudiera tratarse de un terrorismo político, económico y social de Trump en contra de México para conseguir objetivos superiores.
Y como su estilo empresarial y político.
Cada experto ha tendido en el palenque público sus puntos de vista.
Incluso, los expertos de Banamex vislumbran que el efecto será mínimo en caso de aprobarse, tarde o temprano, en EU.
Pero Sheinbaum ha convocado a “todos los mexicanos a involucrarse”.
Se ignora la estrategia oficial.
Todo parece indicar que Trump juega con Sheinbaum como al gato y el ratón.
La diplomacia, sin surtir efecto. (lv)