Rebelión guinda y marrón
**Presionará Cisneros a Nahle
**Cisneristas intimidados
UNO. Morenistas insumisos
El politólogo del barrio siente, olfatea, huele, respira, la posibilidad que si Rocío Norma Nahle García sale nominada candidata de Morena a gobernadora de Veracruz, entonces, bien podría darse y concitarse una Rebelión de Negros.
Luis Velázquez
Los afrodescendientes de Veracruz, como su antecesor Yanga y hasta el Cristo Negro de Otatitlán, lanzándose al coraje social y la indignación electoral.
Incluso, el también sociólogo ha sido informado de que hacia el interior de la tribu guinda y marrón de Éric Patrocinio Cisneros Burgos, ex secretario General de Gobierno, alientan la insumisión.
DOS. Cisneristas intimidados
Más cuando Éric Cisneros jura y perjura que tiene de su lado, mínimo, a noventa presidentes municipales de MORENA.
Y aun cuando en el trascendido se afirma que una parte fue desistida por los enviados del góber obradorista y/o los operadores políticos de la misma Nahle, de cualquier forma le alcanzan para una rebelión.
Es más, la protesta partidista sería más dura y ruda que una proveniente de las huestes de Manuel Huerta Ladrón de Guevara, ex delegado federal del Bienestar Social, y a cuyos viejitos, seniles, ancianos beneficiados con la bequita bimensual de cinco mil pesos tiene de su lado.
TRES. Que Cisneros presionará a Nahle
Peor tantito: La conjura, la hipótesis digamos, implica que si Éric Cisneros fuera derrotado en la dichosa encuesta para coordinar la 4T en Veracruz y camino a la candidatura a gobernador, entonces, exigiría a Rocío Nahle la mitad del gabinete estatal legal y ampliado en el sexenio 2024/2030.
Igual, igualito, se afirma, como en su momento, en el año 2018, se lo reclamara a Cuitláhuac García Jiménez, y quien, como se sabe, cedió.
Y cedió más, porque entonces, Cisneros estaba apoyado en todo y con todo por Nahle.
Luego, Nahle lo confesaría al periódico Notiver: “Cisneros era mi amigo”.
CUATRO. Cortocircuito con Mario Delgado
En los ajustes y reajustas en el palenque guinda y marrón también sueltan que Éric Cisneros ni tampoco Nahle tienen buena química con Mario Delgado, el líder nacional de MORENA y asesor de la favorita presidencial, Claudia Sheinbaum Pardo.
Claro, el trascendido de que Nahle tiene buena relación con Sheinbaum.
Tanto que la jefa de prensa de Nahle terminó en la capilla de Sheinbaum y opera como su jefaza de giras.
CINCO. Que Nahle salió perdedora...
Los malquerientes y los especuladores (en un Veracruz campeón nacional en la especulación política y social) corren la versión de que MORENA aplicó nueve encuestas en Veracruz y en ninguna Nahle sale ganadora.
Claro, bien pudiera tratarse de “borregos”. Más, cuando los vientos oficiales han soplado a favor de la ex diputada federal, ex senadora de la república y ex secretaria de Energía.
Y cuando, incluso, ella misma aseguró al periodista Joaquín López Dóriga que será la primera gobernadora del Estado jarocho luego de setenta y nueve hombres en la silla embrujada del palacio.
La pelea por la candidatura ha sido tan larga como extenuante y desgastante.
Más porque se ha atravesado, digamos, el arte de la especulación.
“Sean serios” pidió Nahle en momento estelar.