La mismita mujer que en un evento público apareció vestida con blusa y pantalón ajustado, color negro, que recordaba la imagen legendaria y mítica de Gatúbela y a la que, claro, faltó la máscara.
La mismita mujer que ha aparecido en foto al lado del Fiscal General de la República.
Y a la que, de igual manera, a cada rato "El uno" y "El dos" del palacio glorifican y arrojan incienso.
Más, el góber cuando "tira su espada en prenda" anuncia en cada crimen que ya, ya, ya hay pistas sobre los asesinos físicos e intelectuales.
La misma que va a cine de Xalapa en plaza Las Américas a ver la película "Mujercitas" blindada por los escoltas.
Los escoltas que la protegen con triángulo de seguridad para ahuyentar a los trabajadores de la información.
Hay, sin embargo, trío de hechos concretos, específicos y macizos que expresan "con lealtad ciega" los resultados de su gestión como Fiscal desde el mes de septiembre del año 2019, en que tomara posesión, fecha cuando el exfiscal Jorge Wínckler Ortiz, a quien la 4T culpaba de todos los males, fue declarado prófugo de la justicia, y desde entonces, prófugo al fin, viviendo quizá "a salto de mata".
Primer hecho:
El asesinato en Córdoba de dos líderes de la izquierda.
El dirigente del PT, Grodet Ríos Andrade.
Y el Regidor electo de MORENA, José Escamilla Aguilera.
Fue a finales del mes de agosto.
Y, bueno, si el par de homicidios de militantes de la izquierda en Veracruz sigue impune, entonces, nada, absolutamente nada pueden esperar las cientos, miles de familia con parientes secuestrados, desaparecidos, torturados, asesinados, cercenados, pozoleados, sepultados en fosas clandestinas.
Segundo hecho:
Lo dicen los Colectivos de Veracruz, esperanzados, ajá, con la justicia, cuando la esperanza está hecha talco y polvo en el palenque público.
Hay más de mil restos y cuerpos sin identificar por la Fiscalía General de Veracruz.
Más de mil restos y cuerpos y que en gran parte fueron descubiertos por los mismos Colectivos en una frenética búsqueda de los suyos.
Y por más y más y más y más que ellos han clamado atención con hechos y resultados de la Fiscalía, oídos sordos.
Ni los ven ni los sienten como dijera el presidente orejón.
Nunca ha de olvidarse que según el sacerdote José Alejandro Solalinde Guerra, Veracruz es el peor fosario de México.
El tercer hecho proviene desde adentro del aparato gubernamental.
Lo dice el ORFIS, Órgano de Fiscalización Superior.
Ellos tienen abiertas 263 (doscientas sesenta y tres) indagatorias por presuntos malos manejos en la Cuenta Pública del año 2019 de la 4T en Veracruz.
Es decir, en el primer año de Cuitláhuac García.
Indagatorias, dice el ORFIS, que pudieran convertirse en denuncias penales.
Denuncias penales contra el gobierno de Cuitláhuac en el tiempo de la purificación moral y la honestidad valiente.
Además, han interpuesto doscientas denuncias penales en la Fiscalía en contra de yunistas, duartistas y fidelistas.
Y únicamente, muchos meses después, con las doscientas denuncias penales, dos detenidos en el penal de Pacho Viejo.
El obradorismo en el Estado jarocho, operando en el día con día en contra de la corrupción y el pillaje de los funcionarios públicos.
La 4T.
La purificación moral.
La honestidad valiente.

ACTUARON CON PRONTITUD

Claro, los ciudadanos de a pie clamando justica "pronta, rápida y expedita" soñaríamos con que la Fiscalía General actuara, digamos, con la prontitud como en el caso del asesinato de la hermana del periodista y caricaturista y funcionario público de la 4T en Coatzacoalcos, el maestro universitario, Jesús Hernández Tea.
A ella, dueña de restaurante de mole en el pueblo, la mataron el sábado 30 de octubre.
Y el domingo, el presunto homicida estaba preso.
¡Bendito el Ser Superior!
La constante, sin embargo, es la impunidad.
La impunidad, reinando de norte a sur y de este a oeste del Estado jarocho.
Veracruz, oliendo a pólvora y sangre.
Pero también, a impunidad.
Y, bueno, el viejito del barrio dice que el único aval de un ser humano, más, mucho más de un político, son los hechos.
Los resultados concretos, específicos y macizos.
Por eso, el grueso de la población electoral doliente, padeciendo el sufrimiento familiar y amical, rezando en la iglesia, en misa y el rosario, para un Veracruz con procuración de justicia.

EL DESTINO DE LA FISCAL

Se ignora el proyecto político y el tamaño de sus ambiciones de la Fiscal General.
Quizá, por ejemplo, soñaría con terminar los 9 años en la Fiscalía General.
Más, considerando que su par de antecesores (Jorge Wínckler y Luis Ángel Bravo Contreras) fueron elegidos por 9 años y se les aparecieron los dinosaurios y ni modo, dejaron inconcluso el periodo y fueron obligados a renunciar.
Pero en el día con día, en el hacer y deshacer de las semanas y los meses y los años, solo puede cosecharse un cultivo en el campo siempre y cuando sea regado en tiempo y forma y nutrido con elementos químicos y combatiendo las plagas.
Y así como va, dejando tanta insatisfacción social en el camino de los Colectivos, las ONG y familiares de las víctimas, se antoja difícil un final feliz.
Más si el sucesor de Cuitláhuac García Jiménez pertenece a otra tribu.