Consultas médicas
**Por las nubes...
**Cero control oficial
ESCALERAS: El gobierno federal ha perdido el control. El control en materia de salud, por ejemplo. El aumento desorbitado en las consultas médicas.
Incluso, el primer campanazo lo ha dado el INEGI, Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Del mes de enero a la fecha (desde antes, además), “la mayor alza en más de veinte años” (Notiver).
Bastaría referir el hecho concreto y específico en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
Unos médicos especialistas están cobrando mil doscientos pesos por consultita de quince minutitos, igual, igualito, como estaban acostumbrados en el Seguro Social, el ISSSTE y el hospital de PEMEX cuando laboraban ahí.
Otros cobran mil pesos. Otros entre 800 y 900 pesos.
PASAMANOS: Y cada uno estableciendo sus precios sin ninguna vigilancia de la PROFECO, Procuraduría Federal del Consumidor.
Y, claro, los más afectados, los llamados “pobres entre los pobres”.
Es decir, la población en la miseria.
Y más, porque ya de por sí, indígenas, campesinos y obreros, sobre todo, carecen del servicio médico.
Y como en los hospitales públicos argumentan estar excedidos de consultas…
Además del desabasto de medicinas, entonces, “el infierno tan temido”.
Caray, cuando un indígena, por ejemplo, recibe unos ochenta, noventa pesos por faena diaria desde antes de la salida del sol y hasta cuando la luna alumbra el surco.
Es decir, si son ochenta pesos, 480 (cuatrocientos ochenta) pesitos a la semana.
Frente, digamos, a mil doscientos pesos de consultita de quince minutitos de los especialistas.
CORREDORES: Ni hablar, la resurrección de los curanderos y hueseros. Y de la medicina naturalista. Y de las hierbas en el campo para un tecito.
Simplemente, el INEGI lo dice: Las consultas médicas suben más rápido que la inflación.
Claro, lo peor entre lo peor, el precio de las medicinas.
Una cajita de medicinas con treinta pastillitas, digamos, para el control de la presión arterial vale mil pesos.
Una cajita con treinta pastillitas para la próstata, mil cien pesos.
BALCONES: Será la desaparición del Seguro Popular por Andrés Manuel López Obrador, el expresidente.
Será la mala planeación en las instituciones de salud para las compras médicas.
Será que el combate (ajá) a la corrupción en las compras consolidadas.
Será la escasez de medicinas.
Será el COVID 19.
El resultado social es uno solo: el precio de las consultas médicas disparado, en algunos casos, a más del cien por ciento.
Pero, bueno, mientras Donald Trump siga felicitando al gobierno mexicano, súper.
Más, luego de que Trump apareció ungido con tiara papal como Sumo Pontífice.
PASILLOS: Peor, mucho peor, cuando el enfermo necesita una cirugía.
Un médico advierte al paciente:
Si te opero en este hospital te cuesta 70 mil porque la operación es con cuchillo.
Y si te opero en este otro hospital cuesta 120 mil pesos porque es por laparoscopía.
Y porfis, que nadie invoque el juramento de Hipócrates porque es una farsa, una burla, “una tomadura de pelo”. Palabrerío vano. (lv)