Y con un amigo actor… Y la segunda (Rosamund Pike) lo deja porque nunca le perdona una infidelidad en las horas difíciles de soledad…

ROMPEOLAS: Y el hombre queda solo en su mansión… Y dos hijos lo condenan y durante un tiempo prologando lo relegan y sacan de sus vidas y hasta lo desdeñan… Y de pronto, ¡zas!, los primeros avisos del Alzheimer… 1) Empieza por olvidar el teléfono de su expareja… 2) Olvida dónde dejó estacionado su coche… 3) Olvida dónde están las llaves de casa… 4) Olvida el nombre de la familia y los amigos… 5) Olvida el nombre de su primera mujer… 6) Olvida cómo, dónde, se conoció con la segunda esposa… 7) Olvida la ubicación de su casa…

ARRECIFES: Entonces, va con el médico familiar y el doctor le dice que le hará unas preguntas y únicamente conteste… 1) ¿Cómo se llama tu esposa?... 2) ¿Cómo se llaman tus hijos?... 3) ¿Qué automóvil usas?... 4) ¿Cuáles son las placas de tu coche?... Entonces, el personaje cinematográfico (Paul Glamatti, quizá, en su mejor papel) estalla en contra de un amigo, el médico… Y le dice que no le haga preguntas tontas… El doctor se mantiene en su decisión y le dice que son preguntas tontas pero indicativas para detectar si tiene Alzheimer…

ESCOLLERAS: Y a partir del momento, los peores días y noches de su vida… Más porque el Alzheimer ha llegado con violencia… Y se vuelve un hombre violento… Por ejemplo, en una crisis de memoria y olvido destruye los muebles cercanos cuando intenta hablar por teléfono a su exmujer y olvida el número… Para su fortuna, los hijos lo rescatan y se turnan para estar a su lado en su casa… Pero la ex esposa nunca regresa a casa… Más, porque para entonces, ya vive con otro hombre…
PLAZOLETA: El personaje Paul Glamatti se vuelve un hombre solitario… En la melancolía y la frustración… Incluso, renuncia al lenguaje hablado y únicamente mira y mira y mira a los demás… Sin pronunciar una sola palabra… Y por lo regular, sentado en una banca en el jardín de su casa de cara a un río, un mar, una laguna… Y más que nunca, con la barba crecida y descuidada… Sin ningún brillo ni resplandor ni un signo de vida en la mirada… Casi casi, muerto en vida…

PALMERAS: La primera parte del filme está lleno de química, buen fario, mejor karma, la alegría de vivir… Pero la otra parte, la tristeza punteando de principio a fin… Más, cuando el hombre pierde a su padre (Dustin Hoffman) en un ataque cardiaco sufrido en una casa de citas haciendo el sexo con una joven trabajadora sexual… Es una película desgarradora sobre el Alzheimer… Igual de intensa,
digamos, que “El padre” con Anthony Hopkins, quien también sufre la misma enfermedad… Y en donde, caray, la única hija lo encierra en un asilo y se larga a París para vivir un nuevo matrimonio…