Así, de hecho y derecho, y considerando que se trata de una victoria anunciada, una zacatecana será la primera jefa del Poder Ejecutivo Estatal. Casi casi, como decía Octavio Paz, “por vez primero los mexicanos somos contemporáneos” de todos las mujeres y hombres del mundo.

2) Desde luego, el plagio al presidente Luis Echeverría Álvarez, quien modificara la Constitución de Sonora para ungir gobernador a su chico favorito, Carlos Armando Biebrich.

3) La cooptación a trío de diputados panistas de la LXVI Legislatura para votar a favor de la Ley Nahle y quienes serán expulsados del PAN por traidores.

4) El nepotismo, tráfico de influencias y conflicto de intereses, pues montón de funcionarios públicos tienen a la familia, parientes, amigos y compadres en la nómina.

5) La asignación de obra pública a los contratistas amigos, socios y cómplices. El famoso Dedazo, en nombre de la implacable filosofía política de “Aquí mando yo”. Casi casi como cuando Javier Duarte exclamaba “Aquí no pasa nada”.

6) El ejercicio a plenitud de la mejor cultura priista como son “el acarreo”, el robo de urnas y la compra de votos en cada proceso electoral, demostrado y exhibido en la reciente elección de los consejeros de MORENA. Incluso, y como siempre en el tiempo priista, el jefe de jefes “curándose en salud” brindando por la democracia, ajá.

7) El control monopólico del poder. El jefe máximo es el gobernador. Y contra su palabra, nadie ni nada. Incluso, y como acaba de exhibirse, la orden cumplida en la LXVI Legislatura para cambiar la Constitución a modo. Orden de AMLO, el presidente, orden de Cuitláhuac, su Oficial Mayor. De hecho y derecho, y como decían y practicaban en el tiempo priista y panista, “contigo… hasta la ignominia”. Y “si me dices sapo… brinco”.

8) El subejercicio como parte de la estrategia económica y política para devolver recursos frescos a la Federación.

9) Endrogar y seguir endrogando a la secretaría de Finanzas y Planeación con más y más préstamos bancarios bajo la regla universal de que el próximo gobernador pagará. Y allá que le vaya bien.

10) En el mes de diciembre del año anterior, doscientos doce presidentes municipales terminaran periodo constitucional. Ocho meses después, todos, “ángeles de la pureza”. Ninguno en el palenque público exhibido ni menos indiciado ni sujeto a proceso penal por ladrón y pillo. Entre las tribus políticas representadas en la Comisión de Vigilancia de la LXVI Legislatura se encubren.

LOS SIERVOS DE LA NACIÓN

11) La opacidad. Varios funcionarios del gobierno de Veracruz han sido despedidos. Y ninguno denunciado ni procesado ni sujeto a un juicio penal por trastupijes. Incluso, en unos casos, con manifiestos casos de nepotismo, tráfico de influencias, conflicto de intereses, obra pública concesionada por Dedazo y empresas fantasmas.

12) El fallido intento de la Ley Bozal en el Congreso local para prohibir a los diputados desde hablar mal de los otros como revelar secretos y acuerdos y pactos y arreglitos en lo oscurito entre legisladores.

13) La ley a los medios exigiendo montón de requisitos para suscribir convenios con el gobierno de Veracruz y con presidentes municipales de MORENA como una forma de limitar el servicio informativo.

14) La ley a los medios que deseen suscribir convenios con el Estado y los alcaldes de MORENA de pagar una fianza, a tono, digamos, con las obligaciones de los contratistas en general. Y que, bueno, cierto, expresa “la honestidad valiente” en su más alto decibel para transparentar la vida pública y bendito el Ser Superior. Los Morenos son cien por ciento honestos, íntegros, honrados, incapaces de “meter la mano al cajón” y de “ordeñar la vaca”. He ahí, digamos, la Cuarta Transformación del país luego de la guerra de Independencia (300 mil muertos) y la Revolución (un millón de muertos) y la Reforma.

LA PEOR TARA HEREDADA

15) De la herencia política de los emisarios del pasado al gobierno de la 4T en Veracruz, palabras mayores el cambio a la Constitución Política con el único, el único, el único objetivo de beneficiar a una mujer, Rocío Nahle, y ungirla candidata a gobernadora y luego luego gobernadora.

Se trata del peor pisoteo de la Constitución. El peor atropello.
De hecho y derecho, la filosofía política de “Aquí mando yo”.
Yo, el jefe máximo “en el país de un solo hombre”.
Yo, el dueño de la hacienda porfirista, el dueño del pueblo, el dueño de la ley.
Aquí, “donde solo mis chicharrones suenan y resuenan”.
En todo caso, por esa misma razón treinta millones de mexicanos votaron en las urnas hacia mediados del año 2018 para ungirme rey.
Casi casi, la profecía de Damián Alcázar como presidente municipal en aquel pueblo de “La ley Herodes” donde modifica la Constitución a su antojo.
En el siglo XXI, la legitimidad total y absoluta.
Luis Echeverría Álvarez y su herencia histórica.
A partir de ahora, en el palenque guinda y marrón se recibirán adulaciones pero a nombre de “La Marcha de Zacatecas”.
La madrina Nahle llegando a las playas de Chalchihuecan por el Golfo de México como “La Malinche” del siglo XXI y quien en el año 1545 fuera trepada al barco de Hernán Cortés entregada por el cacique de Tabasco cargando su metate de piedra para echar tortillas al conquistador, y que por cierto venía enfermo de sífilis.