Y a Luis Echeverría con José López Portillo, quien encerrara a nueve políticos de su gabinete, entre ellos, a par de secretarios de Estado originarios de Veracruz, como fueron Félix Barra, de Poza Rica, y Eugenio Méndez Docurro, del puerto jarocho.

PASAMANOS: Y le pasa lo mismo que a López Portillo con Miguel de la Madrid, quien encarcelara a su amigo entrañable, Jorge Díaz Serrano, senador de la república y director de PEMEX.
Casi casi se trata de una maldición bíblica repetida con frecuencia.
Por eso, y como afirma el politólogo Carlos Ernesto Ronzón Verónica, el presidente de la república amorosa, AMLO, con todo y su Edén vive la encrucijada de la decisión y tiene, mínimo, a un trío (Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López) jugando en el palenque.
Y al mismo tiempo, cavilando posibilidades sobre cuál de los tres le cuidará sus espaldas y las espaldas de su familia (esposa e hijos mayores) para vivir el resto de sus vidas sin sobresaltos ni sorpresas mayúsculas y minúsculas.

CORREDORES: La encuesta en MORENA para elegir al candidato presidencial es un formulismo demagógico.
El elector es y será AMLO.
Claro, auscultando a las tribus políticas y militares y quizá empresariales.
Pero al mismo tiempo, la decisión inapelable será tomada por Andrés Manuel López Obrador.
Y entre otras razones, apostando “hacha, calabaza y miel” a que sea leal, cien por ciento leal, lealtad ciega, probada y comprobada y hasta donde es posible en la naturaleza humana y las circunstancias del día con día y año con año.

BALCONES: Faltan diecisiete meses para el destape formal. Suficientes para seguir cavilando.
Incluso, conscientes todos de que hasta la muerte se puede atravesar. Y en un descuido, hasta como cuando el presidente del CEN del PRI, Carlos Alberto Madrazo, perdiera la vida, con su esposa, en el presunto accidente de un avión, sexenio de Gustavo Díaz Ordaz, aquel de la matanza de la Plaza de Tlatelolco y del penal de Lecumberri para los disidentes y de la Guerra Sucia.

PASILLOS: Y como la sucesión fue anticipado por AMLO cuando destapara a los posibles…
Y como en el palenque público han creado la percepción de que su favorita es la jefa de Gobierno en la Ciudad de México…
Entonces, la interrogante es que de cumplirse la profecía, la cardiaca espera por la reacción del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon, y del senador Ricardo Monreal Ávila.

VENTANAS: Una, si Ebrard y Monreal quedaran fuera, la duda de si se disciplinarán, igual, igualito, como sucedía en el tiempo priista.
Dos, si con sus huestes se pondrán al servicio de Sheinbaum por aquello de la unidad partidista.
Tres, si buscarán la candidatura de otros partidos políticos.
Cuatro, si Ebrard y Monreal integrarán un frente común.
Cinco, si los dos se internarían en un monasterio para encontrar la paz perdida.
Y sexto, la incógnita de si elegidos y triunfando en las urnas serían más fieles y leales que Sheinbaum.
¡Vaya a ser que a AMLO sucediera lo mismo que a Díaz Ordaz con Luis Echeverría Álvarez y de quien se arrepintiera de la candidatura y hasta quiso relevarlo.