Por vez primera en la historia desde su fundación con el góber Rafael Hernández Ochoa, la protesta social y la indignación crónica de los empleados de TV Más.
Todos, a partir de la muerte del compañero Abraham por la falta de mantenimiento en las instalaciones.
Los trabajadores, a la calle y en la calle y como contestatarios como lo anunciaron la semana anterior.
En respuesta, y como siempre, Cuitláhuac García lavándose las manos como Poncio Pilatos e inculpando a su antecesor, Miguel Ángel Yunes Linares, por la falta de inversión en el canal.
Pero los trabajadores fueron lacónicos: Cuitláhuac, le dijeron, tuviste seis años para invertir y nada hiciste.
Tampoco, Víctor Cisneros, quien carga en su hoja de servicios la muerte de un trabajador.