En el palenque público nacional, la imagen de la 4T jarocha como campeón en el subejercicio cuya esencia hacendaria consiste en devolver el dinero federal al gobierno central porque aquí fueron incapaces de un proyecto de obra pública para aterrizarse en tiempo y forma.
Es para las campañas electorales dice el politólogo Carlos Ernesto Ronzón Verónica.

LUNES
Fracaso de la política económica

El jab más canijo ha sido del Seguro Social. A cada rato, exhibe a la 4T en Veracruz como una de las entidades federativas incapaz de recuperar los treinta mil empleos perdidos en el tiempo del covid.
En el tiempo de la recesión (la inversión pública y privada contraída y paralizada).
Y en el tiempo de la inflación (el terrible y espantoso aumento en los precios de todos los productos, pero sobre todo de la despensa) y que tanto pega en la economía familiar.
Además, claro, la imagen de un gobierno ineficiente e ineficaz en materia económica cargando en la espalda camino al Gólgota político y social el desempleo antes del covid.
De postre, el dato de la Asociación de Migrantes en Carolina del Norte, integrada con puros paisanos mexicanos, entre ellos de Veracruz, de que la migración de Veracruz a Estados Unidos ha repuntado de manera insólita.
Más todavía, porque las remesas han sustituido y dejado atrás y con mucho a los tres cultivos básicos sustento de la economía estatal como son la caña de azúcar, el café y los cítricos.
El rotundo fracaso de la 4T en Veracruz calibrándose en el bolsillo de la población. Seis de los ocho millones de habitantes en la miseria y la pobreza.

MARTES
Ninguna obra pública

La 4T y los Siervos de la Nación dirán misa. Pero la imagen es la siguiente:
Casi cuatro años después, ninguna obra pública estatal, regional y/o local en el Estado de Veracruz.
Y si por aquí cortaron el listón, de una aula, un jardín de niños, un parquecito, el tramito de una calle pavimentada, un camino, quizá una introducción de agua potable, una clínica de Salud rehabilitada, en la mayor parte de los casos ha sido, primero, obra municipal.
Y segundo, así fuera obra estatal, equivale, digamos, a dar una retocadita a la casa porque el salitre está fregando.
La gran obra pública de don Rafael Hernández Ochoa, los caminos.
La obra pública de Agustín Silvestre Acosta Lagunes, los puentes.
La obra pública de Fernando Gutiérrez Barrios, pacificar Veracruz en 40 días luego de “La Sonora Matancera”.
La obra pública de Dante Alfonso Delgado Rannauro, la transformación urbanística de la mayor parte de las cabeceras municipales con los servicios básicos, tiempo de la Solidaridad salinista.
Ahora, con la 4T, nada de nada.

MIÉRCOLES
Veracruz ensangrentado

Sangró Veracruz con los trescientos obreros textiles asesinados en Río Blanco a partir de una huelga obrera.
Sangró Veracruz con los cuarenta mil ejidatarios ejecutados en el tiempo de la enconada lucha agraria, hacia 1930.
Sangró Veracruz con tantos asesinatos de “La Sonora Matancera” en el sexenio de Acosta Lagunes.
Sangró Veracruz en el casi sexenio de Javier Duarte y en donde se alcanzó el ranking mundial con las fosas clandestinas.
Sangra Veracruz hoy con el tiradero de cadáveres y el primer lugar nacional en feminicidios.
El martes veinte de septiembre, en la ciudad jarocha, en el Frac. Nuevo Veracruz, feudo del magnate Carlos Slim Helú, el cadáver de un chico de 26 años, Emanuel Torres Estrada, desaparecido el 14 de septiembre, apareció colgado de un árbol.
La maestra asesinada en Xalapa y el nieto herido. La niña asesinada en Hidalgotitlán.
Caray, colgado de un árbol como hacían los Realistas en la guerra de Independencia colgando cadáveres de campesinos para intimidar a la población y evitar se unieran a Miguel Hidalgo.

JUEVES
La Dama de Compañía

El legado histórico de la 4T en materia de procuración de justicia se encierra en dos frases citables y memorables.
La primera, “Aquí mando yo”, expresada por la Fiscal General al tomar posesión.
Y la segunda, “No puede tenerse contentos a todos” revirando a los Colectivos, integrados con hijos y parientes desaparecidos y buscándolos en fosas clandestinas.
Y como la Fiscal General anda de dama de compañía del góber y el secretario General de Gobierno cortando listones de “la flor más bella del ejido”, entonces, el señor Cuitláhuac G. J. le puso un diez de promedio a su eficacia justiciera.
Así, tal cual, se ejerce el poder en el Veracruz de los desaparecidos, feminicidios y fosas clandestinas, ¡vaya trilogía apocalíptica!

VIERNES
¡Ay, tanto deseamos un milagro!

Con la mejor fe y karma del mundo, el ciudadano de a pie desearía encontrar, descubrir, contabilizar hechos y resultados concretos y positivos de la 4T en Veracruz.
Se dirá, por ejemplo, que Veracruz ocupa el primer lugar nacional en jodidos beneficiados con las becas bimensuales de AMLO.
Y de ser así, caray, se trata de un programa federal latiendo de norte a sur y de este a oeste del país.
Se dirá que la Guardia Nacional y los soldados y marinos y anexos y conexos están, ajá, pacificando el Estado jarocho, pero, bueno, otra es la percepción ciudadana.
Y en todo caso, igual, igualito las fuerzas armadas nacionales operan en el resto de la república amorosa.
Se dirá que Veracruz es la entidad federal más visitada por AMLO. Pero, bueno, en muchos casos es y ha sido para conmemorar hechos históricos. Y en el resto, para echar loas a Cuitláhuac mientras el territorio jarocho sangra y desangra.
Se dirá que en los próximos dos años planean la gran obra pública sexenal.
Ok.
Pero además de tratarse de una venta burda, ramplona y demagógica de esperanzas, en otras latitudes (el Tren Maya, la Refinería de Dos Bocas y el aeropuerto Felipe Angeles) ya fueron anunciadas hasta terminadas…, aun cuando la Refinería no refine y cada gobernador morenista ha de poner su cuota en vuelos comerciales.
La 4T en Veracruz es un fraude. Un desencanto. La utopía sexenal peor vendida.
Por fortuna, Cuitláhuac, se afirma, cerca de AMLO. Pero el par, lejos de Veracruz.