Capataz de la tierra
**Trump, enloquecido
**Ya perdió cabales...
UNO. El amo del mundo
Donald Trump ya se cree y siente el amo, el dueño, el capataz del mundo.
Por ejemplo, amenazó a Canadá con convertirla en el estado número 51 de Estados Unidos.
Y a México en el número 52. Y a Groenlandia en el número 53.
Y si es necesario comprarla lo hará.
Amenazó con rescatar el Canal de Panamá.
Y sigue amenazando con la deportación de migrantes más grande en la historia norteamericana.
Pero cada vez más (y por fortuna, justicia poética) suman gobernadores demócratas preparándose para defender a los ilegales.
DOS. Paraíso migratorio en E.U.
Los Angeles tiene merecido y honroso santuario para los migrantes.
Ahora, se han añadido los estados de California, Illinois, Chicago, Filadelfia, Boston, Massachusetts y Denver.
En Chicago, por ejemplo, la advertencia de una junta escolar: “No permitiremos que agentes migratorios tengan acceso a las escuelas para llevarse a los niños en una redada, detención y deportación”.
También en Chicago, un diputado federal precisó: “Yo seguiré trabajando con oros líderes y el gobernador para mantener nuestra comunidad como un lugar donde los extranjeros son bienvenidos”.
En Illinois, los habitantes dijeron: “Somos un estado santuario, inclusivo, para los migrantes” (La Jornada).
TRES. Se habría inventado atentado…
Un país fragmentado por el racismo, la xenofobia y la segregación.
Por eso, incluso, y entre otras razones, la versión de haberse inventado un atentado, Trump ganó la elección presidencial por segunda ocasión.
A tono, digamos, con el siglo pasado cuando el objetivo racial era la gente de color.
El escritor William Faulkner, Nobel de Literatura, teniendo como epicentro la lucha de los negros para el reconocimiento de los derechos civiles y humanos.
Hoy, son los migrantes. Trump, a la cabeza. El dueño único y absoluto del planeta.
CUATRO. Proteger ilegales
Y lo peor, cada vez parecen recrudecerse.
Por ejemplo, el aviso del Zar Antimigratorio de Trump de que serán deportados los hijos de los migrantes nacidos en Estados Unidos.
En California, el gobernador demócrata, Gavin Newson, en sesión especial con la Legislatura estatal para promulgar leyes aprobando más fondos para proteger a sus paisanos de la deportación masiva.
Y para defender a los Dreamers, los jóvenes quienes en momento estelar cuando eran menores de edad llegaron a EU.
Insólito: en Los Angeles viven 950 (novecientos cincuenta) mil indocumentados.
Y por fortuna, todos están protegidos.
Los Angeles, el santuario terrenal para todos ellos.
CINCO. Huyendo del desempleo
El veinte de enero, toma de posesión de Trump, iniciará la deportación masiva.
Ya se conocerá la reacción presidencial de la doctora Claudia Sheinbaum Pardo.
Y de cada uno de los gobernadores del país con alta población migratoria.
Treinta millones de mexicanos en EU y de los cuales un millón son originarios de Veracruz.
La mayor parte se fueron soñando con un empleo digno y pagado con justicia laboral para, entre otras cositas y hechos, ahorrar dinerito mensual.
Aquí, en la república, el desempleo, el subempleo y los salarios pichurrientos.
Y la incapacidad manifiesta de las tribus políticas para animar y reanimar en la iniciativa privada la creación de empleos en las regiones indígenas, campesinas, obreras, suburbanas y urbanas. (lv)