Era, entonces (como todavía hoy y por desgracia) la gran epopeya educativa del momento… El mejor alumno, el alumno de diez, tenía memoria prodigiosa…

ROMPEOLAS: Incluso, en algunas escuelas la dirección publicaba el cuadro de honor (también en las facultades de la Universidad Veracruzana) con los alumnos con una memoria prodigiosa… Casi casi, la memoria del presidente Álvaro Obregón, quien solía aprenderse poemas de ocho, nueve, diez páginas, y únicamente con escucharlos retenía cada estrofa… Y como de hecho y derecho sucedió cuando el Ministro de Educación, José Vasconcelos Calderón, le leyó en voz alta “La Suave Patria” de Ramón López Velarde y luego se la recitó de principio a fin sin cambiar una sola coma…

ARRECIFES: Hace setenta años (todavía hoy, qué caray) el mejor estudiante es el gran memorista… Pero en el otro lado del mundo, Europa, por ejemplo, quizá también en Estados Unidos, aquel modelito memorista fue jubilado y sepultado en “el baúl de la historia” desde hace muchos años… Incluso, desde entonces, la apuesta pedagógica era por la reflexión, el análisis, el discurrir, para que el educando aprendiera a pensar y cavilar, antes, mucho antes, que memorizar…

ESCOLLERAS: Tres años y medio van del obradorismo… La profe de todos los tiempos, Delfina Gómez, la profe del salón de clases alardea AMLO, el presidente, la profe con años y años de servicio magisterial, secretaria de Educación Pública… En tanto, su homólogo, el maestro Zen, el maestro del streap-tease de la región de Córdoba y Orizaba, un mérito que nunca nadie le quitará, es el secretario de Educación… Y ni la primera ni el segundo han servido con lealtad ciega y eficacia y eficiencia a las nuevas generaciones estudiantiles, desde la primaria, incluso, desde el kínder, para que los alumnos sean enseñados a reflexionar, a cavilar, a gastar y desgatar sus neuronas analizando los hechos de la historia…

PLAZOLETA: En contraparte, los profes continúan enseñando igual, igualito, que en la primera mitad del siglo XX… Por ejemplo, en la clase de Historia nada mejor que aprender de memoria las fechas, nombres de generales, lugares, estadísticas de muertos, de las guerras… Es más, hasta centrar al estudiante en tales episodios en vez, digamos, de contar historias de aquellos sucesos cívicos, legendarios y bíblicos… Por eso, quizá, muchos chicos aseguran que ellos aprendieron a odiar la Historia (igual que otras materias) gracias a sus maestros…

PALMERAS: Nunca al profe Zen ha ocupado ni preocupado la calidad educativa de Veracruz… Tampoco los 580 mil analfabetos, personas de 14 años en adelante que no saben leer ni escribir… El millón de paisanos con la escuela primaria inconclusa… El millón de paisanos con la escuela secundaria incompleta… Los 600 mil habitantes de Veracruz con el bachillerato a medias… Al profe Zen únicamente importa congraciarse con el góber para ver si lo ayuda a ser palomeado como candidato de MORENA a senador y/o diputado federal y de paso, convertirse en el coordinador de la bancada de MORENA… ¡Vaya desencanto y decepción social por más cortesanos de la palabra a su servicio!...