Tampoco tiene una televisión para escuchar noticieros y/o ver películas… Tampoco lee libros… Ni siquiera, vaya, de autoayuda…

ROMPEOLAS: Está divorciado… Y nunca su exesposa lo visita como tampoco él la visita a ella… Tiene tres hijos y ninguno le habla… Incluso, tiene cuatro nietos y los hijos nunca le permiten estar con ellos… Más, considerando la ley de la vida de que se quiere más a los nietos que a los hijos… El mismo se hace de desayunar y cenar… Y compra la comida del mediodía en una fonda y que le llevan a domicilio… Tiene una lavadora para lavar su ropa… Y él mismo se la plancha…

ARRECIFES: A veces, suele desayunar con amigos de la misma edad… Todos, de unos setenta años de edad… También jubilados, aun cuando unos viven con la familia, rodeados de amor y cariño… Pero este hombre ni siquiera tiene un perrito o un gatito como mascota porque en el caso de los gatitos le hacen daño por el asma padecida, y de los perritos, mantiene una distancia años luz… Y es que cuando era adolescente tenía un perrito y un día escapó de la casa y nunca lo recuperaron… Y fue, ha sido, es, el dolor y el sufrimiento más canijo de su vida…

ESCOLLERAS: Por lo regular, vive encerrado… Y el mayor número de horas del día duerme… Y duerme en la noche… Y siempre tiene sueño… El sicólogo dice que cuando una persona sufre y padece depresión tiende a dormir mucho porque significa una forma de evadir la realidad… Los pocos, escasos, limitados amigos que tiene este hombre le llaman “El dormilón”… Y entre todos se ríen… Sabe que se lo dicen con cariño, afecto y respeto…

PLAZOLETA: Jubilado, durante veinte de los treinta años de trabajo los pasó fuera de la ciudad… Entonces, él mismo aprendió a vivir solo y la familia sin su presencia… De vez en vez, venía a la ciudad para estar con ellos… Llegaba el viernes en la noche y el domingo en la tarde agarraba el autobús para llegar en la noche a la ciudad donde laboraba y estar listo temprano para la faena… Entonces, las dos partes, él y la familia, se fueron acostumbrando a una vida así… Y ahora, cuando se pensionara, las partes se sintieron extrañas… Y nada mejor, y en nombre de la paz universal, separarse…

PALMERAS: Hay la soledad de adentro y de afuera… La soledad de adentro es la peor… Consiste en que puedes rodeado de la familia, y al mismo tiempo, te sientes solo… Y la de afuera es cuando caminas en la vida sin amigos, compañeros, conocidos y vecinos… Y este hombre tiene encima los dos tipos de soledad… Y, sin embargo, y en rara y extraña circunstancia, está contento porque se tiene a sí mismo… Casi casi, como un fraile franciscano, internado en un monasterio, donde solo se vive para los adentros… En todo caso es un fraile laico porque, además, caray, tampoco cree en Dios y el cielo y Luzbel y el infierno…