Reportero amenazado
•Políticos y caciques
•Ignacio Carvajal García
ESCALERAS: Un reportero, el mejor cronista del Estado de Veracruz, está amenazado de muerte. Unos políticos municipales y estatales están furiosos con su pluma. Uno de ellos, incluso, ya lo intimidó en el palenque público.
Y nadie desearía que Ignacio Carvajal García sufriera un ataque de caspa porque, entonces, desde ahora existen presuntos.
Incluso, el cronista lleva una bitácora de hechos concretos y específicos de las agresiones, calambres enviados, incluso, acoso con intimidaciones directas e indirectas.
Luis Velázquez
Más cuando se trata de un reportero honesto, íntegro, honrado, capaz, eficiente y eficaz.
PASAMANOS: Las amenazas de muerte surgieron a partir de que los políticos tienen la piel frágil, muy frágil, y les encorajina que “en la plenitud del pinche poder” un trabajador de la información se ocupe de sus páginas negras.
El estercolero que están dejando, ejerciendo el poder.
Incluso, algunos, políticos sin escrúpulos que se han metido hasta con su familia, cuando él ahí está, de frente, sin rodeos, cara a cara.
Y cuando, además, y en todo caso, si uno que otro se siente y cree agraviado, calumniado, difamado, entonces la ley es clara.
CORREDORES: Igual que todos los reporteros, fotógrafos, editores, cuando son amenazados, el respetado y respetable cronista está llevando una vida metódica y austera, digamos, como medida previsora, si de algo sirviera, pues cuando el diablo se atraviesa toda prudencia resulta innecesaria.
Pero, bueno, cuando la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas, CEAPP, ha reportado más de cincuenta agresiones a reporteros en el tiempo de la 4T…
Y cuando van cinco reporteros asesinados, todos corresponsales…
Y cuando de Miguel Alemán Velasco a Cuitláhuac García, la estadística de la muerte de periodistas llega a treinta cinco ejecutados…
Y cuando el 90 por ciento de los reporteros asesinados sigue en la impunidad, hay razones de peso y con peso para ocuparse con el caso de Ignacio Carvajal.
BALCONES: Los políticos que lo tienen amenazado son presidentes municipales y caciques. “Señores de horca y cuchillo”. Con pistoleros al servicio. Habituados a salirse con la suya y a que nadie los toque.
Es el mismo caso de unos secretarios del gabinete legal de la 4T. La mismita que se siente orgullosa de la libertad de expresión y que, bueno, en ningún momento es una concesión de ellos pues está garantizada en la Constitución Política.
Dueños del poder, poder efímero, se creen y sienten “la mamá de los pollitos”.
PASILLOS: Por eso, Veracruz, “el peor rincón del mundo para el gremio reporteril”.
Por eso, Veracruz con el más alto número de reporteros asesinados… más allá de que hubieran tenido relaciones peligrosas como suelen asegurar desde el poder y sin aportar pruebas.
El colega escribe. Es su oficio. Además, es un gran activista social al lado de los Colectivos, integrados con madres y padres con hijos desaparecidos.
Y con frecuencia se ocupa y a profundidad de las víctimas escarbando cositas con los familiares.
VENTANAS: La pluma de Ignacio Carvajal se ha vuelto incómoda. Más peligrosa que una Magnum.
Además, se insiste, es el mejor cronista de norte a sur y de este a oeste de Veracruz.
Y como es un símbolo del periodismo sería grave, terrible, que sufriera un ataque de caspa.
Simplemente, Veracruz se incendiaría y las entrañas del poder político se estremecerían.
Toda vida humana es invaluable. Y el asesinato de los 35 (treinta y cinco) reporteros en los últimos 23 (veintitrés) años integra un capítulo sórdido, siniestro y sombrío del Estado de Derecho en la tierra jarocha.