Campos de exterminio
**De Veracruz a Jalisco
**“Violencia, inevitable”
EMBARCADERO: Hay en Jalisco un estercolero de los derechos humanos... Avasallante, por ejemplo, traumático incluso, el número de zapatos de personas secuestradas, desaparecidas, asesinadas y pozoleadas... La cantidad impresionante de ropa de mujer y de hombre despojados en la mesa de los sacrificios donde perdieron la vida... Casi casi como el campo de concentración de Adolf Hitler en Dachau con el ejército de judíos ejecutados... Además, en Jalisco, un centro
de adiestramiento y matanza… Peor tantito, crematorios para desaparecer secuestrados en un país con más de ciento veinte mil desaparecidos… Con todo, nada comparable al número de víctimas enterradas en Veracruz en las Colinas de Santa Fe… “Ni modo, la violencia es inevitable” aseguraba el ex gobernador, Agustín Silvestre Acosta Lagunes, tiempo aquel de “La Sonora Matancera”…
ROMPEOLAS: Hoy, la atención centrada en el Jalisco del ex gobernador del Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro Ramírez… Antes, el epicentro en el Veracruz de Javier Duarte, aquel de que “Aquí no pasa nada”… El góber, por cierto, exhibido como modelo de la nueva generación política por el presidente frívolo, Enrique Peña Nieto… En el Veracruz, inaugurado el tiempo sórdido y siniestro, primero, de los secuestros… Luego, de las desapariciones… Después, de la desaparición forzada, hija de la alianza de políticos, funcionarios públicos, jefes policiacos, policías, jefes narcos, sicarios y pistoleros, malosos y malandros… De Veracruz a Jalisco…
ARRECIFES: En la memoria colectiva, la matanza de migrantes en San Fernando, Tamaulipas… Lo dijo el Fiscal General de la República, Gertz Manero: “Los graves problemas de la delincuencia organizada no nacen de la nada… Surgen y se desarrollan de los problemas locales… Por eso se da esa cantidad de delitos… Y de ahí devienen estas situaciones críticas”… (La Jornada, 12 de marzo, 2025)… Simplemente, la brutalidad histórica… Ya todos lo saben, pero el dato escalofriante es el siguiente: con Hitler, seis millones de judíos asfixiados en sus cámaras de gases y de los cuales un millón era niños… Con José Stalin en Rusia, veintiocho millones de rusos muertos para sostenerlo en el poder dictatorial…
ESCOLLERAS: impresiona la foto donde el montón de zapatos de las víctimas de Teuchitlán, Jalisco, fueron amontonados y exhibidos… Y de la ropa femenina y masculina… Como cuando en el movimiento estudiantil del 68 en la Plaza de Tlatelolco, la foto principal del periódico Excélsior de don Julio Scherer García y a ocho columnas en portada fueron los zapatos de los estudiantes detenidos y exhibidos en ropa interior tanto mujeres como hombres…
PLAZOLETA: Igual que en Teuchitlán, Jalisco, está el resto de la república humanitaria según AMLO, el expresidente… Fosas clandestinas, por ejemplo, y Veracruz en el primero lugar nacional… Los ríos y lagunas, convertidos en cementerios de los malandros… Las personas pozoleadas como en el filme cinematográfico de Luis Estrada intitulado “El infierno” con Damián Alcázar y Joaquín Cosío y el jarocho Ernesto Gómez Cruz como narco alcalde… “Haiga sido como haiga sido”, centros de exterminio… Los cadáveres, por ejemplo, destazados y arrojados en cachitos a los ríos para flotar aguas abajo…
PALMERAS: En Jalisco, por ejemplo, el uso de cerdos, cocodrilos y leones para castigar a las víctimas… Entre ellos, malosos indisciplinados, ajá… Peor tantito, actos de canibalismo donde los sicarios se comían a las personas asesinadas… En Teuchitlán, el horror: “crematorios, huesos humanos calcinados, pedazos de cráneos, dentaduras, cientos de prendas, zapatos y artículos personales… Droga y armas”… (La Jornada, Juan Carlos G. Partida)… Podrá la autoridad “darse golpes de pecho”, pero resulta inverosímil, insólita, la realidad real… “La cruda realidad”… Un país donde únicamente crecen en cada amanecer el miedo, el terror, el pánico, el horror, la angustia y la desesperación… Es el saldo, entre otras cositas y hechos, de “la política de abrazos y besos” para los carteles que “porque también son seres humanos”… (lv)