Decálogo periodístico
**“Comportamiento ético...
**En la vida privada”
UNO. CEAPP haciendo historia...
La filosofía ética, moral y sociológica de los trabajadores de la información en Veracruz fue definida por la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, CEAPP, ¡vaya nombrecito petulante!
Lo sentenció del siguiente modo: “Un comportamiento ético en la vida privada y en la vida profesional”.
Es decir, en la vida reporteril.
Y en la vida reporteril, ajá, a la hora de reportear y de teclear las notas informativas, las columnas, los tuitazos, los Tik Toks, los WhatsApp, las famosas cuarenta palabras en las redes sociales y anexos y conexos.
DOS. Impecable vida privada…
Por eso, un Teólogo de la Liberación, especialista en moral y ética envía un primer decálogo delineando “el comportamiento ético en la vida privada” de un tecleador.
A) Prohibido a un reportero andar “de ojo alegre”. Nada de ceder en las provocaciones y tentaciones sexuales. Nada de tener una amante, así sea reportera. Menos, un segundo frente. Menos, dejar tirados hijitos por ahí.
B) Y en caso de darse la circunstancia, la igualdad social y biológica. El principio universal y democrático. “Tú me engañas y yo, tu mujer, tu pareja, también”. “Tú eres fiel y yo también” “Tú andas de chavo-ruco y yo de chava-ruca”.
TRES. Oler a jabón California
C) Prohibido llegar tarde a casa, claro, “oliendo a leña de otro hogar” y/o a jabón California. Y prohibido llegar oloroso a licor y a ropa interior de una mujer. Y prohibido llegar en la madrugada. Y más prohibido llegar al día siguiente. Y nada de inventar que una ballena se los tragó y por fortuna pudieron escapar.
D) Prohibido gastarse la quincena en la cantina, primero, con los amigotes, y después, con mujeres de alquiler. Primero, y por encima de todo, están la despensa, el itacate y la torta en casa. Y los útiles escolares de los niños. Y los uniformes y zapatos. Y un dinerito para comprar golosinas en el recreo.
E) Además, con la advertencia de ocurrir así, entonces, el legítimo derecho de la pareja a interponer una denuncia penal que la CEAPP se encargará de dar el seguimiento correspondiente santificando la integridad de la familia.
CUATRO. Prohibido los tríos…
F) Tampoco nada de “bajar la pareja”, la novia, ni menos la amante, a un colega. Más, por el riesgo de que la pasión femenina suele descarrilar en sangre y hasta terminarse encarcelado. Más, existiendo tantas mujeres.
G) Prohibido los tríos y los cuartetos hasta con colegas. En un principio (y como es natural) se mira y trata con una diversión. Y/o en todo caso, la madurez sexual plena. Pero con el tiempo el cariño toma partido y hasta a machetazos suele terminarse.
H) Nada de tener amistades peligrosas. Amistades bajo sospecha, por ejemplo, con los carteles y cartelitos, sicarios y pistoleros, malosos y malandros.
CINCO. Dinerito mal habido
I) Prohibido formar parte de un Cartel Mediático para extender la mano con el político encumbrado para el billetito y a cambio de golpetear a sus enemigos y adversarios y opositores. Simplemente, se trata de un dinero mal habido. Además, con cargo al erario porque ni modo el político lo tome de su bolsillo y/o de su salario y lo que nunca, jamás, ha sucedido en la historia delictiva de los políticos y la prensa.
J) Volverse y aceptarse como un francotirador de la palabra significa caminar a la orilla de un precipicio y rodar en la ladera derecho, derechito, al infierno. Y, bueno, lo dice el proverbio popular, “el que se lleva… se aguanta”.
Posdatita: Este primer decálogo del “comportamiento ético en la vida privada” de un reportero en la era Nahle en Veracruz significa apenas, apenitas, un apuntito. Listo para enriquecerse. Y gracias a los interesados por ocuparse.
En todo caso, los decálogos de ética son campanadas llamando a misa. Va quien desea. Ajá. (lv)