ROMPEOLAS: De acuerdo con la ley suelen durar un sexenio en el poder… Quizá dos, máximo… Luego, así como de pronto llegaron a la cumbre, también se van… O mejor dicho, son lanzados del palacio por otra élite política… Y es cuando quedan sin poder y sin presupuesto y sin vasallos y cuando, según la profecía bíblica, son gallos desplumados porque las plumas ya se les cayeron… Y de ahí a que resuciten y vuelvan al poder está, digamos, “en chino”, pues llega a costar “veinte y las malas”…

ARRECIFES: Hay casos excepcionales, incluso, fuera de serie… Por ejemplo, y para referirse a las dinastías políticas locales, Fidel Herrera Beltrán duró, mínimo, en el poder político unos cuarenta y dos años, desde su inicio con el gobernador Rafael Murillo Vidal hasta su sexenio como gobernador… Miguel Ángel Yunes Linares también permaneció en el poder durante unos 38 (treinta y ocho) años… Una parte, en el gobierno federal al lado de par de presidentes de la república como fueron Vicente Fox y Felipe Calderón…

ESCOLLERAS: Javier Duarte duró en el poder unos doce años, los seis de Fidel y los 5 años y diez meses y veinte días en su sexenio, pues le faltaron cuarenta días para terminar el periodo constitucional… Claro, Miguel Alemán Valdés duró en el poder político desde como general del Ejército peleando en el campo de batalla hasta gobernador y secretario de Gobernación y presidente de la república y presidente del Consejo Nacional de Turismo… Es decir, unos sesenta años… Pero de ahí pa’lante, son miles y miles de políticos y aprendices de políticos que únicamente permanecen un sexenio, máximo… Incluso, hay quienes apenas, apenitas, los cuatro años de un periodo municipal… Son los gallos que pronto, “antes de que el gallito cante tres veces” quedan desplumados… Y como en el palenque, sin ninguna pluma…

PLAZOLETA: En las cosas de la sobrevivencia política hay muchos políticos que como gallitos brincan de un gallinero a otro con tal de seguir vigentes… Así, cambian de partido político con la facilidad del mundo… Entre otros, son los llamados Políticos Automáticos que apenas toman posesión de un cargo están pensando en el siguiente… Pero también son aquellos que antes del hundimiento del barco partidista se tiran como las ratas al agua para flotar e incorporarse a otro gallinero… Y si son del centro y/o de la derecha y pasan a la izquierda son tan cínicos que con ellos se cumple la profecía de José López Portillo… Con tal, claro, de conservar sus alas antes del desplume total…

PALMERAS: Por lo general, la mayoría de políticos son sexenales y/o cuatrienales… Seis o cuatro años después forman parte de la historia que ya se fue y nunca volverá… Son debut y despedida… Y ni modo, han de comenzar de nuevo… O de plano, retirarse de la vida pública y buscar otros caminos dignos y seguros… Incluidas las Barbies que suelen aparecer en cada periodo constitucional y tienen un sexenio, máximo, para estar, ser y trascender…