en cada gira, ahora, en la última, nada de nada.
Nueve. A dos años y medio de la sucesión, la gallera está alborotada, y el frágil poder político que tiene está acotado.
Diez. Tan disminuido está que ni siquiera tiene presencia nacional.
Once. Al paso que va, si la gubernatura 2024 la ganara un partido de oposición y MORENA perdiera, incluso, si llegara de gobernador un militante de MORENA pero enemigo o adversario, entonces, el mundo le quedaría chiquito para andar de prófugo de la justicia. Además, mucho se duda que alguno de los suyos lo defienda.

LUNES
Dolor de cabeza de AMLO

El politólogo se detiene en el siguiente palenque:
Al momento se ha enfrentado a los senadores Dante Alfonso Delgado Rannauro y Ricardo Monreal Ávila, además de a otros diez legisladores de la Cámara Alta
También a la Comisión Nacional de Derechos Humanos y a la Suprema Corte de Justicia de la nación.
De igual manera, a los jueces ocupados del caso de José Manuel del Río Virgen, secretario técnico de la Junta de Coordinación Política del Senado.
Además, y sin ningún sentido social. Únicamente en una pulseada para ver si gana y demostrar presunta fuerza política. Echándose enemigos de manera ruda.
Tanto que, por ejemplo, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, ha intervenido, por órdenes superiores, para aminorar el vendaval.
Así, en vez de significar un factor de concordia y madurez política para AMLO está convertido en todo lo contrario.

MARTES
Subejercicio fiscal

Desde el principio del sexenio, el góber se convirtió en una copia Xerox, y mala copia, de AMLO.
Por aquí el presidente anuncia un proyecto, de inmediato lo cacarea como suyo en Veracruz.
Por aquí, el presidente es cuestionado por los conservadores, fifís y neoliberales, luego luego “tira la espada en prenda”.
¡Ah!, pero la entrega total y absoluta se ha reproducido cada año cuando incide en el subejercicio fiscal y devuelve recursos federales otorgados para obra y servicios públicos.
En el último año, la secretaría de Infraestructura y Obra Pública de Veracruz devolvió dos mil millones de pesos y la secretaría de Salud mil millones…, cuando tantos pendientes sociales existen.
En el tiempo priista y panista, los gobernadores devolviendo recursos a la Federación era raros, extraños y casos aislados.
Ahora, una constante del señor García.
Más, mucho más, cuando está convertido en un gobernador sin una agenda política estatal propia.
Además, cero obra pública local, regional y estatal. Y si existe, una callecita pavimentada, una aulita construida para una escuela, el chapeo de camellones, es obligación básica.
Antes, la entrega de García a Julio Scherer Ibarra, entonces, Consejero Jurídico de la presidencia de la república. Ahora, la sumisión a Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno en la Ciudad de México, y la favorita de AMLO para la sucesión presidencial.

MIÉRCOLES
Góber acotado

Otro indicativo de la sumisión de Cuitláhuac, incluso, la humillación desde el centro, es la siguiente:
Mientras Cuauhtémoc Blanco, el góber de Morelos, rechazó que las tribus de MORENA metieran la mano al gabinete estatal tratando de imponer a los suyos…
Y en tanto Miguel Barbosa, el góber de Puebla, también pintó su raya de las elites federales guinda y marrón para designar a su gabinete con libertad…
Incluso, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, también se puso rejega y con su padre designaron al gabinete…
Aquí, en Veracruz, dice Ronzón, “una mano meció la cuna” para imponer a varios secretarios del gabinete legal.
El último, por ejemplo, fue con el secretario de Desarrollo Económico, recomendado por la entonces secretaria de Gobernación, senadora Olga Sánchez Cordero.
Y el primero fue el secretario General de Gobierno, impuesto por la secretaria de Energía, Rocío Norma Nahle García.
Un góber acotado desde el arranque de los caballos en el carril.

JUEVES
El góber en su laberinto

El reparto de parcelas de poder en Veracruz.
Eric Cisneros, repartiendo cachuchas con su nombre en Pánuco, operando en la Cuenca del Papaloapan.
Zenyazen Escobar, dueño del centro del Estado. Orizaba y Córdoba.
Rocío Nahle, jefaza en el sur.
Atanasio García, el mandamás en Xalapa, la capital, y alternando con el alcalde, Ricardo Ahued Bardahuil, aun cuando Cuitláhuac hizo tener a la capital como centro de poder, pero debió compartir con Ahued. Entonces, el padre, exdiputado local, ex militante del PRD, entró al quite.
Manuel Huerta, en la zona conurbada Veracruz-Boca del río.
Juan Javier Gómez Cazarín, en Los Tuxtlas.
Cada uno con su juego partidista, y de quienes mucho se duda que a la hora crucial “tiren su espada en prenda” por el góber cuando lo necesite, pues ellos querrán seguir creciendo.
El góber, en la peor soledad política de su vida.
Sin un grupo homogéneo con capital político propio, pues los amigos con “lealtad ciega” (Dorheney García Cayetano, Iván Luna, Esteban Ramírez Zepeta, etcétera) son dependientes.
Bastaría referir que Consultores Arias ubicó en la última encuesta nacional a Cuitláhuac García en los cinco peores lugares del descrédito y la desconfianza, partiendo de las siguientes categorías: seguridad, economía, manejo de la pandemia y popularidad.
Los otros en la orilla del precipicio fueron los de Puebla, Morelos y Zacatecas, de MORENA.
El góber mejor evaluado fue Alejandro Murat, de Oaxaca, quien cada vez se vuelve morenista.

VIERNES
Javier Duarte, magnificado

Tan achicado está Cuitláhuac que, dice Ronzón Verónica, la figura de Javier Duarte queda magnificada, con todo y vivir en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México.
Por ejemplo: en aquel sexenio, hizo y deshizo durante más de 5 años a su antojo con su lemita de “Aquí no pasa nada”.
El presidente Enrique Peña Nieto lo puso de ejemplo nacional de la nueva generación política.
Y hasta cambió la Constitución Política pasando de 6 a dos años la gubernatura, un acuerdo logrado en la escalinata del avión presidencial “a vuela de pájaro” con Peña Nieto.
Ejercía el control total. Repartía juego, lana y negocios. Abusó del poder. Encarceló a las reporteras Marichú Bravo y Marijose Gamboa. El mundo político se le cuadraba
Y de pronto, Peña Nieto le retiró el blindaje quedando a la deriva y obligado a renunciar cuando le faltaban cuarenta días para terminar el sexenio y volverse un prófugo de la justicia perseguido por Miguel Ángel Yunes Linares.
Pero durante 5 años y cacho fue intocable y hasta respetado y temido…