Fin de un sexenio
**Cuarto lugar en desaparecidos
**Veracruz ensangrentado
UNO. Mal fario de un político
Mal está terminando Cuitláhuac G. J. el sexenio obradorista en Veracruz.
Primer lugar nacional en feminicidios. Secuestros. Extorsiones. Y fosas clandestinas.
Y en migración a Estados Unidos debido a tantos desempleados.
Luis Velázquez
Veracruz, han dicho la secretaría de Trabajo y Previsión Social y el IMSS, la única entidad federativa donde la autoridad estatal ha sido incapaz de recuperar los miles de empleos perdidos en el par de años del COVID.
Ahora, Veracruz, en el cuarto lugar nacional de desaparecidos.
Lo dice el Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia.
Solo falta que Cuitláhuac trepe al micrófono para refutarlos.
DOS. Generación Farsante
En primer lugar nacional, Jalisco.
Tamaulipas, segundo.
Estado de México, tercero.
Veracruz, cuarto.
Y Nuevo León, quinto.
En total en el país, 115 mil 147 (ciento cuarenta y siete) personas desaparecidas.
Y el quinteto de estados anteriores ocupando el 48 por ciento de personas secuestradas y desaparecidas.
En Veracruz, 33 (treinta y tres) Colectivos, integrados con madres y padres con hijos y parientes plagiados, desaparecidos, quizá asesinados, acaso enterrados en fosas clandestinas.
¡Vaya resultado social con las tribus gobernantes de MORENA, el partido político ondeando la bandera de los derechos humanos!
Farsantes.
Simple y llanamente, farsantes.
TRES. El peso de la historia sobre Cuitláhuac
Los 115 mil 147 desaparecidos ubicados en los últimos 24 (veinticuatro) años (La Jornada, Jessica Xantomila y Jared Laureles).
De los años dos mil al 2024.
Es decir, con los gobernadores Miguel Alemán Velasco, Fidel Herrera Beltrán, Javier Duarte, Miguel Ángel Yunes Linares y Cuitláhuac García.
Los exmandatarios ya fueron juzgados por los ciudadanos y los familiares de las víctimas.
Ahora, todo el peso de la historia y con hechos concretos y específicos en contra del góber salsero, huapanguero, danzonero, chicharronero, camaronero, bolichero y beisbolista.
CUATRO. Paraísos terrenales
De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, en Jalisco, 14 mil 999 desaparecidos.
Tamaulipas, 13 mil 209.
Estado de México, doce mil 625.
Veracruz, 6 mil 988.
Y Nuevo León, 6 mil 785.
En contraparte, los estados de Campeche, Tlaxcala, Yucatán, Aguascalientes y Tabasco, con el menor número de desaparecidos.
Campeche, por ejemplo, con 126. Y Tabasco, 471.
Ha de preguntarse, entonces, las razones de peso y con peso para que en otras entidades federativas el índice de secuestros y desapariciones sea mucho menor.
Se ignora, por ejemplo, si debido a que los jefes de los Poderes Ejecutivos se aplicaron en la tarea para garantizar la seguridad en la vida de los gobernados.
CINCO. El góber desacreditado
Por ahora, el descrédito de Cuitláhuac G. J. y los suyos.
La secretaría General de Gobierno, encargada de la operación política.
La secretaria de Seguridad Estatal.
La Fiscalía General, responsable de una justicia pronta, rápida y expedita.
Más, si se establece como premisa universal que entre más impunidad, más incertidumbre y zozobra, en una especie, digamos, de círculo vicioso.
Nunca como hoy, además, en la historia estatal Veracruz en el primer lugar nacional en feminicidios.
Las mujeres, plagiadas, desaparecidas, quizá ultrajadas, asesinadas y arrojados sus cadáveres por ahí.
Desde el lado oficial inculpando al machismo, ¡ay Poncio Pilatos lavándose las manos y curándose en salud!
SEIS. 2023, peor año
Indicativo y significativo: De acuerdo con el reporte oficial, el peor año con los desaparecidos fue 2023.
Es decir, el año anterior.
Cuitláhuac G. J., en el penúltimo año del sexenio.
La Gran Cuarta Transformación. La Purificación Moral. La Honestidad Valiente.
El desdén y el menosprecio por los derechos humanos de mujeres y hombres, niños y ancianos.
Nunca en cinco años y siete meses el góber se ha ocupado ni preocupado por garantizar la vida.
Quizá, rebasado por las circunstancias y dada su incompetencia, optó por la indiferencia, la apatía, los oídos sordos y el desprecio.
¡Vaya desencanto y frustración social con la generación morenista en el poder sexenal!