Tiempo aquel cuando publicaba en el semanario Por qué?, de Mario Renato Menéndez Rodríguez, y que antecediera al Proceso de don Julio Scherer García y Vicente Leñero.
Desde Xalapa, Báez Jorge cumplía misión periodística. Se recuerdan, entre tantos otros, dos reportajes.
Uno, sobre los famosos cuijes en la zona portuaria de Veracruz. Y otro, sobre el cacicazgo de Fernando López Arias.

DOS. 15 libros publicados

Fue, o es, académico en la Universidad Veracruzana. Investigador de tiempo completo. Incluso, asignado al Sistema Nacional de Investigaciones.
Escritor, con más de quince libros publicados.
Y todavía le dio espacio y tiempo para la función pública. Una, por ejemplo, Regente en la Editora del Gobierno del Estado. Y otra, director del Instituto Veracruzano de Cultura, IVEC.
Además, confabulador y conspirador en las tertulias amicales.
Y reportero. Gran reporterazo.
Apenas, apenitas, estudiaba o había egresado de la facultad de Antropología de la UV y se entregó a su otra vocación, como es el periodismo.

TRES. Los días polvorientos

Fue aquella maravillosa y fascinante aventura reporteril. Terminó y, por desgracia, el presidente de la república enfurecido, irritado, ordenó al capitán Fernando Gutiérrez Barrios aniquilar, desaparecer, exterminar al semanario Por qué?
Entonces, las instalaciones de la revista fueron incendiadas una madrugada. Oficinas y talleres.
Y cuando Mario Renato Menéndez se presentó a sus oficinas fue detenido por el comando policiaco de Gutiérrez Barrios.
Y de inmediato, trasladado al aeropuerto de la Ciudad de México donde un avión lo esperaba con exilio a Cuba.
Mario Renato se exilió en Cuba, ni modo. Y exiliado permaneció nueve años.
Por qué? desapareció en 1974. También Félix Báez dejó el periodismo. No más periodismo de investigación. El mensaje era claro. Más cuando Díaz Ordaz heredó la presidencia de la república a su amigo Luis Echeverría Álvarez, ambos, iguales de represores. La matanza de Tlatelolco. El 10 de junio de 1971. La guerra sucia. Los líderes comunistas, en el penal de Lecumberri.

CUATRO. La pasión de escribir

Dejó Báez Jorge de hacer periodismo, pero continuó escribiendo. La pasión de escribir. Libros y ensayos. Quizá cartitas encendidas de amor pues es muy querendón. Y lo mantiene joven, fresco, fogoso.
Sigue como investigador del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la UV, lejos de la grilla palaciega, la administración pública y el periodismo.
Mario Renato Menéndez Rodríguez dirige ahora el periódico Por esto! en la península y con frecuencia se hablan por teléfono y hasta excursiones por allá de Félix Báez.

CINCO. Cuadrivio de investigadores

Pocos, excepcionales reporteros de Veracruz en las grandes ligas de la investigación periodística.
Caso Félix Báez. Caso Ricardo Ravelo. Caso Regina Martínez. Caso Noé Zavaleta, para hablar de un cuadrivio singular en semanarios que hicieron época como Por qué? y la siguen construyendo en Proceso.

SEIS. Donará sus libros

De los grandes pendientes sociales de Veracruz, el maestro se volvió un experto investigando las culturas indígenas, “la magnitud de lo sagrado en los pueblos mesoamericanos”.
Pero también, un experto sobre la religiosidad de aquellos pueblos y que “capta al hombre en todas sus dimensiones”.
En el discurso de gratitud, Félix Báez anunció a los mil años que ha cumplido que seguirá escribiendo más libros.
Además, dijo como avisito parroquial, que donará mil libros de su biblioteca personal a la Facultad de Antropología, su alma mater.