Uno. El secretario General de Gobierno, Érick Lagos Hernández,“soltó” que mil policí­as y marinos y soldados”™”™, más 44 agentes especiales rastreaban su pista… de igual manera como, por ejemplo, cuando el asesinato de la corresponsal de Proceso, Regina Martí­nez, formaron una súper comisión con agentes federales y estatales del Ministerio Público, más criminólogos, más fotógrafos criminalistas, para rastrear huellas… con el reality show de “El Silva” conocido por todos.

Dos. Luego, filtraron en un periódico digital de Xalapa que tení­an un detenido… del que nadie conoce el resultado.

Tres. Después, el comisionado especial de la procuradurí­a de Justicia para el caso, Enoc Maldonado, habló de dos ejes de investigación: a, pleitos con un vecino, y, b, su trabajo reporteril.

Cuatro. Entonces, “soltaron” otro “borregazo”: la dueña de la cantina “El mamey” lo tení­a amenazado desde cuando publicara la información de un migrante secuestrado en que estarí­a involucrada la cantinera.

Cinco. Y el viernes 7 de enero manejaron que tení­a relaciones extraconyugales con una señora casada.

Ahora solo falta que al ratito, en unas horas digamos, también manejen el mismo argumento del gobierno del presidente Miguel de la Madrid cuando asesinaron al columnista Manuel Buendí­a por la espalda, de que era gay y el crimen se trataba de una venganza entre sus iguales.

Incluso, la saña del gobierno federal llegó a lo siguiente: en el periódico Excélsior, de Regino Dí­az Redondo, publicaron un poema en primera plana, a 8 columnas, que Buendí­a habí­a escrito…, según ellos, para su pareja homosexual.

En fin, palos de ciego del Duartismo ante la incapacidad de los “mil policí­as, marinos y soldados” buscando a Gregorio Jiménez.

El mismo viernes 7, en la tarde, a las 18 horas, el gobernador Javier Duarte habí­a anunciado la inauguración de la Olimpiada Juvenil en Coatzacoalcos para llevar el nombre de Veracruz, junto con los Juegos Centroamericanos de fin de año, al concierto internacional.

Y el góber… desapareció del mapa. Se escondió, reproduciendo así­ el modelo del panista Vicente Fox Quesada cuando los trabajadores de Canal 40 le pidieran resolver el conflicto con TV Azteca y el presidente contestó de la siguiente manera bí­blica: “¿Y yo… por qué?”

En su lugar envió al ideólogo de la polí­tica educativa de Veracruz, Adolfo Mota Hernández, secretario de Educación, con el ideólogo de la polí­tica deportiva, ex croupier del cacique Felipe “El indio” Lagunes en su casa clandestina de juego, Rafael Cuenca.

La noticia del secuestro del colega reportero… ya anda en el mundo.

MODELOS PARA ARMAR VIDEOS

Temas para que las facultades de Comunicación de Veracruz (suman 25) armar unos videos en Youtube. Y más, la FACICO de la Universidad Veracruzana que está cumpliendo 60 años de edad y estrena director con Marco Malpica, nombrado luego de un cuartelazo mediático.

Video uno: tres dí­as después, sábado 8 de febrero, del secuestro de Gregorio Jiménez, el mundo reporteril del mundo… pendiente. Mientras, el góber jarocho ni sus luces. Ni una palabra.

Video dos: un diputadito local, Eduardo Sánchez, a quien regalaron la curul, miembro de un holding periodí­stico conocido, en su mayor parte, como los Heraldos, defiende al Duartismo. En respuesta, los reporteros le gritan “palero, vendido, chayotero”.
Video tres: parte de la prensa, mejor dicho, la prensa ginista, arremete (a cambio del billete fácil) contra la otra prensa solidaria con la causa de Gregorio Jiménez. Por añadidura, algunos dueños de medios y su cuerpo directivo prohí­ben a reporteros asistir a las marchas, en la inteligencia del despido inmediato.

Video cuatro: con el secuestro del reportero, y el secuestro, desaparición y asesinato del artista de Televisa, Gibrán, impune hasta el momento, puede armarse otro video.

Video cinco: la vocera y directora de Comunicación Social del gobierno de Veracruz en conciliábulo con dueños y directivos de medios en Coatzacoalcos. En la calle, la infanterí­a reporteril protesta.

Video seis: la Comisión de Atención y Protección a Periodistas, “Los Namikos”, programan su informe estelar anual en Coatzacoalcos. Ni modo, lo suspenden… ante las protestas de los reporteros en solidaridad con Gregorio Jiménez.

Video siete: noticia principal en Notiver el sábado 8 de enero: Ya van 72 horas… infructuosa búsqueda.

En El Dictamen: Sube la inflación por regresos y gasolinazos.

En El Puerto: Transporte inservible… en puerto jarocho.

En El Heraldo: Ejército, al servicio del combate a incendios.

En Imagen: Se dispara la inflación. La más alta de los últimos años.

Video ocho (y último, por lo pronto): un estudio fotográfico de la cara y las expresiones del rostro de la vocera y directora de Comunicación Social del Duartismo, desde expresiones felices hasta la cara desencajada en Coatzacoalcos ante los reporteros irascibles por el crimen del colega de la fuente policiaca, Gregorio Jiménez.

“SI LA MONTAÑA NO VIENE A Tí, LLÉVATELA”

Hoy sábado, la familia del diarista secuestrado, Gregorio Jiménez, fue trasladada a la ciudad de Xalapa para una audiencia privada con el gobernador Javier Duarte.

