Y poco a poco, las lluvias y los malosos lo fueron desmoronando hasta desaparecer.
Un presidente municipal se llevó el kiosco del parque a su cas para que los hijos y sus amigos jugaran.
Otro alcalde cerró una biblioteca construida por el antecesor a un lado del parque y la archivó por ahí en una casa lejana del centro urbano.

DOS. Mesianismo político

Una alcaldesa, la primera, parece, en el pueblo, permitió que la ambulancia municipal quedara destartalada.
Entonces, los enfermos eran (¿todavía?) trasladados en el carro de la Limpia Pública a un hospital en el puerto jarocho.
El día cuando un político local, tres veces presidente municipal falleciera, su cadáver fue paseado en el féretro en los cuatro puntos cardinales del pueblo.
Un alcalde declaró la guerra al presbítero del pueblo porque su único delito era organizar justas deportivas en la cancha de la iglesia.

TRES. Cada vez más antros

En alguna cueva del pueblo, en la zona rural, permaneció escondido Antonio López de Santana, tres veces gobernador y once ocasiones presidente de la república, y nunca la cueva fue conservada como reliquia histórica y cultural.
Tiempo existió cuando un presbítero lleno la iglesia de perritos. Unos cincuenta, parece.
Y los animalitos dormían en las bancas a la hora de las misas y los rosarios y ay del feligrés que los despertara y correteara porque el infierno se encendía.
Un cine quebró y lo cerraron. Otro cine quebró y lo cerraron. Y desde entonces, ninguna diversión sana.
Por el contrario, abriéndose cantinas, bares y antros y prostíbulos y en congales de mala muerte y suerte.

CUATRO. Delirios públicos

La alcaldesa con fama pública de una pareja que cuando emborracha la golpea.
Incluso, hasta ordenando a la policía lo encarcele.
Además, de que el señor presidente del comité municipal del DIF es violento, bravucón, altanero y golpeador con los ciudadanos.
Casi casi, digamos, dueñito del pueblo. Y por ministerio de Ley.
El poder, pues, de la esposa, y militante de MORENA, ajá.
¡Vaya destino de Soledad de Doblado!

CINCO. Hermandad con E.U.

El pueblo convertido en un abastecedor de migrantes, mujeres y hombres, y sin papeles, ilegales, indocumentados a Estados Unidos.
Los estados de Texas y las dos Carolinas (del Norte y del Sur) como los refugios norteamericanos ideales para los paisanos.
Entonces, caray, y a tono con los Pueblos Mágicos, nada más conveniente que hermanar a Soledad de Doblado con Texas y el par de Carolinas.
En nombre, claro, de la paz y la solidaridad universal.
Y es que el pueblo vive y subsiste (de milagro) con la grandeza económica del siglo pasado con la producción de papaya, transportada en carros de carga a la Central de Abastos de la Ciudad de México y todo un exitazo.

SEIS. Migrar, único destino

Memorables y citables aquel tiempo del siglo pasado cuando en las calles del pueblo desfilaban los agraristas y campesinos ondeando en las manos cartulinas con la foto de Lenin, el ideólogo y dirigente ruso más famoso de la historia soñando con “el socialismo con rostro humano”.
Los grandes congresos presididos, entre otros, por Úrsulo Galván, el gran líder campesino del pueblo que lleva su nombre y trascendido en el Estado de Veracruz.
Pero de aquel tiempo nada queda. Más que la nostalgia, digamos. Lo que fue y dejó de ser. Sin trascender, por ejemplo, para un museo.
Pueblo jodido donde el único destino es migrar lo más lejos posible…