Y hasta “echan tijera”, el deporte más apreciado en el continente latino. Y quizá en todos los confines del mundo. Ya se sabe, las famosas tardes pasteleras.
Desde luego, los Robots son la cara visible. Atrás de ellos, seres humanos también llamados “pilotos”. Los pilotos que los manejaban a distancia con un teléfono o tableta.
Incluso, entre los pilotos personas discapacitadas y habilitadas con un entrenamiento.
Le llaman “la transportación”.
Caray, los cafés con Robots un gran negocio. Negocio floreciente.
La novedad, sobre todo, en el siglo XXI.
Y aderezada con la Inteligencia Artificial y en donde ya debutaron los dos Beatles sobrevivientes. Paul McCartney y Ringo Star.

DOS. La vida en viñetas…

Viñeta uno:
El cliente del café Dawn es recibido en la puerta por un Robot.
Y el Robot con voz amable y tierna y cariñosa hace sentir la persona más importante del planeta.
El Robot extiende los brazos para dar más fuerza a sus palabras y muestra un rostro suave, casi casi como la máscara noh del teatro tradicional japonés (La Jornada).

TRES. Platican con clientes

Viñeta dos:
Otro Robot acompaña al cliente a su mesa. Y hasta le acomoda la silla.
Entonces, el mismo Robot toma nota de su pedido y aprovecha el momento para charlar sobre su día.
Viñeta tres:
Un tercer Robot lleva el cafecito en una bandeja hasta la mesa.
Y lo sirve.
Y hasta ofrece pancito. Y lleva en otra bandeja el pancito y lo exhibe para despertar el gusto.

CUATRO. Humanos de cocineros

Viñeta cuatro:
En la cocina la comida y el café y las bebidas son preparadas por humanos.
Viñeta cinco:
En el café Dawn y filiales están contratados hasta noventa androides pues constituyen la novedad, digamos, como cuando en un pueblo abren un restaurante, un bar, un antro, y todo mundo se anota y desvive por ser los primeros, aunque en realidad son los mismos que suelen andar de un lado a otro.
Además, la gran ventaja es que los Robots nunca, jamás, se cansan.
Ni tampoco envejecen.
Ni menos enferman (y hasta de soledad, depresión y demencia y/o crudos) para faltar a la chamba.
Nada, pues, de ausentismo laboral.

CINCO. Androides en todos lados

Viñeta seis:
En el café Dawn son muy condescendientes con los androides.
Por ejemplo:
Robots grandes para llevar a las mesas las bebidas.
Y Robots de baja estatura para tomar los pedidos y charlar con la clientela.
Viñeta siete:
En Japón se alistan para llenar de androides las escuelas, las universidades y las oficinas públicas.
Por fortuna, atrás de cada Robot hay gente desempleada, entre ellos, discapacitados. (lv)