Y con todo, siguen resistiendo la adversidad, el hambre y la miseria, el desempleo galopante, la violencia, la inseguridad en el diario vivir.
Sin doblarse ni arrodillarse.
Si se quedan en sus pueblos, la muerte lenta en vida. Y si migran a otras latitudes geográficas, la esperanza de hallar un empleo seguro y digno y salvar la vida de hijos y parejas.

LUNES
En sus pueblos el infierno

Los migrantes huyen de sus pueblos. En América Central, Honduras, Guatemala y San Salvador. De pilón, y ahora, de Haití y África.
Y también de México a Estados Unidos.
Y migran apostando a la solidaria generosidad de la gente de pueblo en pueblo por donde caminan.
Salen con una escasa y limitada morrallita en la bolsa, con la esperanza inflamada para que la población los ayude con un taquito.
En algunos poblados se instalan unas horas, unos días, entre otras cositas, pidiendo limosna en el crucero, en las colonias, en las zonas urbanas, que de granito en granito de maíz suele llenarse el buche de las gallinitas.
En el morral llevan una o dos muditas de ropa. En todo caso, la que traen y una de reserva y cuando pasan a orilla de un río, una laguna, se detienen para un remojón y bañarse y lavar su ropa.
Y por lo general, cargando con los niños, unos caminando, otros bebés, otros, incluso, en el vientre materno.
Son familias donde todos han de migrar, porque ningún caso existe para seguir arraigados en el infierno de sus pueblos.

MARTES
¡Vaya destino humano!

El mal fario y los astros en contra los persiguen.
Primera persecución: huyen de la jodidez y también de la violencia. Los carteles y cartelitos. Las bandas.
Y los malandros los secuestran. Los hombres, para ser habilitados como sicarios. Las mujeres, para las tareas del hogar y la prostitución.
Pero también, para el cobro de un rescate a las familias en sus países de origen.
Segunda persecución: las policías estatales y municipales, la policía migratoria y la Guardia Nacional para detenerlos y repatriarlos.
Tercera persecución: “los polleros”, cobrando cantidades millonarias y de ser necesario, abandonarlos en el camino, tanto en el viaje del Centroamérica a la frontera sur y frontera norte de México como en el viaje, con frecuencia sin retorno, por el desierto y el cruce del río Bravo, donde suelen fallecer en el intento.
Cuarta persecución: la feroz política migratoria de Estados Unidos.
Por eso, el sacerdote de la Teología de la Liberación, José Alejandro Solalinde Guerra, asegura que Veracruz constituye el peor paso para los migrantes, el infierno tan temido.

MIÉRCOLES
Cacería de migrantes

La foto tomada en Texas, Estados Unidos, recorrió el planeta:
Agentes de la Patrulla Fronteriza trepados en caballos broncos y briosos persiguiendo, mejor dicho, cazando como si arrearan ganado a un montón de haitianos.
Entre ellos, mujeres embarazadas y padres cargando a los hijos menores. Incluso, bebés en sus brazos.
Los rangers del presidente Joe Biden, como si fueran los hermanos Almada en película mexicana cazando a los asesinos, cuáqueros y ladrones de bancos a cambio de la recompensa.
Mientras, a orilla del río Bravo, montón de patrullas de la Policía Migratoria formadas en fila india, listas para lanzarse contra los migrantes haitianos por si las dudas fracasaban los rangers desde sus caballos.
En contraparte, y en su paso por Veracruz, unos cincuenta haitianos decidieron quedarse a vivir entre nosotros.
En el transcurso de la semana aceptaron la posibilidad y empezaron a tramitar papeles en el Instituto de Migración.
Desde luego, poco significará Veracruz como paraíso terrenal considerando que el primer año del COVID dejó 140 mil personas desempleadas, pero, bueno, la esperanza nunca ha de perderse.
En el otro lado del palenque público, en Estados Unidos hay un millón de jarochos como migrantes, muchos de ellos, la mayor parte quizá, sin papeles.
De los meses de enero a julio de este año, EU repatrió a un total de 8 mil 71 paisanos de Veracruz.

JUEVES
Éxodo económico y social

Migrantes de América Central, Haití y Veracruz, y del país, a Estados Unidos.
En todos ellos un eje rector, como es la errática política económica de los gobiernos en sus pueblos para animar la creación de empleos en las regiones indígenas, rurales, suburbanas y urbanas.
Además, empleos pagados con dignidad humana, pero más aún, con justicia económica y social, y con las prestaciones establecidas en la Ley Federal del Trabajo.
La imaginación aplica al poder público en Veracruz para crear empleos puede cavilarse a partir de la siguiente circunstancia:
La secretaría de Desarrollo Económico y el Ayuntamiento de Xalapa lanzaron tianguis de higos, mangos y pambazos que para fortalecer la economía regional.
En el otro lado del charco, cada vez más paisanos soñando con la tierra prometida en Estados Unidos.

VIERNES
Cañerías en Veracruz

Veracruz cohabita en las grandes ligas del feminicidio. Está ubicado entre el primero y el cuarto lugar.
Y Veracruz se estrenó en el handicap nacional el 9 de diciembre del año 2018, 9 días después de la toma de posesión del góber jarocho de la 4T., tiempo para cuando entonces iban ya treinta y dos asesinados.
Fue en los límites de Isla y Rodríguez Clara. Unos migrantes eran trasladados en un carro de carga y en la madrugada fueron emboscados y murió la migrante originaria de Guatemala, Herlinda Ruiz Tapería, de 28 años de edad.
Además, varios ilegales heridos, entre ellos, un niño de 3 años, quien viajaba con sus padres a Estados Unidos.
De inmediato, el secretario General de Gobierno, recién llegado de Baja California, su tierra adoptiva, Eric Cisneros Burgos, se mostró como peleador callejero.
Luego luego, sin la mayor investigación, inculpó a los policías municipales de Isla.
Entonces, el alcalde de Isla le reviró culpando a “los polleros”.
Después del rafagueo verbal entre uno y otro político, hasta la fecha, ningún detenido, ningún indiciado, y la carpeta de investigación, en el archivo y el abandono.
Meses después, el ex Fiscal General, Jorge Wínckler Ortiz, prófugo de la justicia, viviendo “a salto de mata” desde septiembre del año 2019, fue culpado de aquella impunidad.
Tal es la política migratoria de Veracruz, la entidad federativa con un millón de paisanos en EU.