PASAMANOS: Indicativo y significativo, por ejemplo, un Veracruz en el primer lugar nacional en migración a Estados Unidos.
Más de un millón de paisanos (y cada vez se incrementan) huyendo de un Veracruz pródigo en recursos naturales habitado por familias en la miseria, la pobreza y la jodidez.
Bastaría evocar el dato oficial de la secretaría de Trabajo federal y el IMSS: El gobierno de la 4T en Veracruz es el único que nunca pudo recuperar los miles de empleos perdidos en el par de años del COVID.
Además del gigantesco y enorme costal de demandas de trabajo quizá, más, mínimo, en el mismo decibel que las peticiones a San Juditas Tadeo en cada pueblo por donde ha caminado sembrando la esperanza ramplona y barata.

CORREDORES: Cada semana de las cuatro latitudes del Estado jarocho parten paisanos a EU.
Unas veces, con bajo perfil y siempre, todos, por su cuenta.
Sin la mano tendida y extendida al gobierno del Estado.
En otras ocasiones, se trepan a un autobús alquilado por “los polleros” y quienes les llegan a cobrar hasta trescientos mil pesos según ande la feroz persecución de la policía migratoria en Estados Unidos.

BALCONES: Son mujeres y hombres solteros y casados los migrantes.
Todos en el éxodo fuera de control al país vecino luego de tantos fracasos consecutivos tocando puertas y ventanas laborales para una oportunidad.
Más, cuando bastaría leer y releer el anuncio económico ofertando, ciertos, empleos.
Pero trabajos como, por ejemplo, para trabajadora doméstica se quede a dormir. Albañiles. Fontaneros. Pintores de brocha gorda. Jardineros. Y veladores.
Y, claro, con un salario ultra contra súper jodido.
¡Vaya farsa aquella cuando un alcalde cacareara su pueblo nombrándole “tierra de oportunidades”!
Casi casi, el pitorreo. El despapaye. La mofa. La burla.

PASILLOS: Y en materia de seguridad, la mitad de la población y casi casi la otra mitad habitando el rincón más arrinconado del infierno social.
Allí donde ninguna esperanza real, palpable, existe para liberarse y vivir los días y noches sin sobresaltos por el miedo y el temor y el horror a un secuestro, una desaparición, una extorsión, un asesinato y una fosa clandestina.
Caray, inverosímil, Veracruz, campeón nacional en fosas clandestinas.
Más ahora en el tiempo de la 4T, tiempo (ajá) del “socialismo con rostro humano”.
La patraña. La estafa.
Hace muchos, muchísimos años, el estado jarocho dejó de ser “la noche tibia y callada” de Agustín Lara.
Y el paraíso terrenal que tanto deslumbrara al barón Alexander Von de Humboldt.

VENTANAS: Son los grandes pendientes sociales que únicamente sirven a los políticos para andar en campañas electorales con discursos patrióticos y declaraciones mediáticas insulsas y superficiales.
Pero como la gente en la miseria y la pobreza sigue estando jodida, entonces, ni hablar, suelen extender la mano para recibir la bequita bimensual de seis mil pesos cantando aleluyas y hosannas camino al Gólgota.
Total, los políticos siempre los necesitan para ganar en las urnas.
Y como los jodidos nada tienen suelen agarrar lo que se pueda. (lv)