estrategia de lucha quedaría reducido a unos cuantos gigantes y muchos enanos. De por sí, el gigante mira lejos. Pero los enanos trepados en los hombros de los gigantes, más lejos mirarían el horizonte.
Por ejemplo:

DOS. Los enanos del palacio

Dado el cargo público desempleado, el góber salsero, huapanguero y danzonero, es, sería, un gigante.
Y sobre sus hombres se treparían, entre otros, los gnomos Éric Cisneros Burgos, Zenyazen Escobar, Juan Javier Gómez Cazarín y hasta la Fiscal General.
Tal cual, bien quedaría una súper escalera humana.
Sobre los hombros de Cuitláhuac, el enano Cisneros. Y sobre los hombros de Cisneros, la enana Fiscal General. Y sobre los hombros de la Fiscal, el enano Zenzayen. Y sobre los hombros de Zenyazen, el enano Gómez Cazarín.
Todos, mirando hacia el futuro, tan cerca como está el año 2024, cuando sean elegidos en las urnas el presidente de la república, el gobernador, los diputados locales y federales y Senadores de la República.
Zepeta, el líder de MORENA, lo dijo de la siguiente manera: “Hay más de dos mil cargos públicos para repartir. Y que nadie pelee”.

TRES. La giganta…

En el otro lado del palenque partidista, una gigante sería, digamos, la zacatecana Rocío Norma Nahle García, la secretaría de Energía con la Ley Nahle en la bolsa de la mano, creada y recreada únicamente para ungirla candidata de MORENA a gobernadora, toda vez que antes, la Constitución Política local exigía ser originaria de Veracruz.
Y sobre los hombros de la gigante Nahle, digamos, el enano delegado federal, Manuel Huerta Ladrón de Guevara.

CUATRO. Tropa animosa

Los enanos, trepados en los hombros, alcanzan una altura gigantesca.
Y, claro, integran una tropa de enanos. “Tropa animosa” le denomina Regis Debray.
Todos, a la conquista del porvenir… para evitar, entre otras cositas, el fracaso político de MORENA en Veracruz.
Más todavía si recuerda que en su momento, Cuitláhuac García Jiménez también fue un enano.
Primero, se trepó a los hombros de la giganta Gloria Sánchez, y quien de acuerdo con las versiones lo recomendó con Andrés Manuel López Obrador para la candidatura a diputado federal luego de que el entonces rector de la Universidad Veracruzana, Raúl Arias Lovillo, declinara la oferta pues encima de todo estaba su lealtad y conciencia académica con la máxima casa de estudios.

CINCO. De gigante en gigante

Luego de que Cuitláhuac trepó a los hombros de Gloria Sánchez brincó a los hombros de AMLO y se mantuvo.
Y miró más, mucho más lejos, el horizonte.
Incluso, hasta rozó el cielo con la yema de los dedos cuando en dos ocasiones lo encumbró como su candidato a gobernador.
Por eso, ahora, Cuitláhuac, como revolucionario de la izquierda, ha de permitir que parte de su equipo gubernamental trepe en sus hombros.
Adolfo Ruiz Cortines lo expresaba de la siguiente manera:
“Yo siembro para México”.

SEIS. Resucitar a la vida pública

Los gigantes cometen errores en la vida. Sansón, por ejemplo, el ultra contra súper gigante, enamoró hasta la locura de Dalila. Y cuando Dalila descubrió que su fuerza física estaba en la cabellera, una noche, luego de hacer el amor y el sexo, le cortó el pelo al ras, lo dejó calvo, y Sansón se volvió frágil.
Pero entró a la historia.
Y si Cuitláhuac y Nahle han cometido errores en su estrategia política, entonces, su ejército de enanos está para rescatar el brillo perdido y resucitar a la nueva vida pública que comenzará hacia finales del año 2024.
Claro, nunca ha de olvidarse que José López Portillo habló de “los enanos del tapanco” y Javier Duarte calificó de enanos a par de priistas (Marlon Ramírez y Daniel Galindo) por causar la derrota de Anilú Ingram en las urnas.
Solo así, y con la parábola de los gigantes y los enanos, y en la misma dirección, el fuego político (y social) suele propagarse…