Y hasta en asesores se han convertido… Digamos, y como recuerda el viejito del barrio, la fascinante y encantadora cercanía con el Príncipe, “en el país de un solo hombre” como es el jefazazo del Poder Ejecutivo federal… (Y por añadidura, el mismo caso repetido con los gobernadores)…

ROMPEOLAS: Pero, bueno, toda la historia política está llena de tales casos… Suetonio, por ejemplo, se volvió asesor de un Emperador romano… Y cuando descubriera que unos compañeros lo intrigaban con el jefe máximo, entonces, renunció al cargo… Y se aisló por ahí en una comunidad lejana y encerró a escribir su libro “Los doce Césares”, un estudio sicológico de cada uno de los dueños del poder…

ARRECIFES: Casos notorios y manifiestos (avergonzantes) de los escritores Carlos Fuentes Macías y Fernando Benítez… Fuentes, el escritor del siglo pasado a quien únicamente faltó coleccionar entre sus medallas y honores el Nobel de Literatura… Y Benítez, el inmaculado periodista y cronista fundador de suplementos culturales… Luego de la masacre de trescientos estudiantes y civiles en la plaza de Tlatelolco en el movimiento del 68… Y después de la masacre del 10 de julio en la Ciudad de México, Fuentes y Benítez fueron categóricos en su posición intelectual expresando la siguiente frase bíblica: “Echeverría o el fascismo”…

ESCOLLERAS: Más cuando Echeverría asestó aquel Golpe de Estado a don Julio Scherer García, el director general del periódico Excélsior en el mejor (y más digno) capítulo editorial de su vida… Tiempo cuando el presidente de la república le enviara a sus porros para tronar la junta sindical en contra de Scherer… Fuentes, el defensor de Fidel Castro Ruz luego de derrocar con “Los barbudos”, entre ellos, Ernesto el Che Guevara, al dictador norteamericano, Fulgencio Batista… Simplemente, “candil de la calle y oscuridad de tu casa”…

PLAZOLETA: Peor tantito: nunca Carlos Fuentes ni Fernando Benítez se arrepintieron (ni desdijeron) de su amor patrio por Echeverría… Con todo y que antes, finales del sexenio de Gustavo Díaz Ordaz y en donde Echeverría era secretario de Gobernación, el poeta Octavio Paz Lozano renunciara a la Embajada en la India en protesta a la masacre estudiantil del 68… Claro, varios sexenios antes y después, Paz siguió laborando como diplomático en el extranjero nombrado por los presidentes en turno… Es más, algunos escritores precisan que Paz fue de todos el más cercano a los Príncipes del palacio federal…

PALMERAS: En la historia está probado y comprobado que cada jefe político de una nación suele tener, tiene, montón de intelectuales, anexos y conexos, a sus órdenes… Y hasta privilegiados con becas sustanciales y jugosas para dedicarse, por ejemplo, a escribir libros sin urgencias económicas… En el viaje sexenal, publicar artículos laudatorios al presidente en turno… En muchos casos, con el simple hecho de que todos ellos callen, guarden silencio, y nunca, jamás, los cuestionen, es ganancia… En todo caso, una chambita burocrática por ahí para la familia, desde los hijos hasta los hermanos… Así fue antes en el país… Así es hoy en “la república amorosa y humanística”…