Los jodidos les dice el viejito del barrio.

PASAMANOS: Jóvenes que nacieron y siguen naciendo en medio de una violencia sin precedente. Los carteles y cartelitos, anexos y conexos, dueños del día y de la noche y del destino humano y social.
Un país migrante como única posibilidad para tener un trabajo seguro, estable y pagado con justicia y dignidad laboral.
Uno de cada tres padres y jefes de familia llevando el itacate y la torta a casa con el ingreso obtenido en el changarro en la vía pública vendiendo fritangas.
De ñapa, el COVID, la epidemia que en los últimos cien años apenas, apenitas vino a pegar y duro y rudo al país.
Además de sus agregados apocalípticos como la recesión y la inflación.

CORREDORES: Cada vez, las universidades públicas rechazando a mayor número de aspirantes y suspirantes.
Casi 180 (ciento ochenta) mil la UNAM, por ejemplo. 23 (veintitrés) mil la Universidad Veracruzana.
Y ni modo, estudiar una carrera universitaria en colegios de educación superior evidenciados. Y lo peor, ofreciendo con la bendición de la autoridad carreras saturadas en el mercado local, regional, estatal y nacional.
Más grave cuando los chicos egresan con el título en las manos para encontrar, si bien les va, trabajos con suelditos de 5 a 6, 7 mil pesos, en el mejor de los casos, y mensuales.
Veinte años cargando la mochila al hombro para enfrentar tremenda realidad adversa.

BALCONES: Los expertos dicen que en unos cuantos años, la república será habitada por ancianos, jóvenes y niños.
Y si ya desde ahora la vida es difícil, ruin y miserable (6 millones de los ocho millones de habitantes de Veracruz en la miseria y la pobreza en datos del INEGI), entonces, ¡vaya futuro que viene!
En otros tiempos, hacia mediados del siglo pasado, el control demográfico, por ejemplo, que porque ya éramos muchos, demasiados, excesivos.
Ahora, bastaría referir que miles y miles de niños, adolescentes y jóvenes únicamente han visto en sus vidas, desde de que hacia los 7 años tomaron noción del mundo, un tsunami de violencia, tiradero de cadáveres por todos lados.
Y como en el caso de Veracruz, campeón nacional en Feminicidios.
De hecho y derecho, un Estado Feminicidio, mientras, y por ejemplo, ¡muchas felicidades!, el secretario General de Gobierno, tan chistosito, llega a un pueblito de la Cuenca del Papaloapan trepado en una moto de lujo, BMV, luego de su carita sonriente en un mural en Misantla.

PASILLOS: Los jóvenes llegaron a la vida en medio de una terrible y espantosa desigualdad económica, social, educativa, de salud, de seguridad y procuración de justicia y desarrollo humano.
Igual como los niños y adolescentes que ahora son.
Brechas de desigualdad económica que nunca han sido superadas en la historia. Casi casi la profecía bíblica. Pobre naciste. Pobres viviste. Pobre morirás.
Más cuando las empresas siguen despidiendo trabajadores, en tanto las puertas están cerradas para nuevas contrataciones.
La Ciudad de México, en el primer lugar de tantas limitaciones económicas.