Es decir, en vez de que el jefe del Poder Ejecutivo de Veracruz viajara a la congregación Allende, de Coatzacoalcos, para platicar con la familia en la desgracia, se la llevaron a Xalapa.

Un dí­a anterior, Duarte habrí­a de inaugurar la Olimpiada Juvenil en Coatza; pero envió a dos representantes, Rafael Cuenca y Motita, porque estaba en una comidita en Perote en la presentación del Programa Nacional de Prevención de Incendios Forestales con los titulares de las secretarí­as de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) Juan José Guerra Abud, y de la Defensa Nacional (SEDENA) Salvador Cienfuegos Zepeda.

ESPOSA RECHAZA CASA OFRECIDA POR JD

El gobernador de Veracruz y una parte del gabinete (el secretario General de Gobierno, el procurador de Justicia, el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la secretaria ejecutiva del Comité de Atención y Protección a Periodistas, entre ellos) se reunieron con la familia (la esposa y los hijos y otros familiares) del reportero secuestrado en la congregación de Allende, en Coatzacoalcos.

De acuerdo con las versiones de una persona cercana a la esposa del periodista, el gobernador habrí­a planteado los siguientes asuntos:

1.-Que pese que su gobierno no es responsable de la desaparición del compañero..... están haciendo todo lo posible para encontrarle con vida.

2.-Que incrementaron el número de agentes de la AVI para buscarlo. Eran 48 especiales, son más ahora.... no supo precisar cuántos.

3.-Que le pide un voto de confianza para su administración para dar con el diarista de la fuente policiaca de los periódicos El Liberal y Notisur.

4.-Que independientemente de todo, le ofrece de regalo una casa en Coatzacoalcos.... con todo.

5.-Que su casa, de donde se llevaron a Gregorio, que está en obra negra, se la estarí­an componiendo. poniéndole ventanas y puertas.

6.-Que la esposa del diarista no aceptó la casa en esos momentos. Que habrí­a dicho "que no tení­a cabeza para pensar en eso, en una casa nueva, y menos de regalo, y menos en tales circunstancias. Que ella lo que quiere son noticias de su esposo y que aparezca vivo.

ENGAÑÓ GINA A FAMILIA DE REPORTERO DESAPARECIDO

Como si lo material sustituyera al familiar extraviado, el gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa, ofreció a la esposa de Gregorio Jiménez de la Cruz, una casa, la misma que le ofreció hace tres años a los padres de Gabriel Manuel Fonseca Hernández “Cuco”, sin embargo, a la familia del reportero policiaco de Acayucan, nunca se cumplió, sólo mandaron block, cemento, varillas y láminas; pero y ¿Quién pagaba la mano de obra?, los pesos que gana don Juan Fonseca Aguirre, lustrando zapatos, le da sólo para pasar el dí­a.

En la reunión que sostuvo el dí­a de ayer, la familia del reportero del Notisur y Liberal del Sur, en donde por cierto, sólo estuvieron directivos del corporativo Olmeca, pues los ílvarez Peña, no tienen una relación cercana al ejecutivo estatal, estuvo, Gina Domí­nguez Colí­o, la vocera próspera, la misma, que prometió, construirle una casa al papá de Cuco, además de una beca para su hijo menor y un apoyo económico, quincenal.

Pero la esposa del reportero porteño, no aceptó la casa, exigió que el padre de sus hijos, regrese con bien, con vida, sano y salvo, que se agilicen las investigaciones y que los mil elementos que están en la búsqueda, sin escatimar recursos, den resultados, pues a cuatro dí­as, la verborrea de parte de las autoridades investigadoras, es la misma, siguen esforzándose.

En esa mesa donde estuvo la familia del reportero, que desapareció a las 7:15 de la mañana, cuando salí­a de su vivienda ubicada en Villa Allende, Coatzacoalcos, les prometieron ayuda económica y psicológica, pero en concreto a la investigación, si quiera un dato que han recabado los elementos de la Agencia Veracruzana de Investigaciones (AVI), les dieron a conocer.

En esa plática, hubo demagogia, el mismo gobierno difundió la fotografí­a, y un escueto pí­e de foto, para intentar calmar el clamor de justicia, pero la esposa, se mantuvo firme de pie, en exigir, que necesita a su marido a su lado, reclamó porque pasó casi una hora, sin que recibiera el apoyo de los elementos de la Policí­a Naval, la tardanza, la lentitud de las investigaciones, fueron el reclamo de la mujer, que a pesar de estar resguardada, viven con miedo y angustiada, porque el hombre, con quien vivirí­a el resto de su vida, está desaparecido, como muchos de los reporteros, que han sido ví­ctimas de la impunidad del gobierno próspero.

Sí­, la vivienda que le prometió a la familia de “Cuco”, será la misma que le prometieron a la familia de Goyo, que se puede esperar, migajas, para dejar pasar el rato y que se olvide en la colectividad, que hay un reportero, un hombre, un padre de familia que no está en casa, que fue secuestrado por la inseguridad que se vive en el territorio veracruzano, desde que Duarte de Ochoa, asumió su mandato.

La familia no quiere una casa, quiere, exige a Gregorio Jiménez de la Cruz de nuevo en casa, de nuevo trabajando, investigando, dando a conocer lo que sucede en Coatzacoalcos, que la información que trascienda, sea el clamor de la sociedad, harta de tanta impunidad.