Desaparecido líder cañero
I (Impunidad en el campo desde crimen de Roque Spinoso Foglia)
El 25 de noviembre del año 1984, cuarto año del sexenio de Agustín Acosta Lagunes, en el rancho “El relicario” fue asesinado de 120 (ciento veinte) balazos el líder nacional de los cañeros, Roque Spinoso Foglia.
Antes, el presidente Luis Echeverría Álvarez lo encarceló en el penal de Allende luego de que tomaran y paralizaran el ingenio San Cristóbal, de Carlos A. Carrillo.
Pero antes, el 5 de diciembre del año 1969, el líder cañero del ingenio La Constancia, Gilberto Aguirre, fue asesinado.
Entonces, un pariente suyo, conocido como el famoso “Tomasín” hizo justicia divina y asesinó de quinientos balazos al comandante policiaco, Juan Hernández, el homicida visible del dirigente cañero.
Desde entonces, hacia el segundo tramo del siglo anterior, la vida en el mundo cañero de Veracruz es más, mucho más intensa y volcánica que en otras latitudes geográficas también en la industria de la caña.
Por ejemplo: El 18 de junio del año que termina, último del sexenio de la 4T en el territorio jarocho, desapareció el dirigente cañero de Úrsulo Galván, Liborio Sánchez.
65 años de edad. La desaparición en el poblado de El Salmoral.
Es el líder de la Unión Agrícola Regional de Productores de Caña de Azúcar del ingenio La Gloria.
Hace nueve años, su esposa, Elda Nora Domínguez Méndez, fue rafagueada “cuando salía de su casa en Ursulo Galván” (Damián Gaona).
Y la señora murió por las heridas de bala.
Desde hace dos meses, ninguna pista, ningún rastro, ninguna huella sobre Liborio.
Sesenta días en que la familia ha estado en la peor angustia de la vida pues nada saben.
Y cuando la Comisión Estatal de Búsqueda lo boletinó, de nada, absolutamente de nada ha servido.
La Comisión, pues, cumpliendo la obligación burocrática y allá que la Fiscalía General pudiera actuar.
En la industria cañera, grandes intereses.
Primero, económicos.
Y segundo, políticos.
Por ejemplo, los líderes bien pueden brincar al liderazgo estatal y nacional.
Pero de igual modo, a una presidencia municipal y una curul local o federal.
“El tigre” Mario Hernández Posadas, hasta senador de la república fue.
Manuel Pérez Bonilla, líder nacional de los cañeros, igual que Roque Spinoso Foglia.
Además, diputado local.
II (Cada parte… sus mentiras)
Nunca el asesinato con 120 (ciento veinte) balazos de Roque Spinoso fue esclarecido.
Los años de Acosta Lagunes fueron caminando y llegaron otros, incluso, el bienio del capitán Fernando Gutiérrez Barrios, y el crimen siguió, como hasta el día de hoy, en el misterio.
Igual, igualito que con los asesinatos de líderes cañeros posteriores, más o manos, “y a ojo de buen cubero”, unos sesenta al día de hoy.
Entonces, ocupa y preocupa a los familiares y amigos y compañeros de Liborio Rafael Vázquez Narváez su desaparición.
Más en un país con más de ciento veinte mil desaparecidos y de los cuales unos siete mil, aprox., son de Veracruz.
El campo cañero, el territorio de la impunidad.
Muchos, demasiados, excesivos intereses en conflicto haciendo más turbio y complejo el día.
En aquel tiempo, desde el palacio de gobierno de Xalapa fue afirmado que el crimen de Roque Spinoso fue por equivocación.
Un de las clásicas excusas de toda la vida y que, bueno, la autoridad cree, está segura, de que los ciudadanos de a pie y motorizados le cree y a ciegas.
Cada parte, viviendo con sus mentiras.
Los Pinochos sexenales.
Desde el 7 de septiembre del año 2012, la señora Aracely Salcedo (ahora enferma de cáncer) sigue buscando a su hija Fernanda Rubín desaparecida de una discoteca en Orizaba.