Oposición alucinada
**Y sin reponerse
**Perdieron el rumbo...
ESCALERAS: Desde mediados del año anterior (2024, la segunda derrota electoral por la gubernatura) el PRI y el PAN quedaron alucinados. Atónitos. Azorrillados. Y sin reponerse.
Incluso, y como dicen en el palenque político, “perdieron el rumbo”.
Y sin asestar un político, social y/o electoral.
Es más, con miedo y “miedo al miedo” por si la gobernadora diera un manotazo, por ejemplo, con las denuncias penales interpuestas en contra de élites panistas y priistas.
PASAMANOS: 1) La declaratoria de guerra a los Yunes azules que hasta una encuesta (demoledora de antemano) para si la población todavía los acepta.
2) Y con la cúpula panista de Veracruz callada. A la expectativa. Calibrando a sangre fría la posible acción y reacción guinda y marrón.
3) De hecho y derecho, con la actitud contemplativa de priistas y panistas aplicando el adagio popular de “sálvese… quien pueda”.
4) Solo un par de panistas dando la pelea sin arrugarse. Una, la diputada local, Indira Rosales San Román. Y, dos, la legisladora federal, Marijose Gamboa Torales.
Las dos contendiendo por la candidatura a la presidencia municipal de Boca del Río, como una y otra lo han expresado.
En tanto, el panista Fernando Yunes Márquez, desde la curul local cavilando si se lanza de nuevo por la alcaldía jarocha.
CORREDORES: 5) La imagen panista y priista de estar derrotados de antemano. Es decir, sin salir a pelear con enjundia como en los mejores tiempos del poder.
6) Caray, ningún priista y panista con popularidad suficiente para contender en las urnas con dignidad y ganar… si es que se sabe y se sabe bien.
7) Varios opositores a MORENA buscando apoyos con políticos encumbrados (o que fueron en otros tiempos) sin cabildear con “las bases” y repitiendo la misma estrategia del siglo pasado atrás del Dedazo del jefe máximo.
BALCONES: 8) El PRI fue opción seria. Pero la corrupción de las elites superiores y medianas y una que otra baja cavaron la sepultura.
El tricolor dista mucho, demasiado, de ser lo que fue.
Es más, mucho se duda pueda repetir su hazaña de más de setenta años en el poder.
“Hicimos esto. Hicimos aquello”. Cierto, pero todo es pasado.
Lo peor, “ni el veinte les ha caído” con la derrota de mediados del año pasado.
PASILLOS: 9) A lo más que han llegado los priistas es ponerse al servicio de las figuras estelares de otros partidos. Y, claro, refugiarse en sus alas como los pollitos con mamá gallina.
Raúl Zarrabal, por ejemplo, en el Movimiento Ciudadano.
Raúl Díaz, con Beatriz Paredes Rangel, primero, y luego y/o al mismo tiempo, con el panista Julen Rementería cuando era Senador de la República y ahora diputado federal.
Quizá, claro, también, porque ambos son plurales. Muy plurales.
10) En su largo historial, los priistas pulieron y volvieron a pulir sus mañas. Ahora, se perdieron en el costal de mañas.
VENTANAS: 11) Panistas y priistas olvidando la lección de la historia. Tiempo aquel cuando luchaban contra las fuerzas oscuras del mal.
El mal, para ellos, encarnado hoy en MORENA.
12) Y de ñapa, desperdiciando el momento histórico. Por ejemplo, en la era Nahle Veracruz sigue con el escurridero de sangre. Y las tribus azules y rojas calladas. Se ignora si será civilidad democrática. O temor a levantar la mano.
13) Ninguna figura priista o panista son un carisma fuera de serie. Por ejemplo, como lo ejerció Alfredo Vladimir Bonfil, el polémico líder nacional campesino y diputado federal estremeciendo el Palacio Legislativo con el discurso incendiario.
14) Y de ñapa, la deserción panista y priista, entre otros partidos, a MORENA.
Y en unos casos, los desertores expuestos al ridículo. (lv)