En sus orígenes, en Persia, el sátrapa era el hombre público que alcanzaba el grado más elevado de la jerarquía gobernante. Se le consideraba el protector de la tierra y del país.
Incluso, el rey lo elegía por dedazo y lo imponía, digamos, como el político más leal y más honesto y más capaz.
Y hasta lo vitoreaba, levantaba la mano y desparramaba incienso a su paso.
Luego derivó a otro significado, el peor.
Dictador degenerado.
El político que gobierna con despotismo y arbitrariedad.
El funcionario público que hace gala de la ostentación del poder y la autoridad.
Entonces, Jesús Zambrano llamó sátrapa al góber obradorista del Golfo de México.
Lo hizo, a partir de que en Tuxpan fuera detenido Rogelio Franco Castán, líder del PRD en Veracruz en el primer tiempo de "Los Chuchos", diputado federal y secretario General de Gobierno, y ahora, amarrado como candidato a diputado federal por la vía plurinominal, es decir, sin hacer campaña ni gastar un solo centavito.
La orden de aprehensión de la Fiscalía General en contra de Franco Castán fue expedida, dijo "El Chucho", 48 horas después de que MORENA presentara ante el OPLE, Organismo Público Local Electoral, una queja en contra de su nominación.
Y fue detenido, más que por el delito de violencia intrafamiliar, un expediente viejo, histórico, milenario, antiguo y bíblico, que por agravios a la autoridad policiaca.
Zambrano llamó al góber jarocho sátrapa, porque "están utilizando al Ministerio Público para operar políticamente".
Falsas acusaciones llamó a las razones, motivos, pretextos, berrinches, etcétera, para su captura.
"Nada se le ha comprobado a Rogelio Franco" sentenció el dirigente nacional del PRD.
"La denuncia nunca fue comprobada".
"Son falsas acusaciones", insistió, para dar pie a un segundo adjetivo calificativo.
"Inepto gobernador de Veracruz" llamó al preciso de MORENA y la 4T y la purificación moral en Veracruz.
Incluso, en la prensa cacarearon las redes sociales de las hijas de Rogelio Franco, precisando que desde hace ratito sus padres están divorciados y que ellas aman más a su padre.

UNA RELACIÓN IMPETUOSA Y VOLCÁNICA
Vivió Rogelio Franco a la orilla del precipicio en la relación conyugal.
Durante un tiempo arrastró fama de golpeador, no de mujeres, sino de su pareja, madre de sus hijas, y la que está divorciado, incluso, ella vive con otra persona.
Y ahora, cuando está amarrado como candidato pluri a diputado federal, y que va por segunda ocasión, de nuevo el rafagueo.
Pareciera el mismo estilo de rafagueo en contra de, y entre otros, José Yunes Zorrilla, el candidato de la alianza PRI, PAN y PRD a diputado federal por el distrito de Coatepec, cuando la semana anterior le publicaron fotos del año 2018 entregando despensas como actuales.
El sistemático bombardeo en contra de varios funcionarios del bienio yunista.
El bombardeo a los hermanos Cirilo y Ponciano Vázquez Parissi, de Cosoleacaque.
El rafagueo al panista José de Jesús Mancha, ex presidente del CDE del PAN, yunista a morir, listo para la candidatura a presidente municipal de Tuxpan.
"Vamos a luchar" advirtió Jesús Zambrano.
"Cuitláhuac García no se saldrá con la suya".
Desde luego, Zambrano y Cuitláhuac son antiguos gladiadores políticos porque desde hace ratito, la relación entre ellos es impetuosa y volcánica.
Zambrano, con una carrera política vertiginosa y con más experiencia y fogueo.
Cuitláhuac, apenas, apenitas, construyendo una carrera de por sí meteórica.
En un dos por tres fue diputado federal y gobernador.

QUIEN SE LLEVA SE AGUANTA...
Algunos gobernadores han merecido otros adjetivos calificativos, pero ninguno, parece, como el actual.
Hubo un tiempo cuando los teóricos de la Ciencia Política festinaban su gran descubrimiento de que para gobernar Veracruz había de tenerse el prefijo "Ch" como característica.
Por ejemplo, y hasta donde se recuerda si recuerda bien:
Marco Antonio Muñoz Turnbell, El Chulo.
Fernando López Arias, El Chueco.
Rafael Murillo Vidal, El Chocho.
Rafael Hernández Ochoa, El Charro.
Fernando Gutiérrez Barrios, El Chulo dos.
Patricio Chirinos Calero, El Chiricuto.
Miguel Ángel Yunes, El Chucky.
Cuitláhuac García, El Sátrapa según Jesús Zambrano, El Estúpido según el alcalde Fernando Yunes Márquez.
Siento pena de la pena ajena con los apodos con que la población se refiere a Cuitláhuac García escribiría el jurisconsulto Francisco Berlín Valenzuela.
Pero más allá de tales sobrenombres, ningún jefe del Poder Ejecutivo Estatal ha sido tan maltratado con epítetos, insultantes, ofensivos, como el actual, quizá, nadie dudaría, a tono con el dicho popular de que "quien se lleva... se aguanta" y/o el estilo personal de ejercer el poder.

PROHIBIDO INJURIAR, LEY BOZAL, LEY MORDAZA

En 2 años y 3 meses y cacho que ya se han ido del sexenio (¡Tan rápido, caray!), el góber precioso ha merecido varios calificativos.
El salsero.
El fifí.
El sabadaba.
El catrinero.
El machetero.
Digamos, apodos light considerando que en todos los pueblos del mundo de cara al mar, la brisa marina y los mariscos inciden en el sentido del humor de la gente, y por lo general, un humor blanco, nunca ácido.
Pero ahora con los epítetos "El político estúpido" y "El político sátrapa", caray, palabras encendidas.
Por lo pronto, las reformas al Código Penal de Veracruz prohíben que "en las manifestaciones la gente pueda expresarse contra policías y de hacerlo podrán ser arrestados" (Notiver, 12 de marzo, 2021).
Nada fácil será que, si los tambores de guerra siguen soplando y resoplando, al ratito la mayoría de la bancada de MORENA en el Congreso local también reforme la ley para que quienes ofendan al góber... sean arrestados.
Así sea el alcalde jarocho o el líder nacional del PRD.
Ley Bozal.
Ley Mordaza.
Tapa-boca a los contestatarios.