Pobres migrantes
**Con Donald Trump
**El infierno de nuevo
ESCALERAS: La cruda verdad sobre los migrantes de México (y Veracruz) y de América Central ante el sucesor de Joe Biden como presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está en el palenque público.
Lo expresa de manera clara, concisa y precisa el respetado y respetable periodista, Raymundo Riva Palacio, en la columna “Estrictamente Personal” publicada en el periódico El Financiero, intitulada “Vecinos distantes” como el libro “Vecinos distantes” del periodista Alan Riding.
Uno:
Llevar a los migrantes sin papeles a “centros de detención (que recuerdan los campos de concentración contra japoneses en la Segunda Guerra Mundial)”.
Dos:
“Deportar un millón de migrantes por año, lo que ha generado preocupación en ambos países; allá por el impacto que tendría en la economía y en la fuerza laboral (40% de la mano de obra es extranjera), y aquí por la incapacidad para recibir tal cantidad de deportados”.
Tres:
“Reforzar la seguridad en la frontera con México y terminar la construcción de un muro, que frene la migración y el tráfico de drogas”.
PASAMANOS: Cuatro:
“Restablecer el programa Permanecer en México, para que este país sirva, como en la primera parte del gobierno obradorista, como estación de paso de miles de migrantes mientras se procesan sus solicitudes de asilo”.
Cinco:
“Restringir las visas temporales H-2 para trabajadores agrícolas, que tendrían un fuerte impacto en México”.
Seis:
“Con el Senado y el Congreso controlados por los republicanos, la fuerza que tendrá Trump para implementar sus reformas y enmiendas será la más fuerte que haya tenido un presidente estadounidense en 20 años, aunque la última vez se utilizó para la guerra contra el terrorismo. Hoy es México”.
CORREDORES: Para Donald Trump, sin duda el magnate y político con el mayor odio a los migrantes en la historia de Estados Unidos y de cara al mundo, la prioridad es, primero, el feroz combate a los migrantes, y segundo, una frontera segura.
Escribe Riva Palacio: “Una frontera fuerte y poderosa que impida la inmigración y el narcotráfico”.
Y en tales circunstancias y más allá de la miel derretida sobre la conversación con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo en la primera llamada telefónica, “la mano dura de Trump contra México está sobre la mesa”.
Y Trump “comenzará a golpear. Tiene doce semanas para prepararse a lo que viene”.
BALCONES: Riva Palacio fue corresponsal durante varios años en Estados Unidos de periódicos mexicanos.
También cursó posgrado en la Universidad de Harvard sobre periodismo.
Convivió en “el mano a mano” con los periodistas de EU y en el frente de batalla.
Es un estudioso del fenómeno social y con profundo conocimiento de la investigación social.
Además, un analista de la naturaleza humana.
Y de los políticos.
Y de los partidos políticos, sobre todo, en EU con únicamente dos partidos.
Y dada la moral periodística avalando su trayectoria, su palabra y observaciones y referencias cuentan, y cuentan mucho.
PASILLOS: En Estados Unidos más de treinta millones de mexicanos como migrantes.
Más de un millón, originarios de Veracruz.
Todos, buscando (como la mayoría tiene) una oportunidad laboral.
Nunca, por cierto, encontrada en México ni en el Estado jarocho.
Entonces, con una política migratoria recrudecida con Trump como la tendencia manifiesta, vivirán y padecerán (con sus familias, aquí), el peor infierno de la vida.
Ya fue vivida en el primer periodo constitucional de Trump de cuatro años.
Ahora, cuatro años más en el rincón más arrinconado del infierno.
Y todos ellos seguirán firmes en el intento del paraíso terrenal norteamericano pues ante las circunstancias en el país de una política fallida en materia económica, ningún caso tiene pensar en regresar a la llamada “república humanística” del Edén. (lv)